Notes de Premsa

Russafa, 21 de octubre de 2016
RUSSAFA DESCANSA RECLAMA RESTABLECER LA PROHIBICION DEL APARCAMIENTO NOCTURNO EN EL CARRIL BUS Y UNA TARJETA NARANJA PARA SUS VECINOS ASOCIADA A UNA APLICACIÓN DE TELEFONIA MOVIL PARA GESTIONAR EL APARCAMIENTO PÚBLICO DISPONIBLE MEDIANTE UN SERVICIO DE PARQUING COLABORATIVO
Ruzafa es un barrio con vecinos y residentes, no una zona de ocio para la hostelería de la ciudad de Valencia. Es por ello que la movilidad, la accesibilidad, la circulación motorizada, el aparcamiento, la carga y descarga comercial, incluso el carril bus, no pueden pivotar en el barrio de Ruzafa en exclusiva sobre una actividad comercial, la hostelería de la ciudad de Valencia.
Las medidas reclamadas por RUSSAFA DESCANSA a la actual corporación municipal están reguladas en las ordenanzas municipales en vigor.  Esta asociacion vecinal solo reclama una menor permisividad municipal y una atención prioritaria por parte de la policía local y su nueva responsable de protección ciudadana para evitar una sensación generalizada de impunidad en el dominio público municipal, sus calles, plazas y aceras. 
Este sábado 22 de octubre por la mañana en el entorno de su mercado, RUSSAFA DESCANSA informará sobre las medidas de movilidad, accesibilidad y aparcamiento que propone para desaturar y recuperar espacios públicos de calidad en el barrio de Ruzafa. No son las medidas correctivas que corresponden a la declaración de una amplia ZAS en Ruzafa, que sí incluirá la limitación en el acceso motorizado a los no residentes, especialmente durante los fines de semana para reducir los niveles de contaminación acústica asociados al trafico motorizado en las zonas más saturadas. Es por ello que RUSSAFA DESCANSA continuará recogiendo firmas entre sus vecinos y vecinas para delimitar e incorporar las calles que beneficiarán de las medidas correctivas que corresponde establecer en las zonas acústicamente declaradas por saturación. 
 
Todo ello ante el silencio de la actual corporación municipal, máxime responsable de establecer medidas preZAS y evitar una amplia declaración administrativa y/o judicial de una ZAS en el todavia barrio de Ruzafa.

El ayuntamiento de Valencia hace tiempo que tiene diagnosticada la saturación del barrio de Ruzafa. Se encuentra contenida en la memoria que justificó la “Modificación de las Normas Urbanísticas del Plan Especial de Protección de Ruzafa – Sur Gran Via (PEPP-2) por la que se limitaba la apertura de nuevos locales hosteleros en Ruzafa.
En esta memoria técnica de mayo de 2014 se reconocía claramente no solo la saturación hostelera de Ruzafa (más de 300 establecimientos hosteleros sin considerar sus terrazas) sino sobre todo “las consecuencias o efectos negativos generados por una excesiva acumulación de este tipo de actividades” relacionando entre otras: el incremento del tráfico rodado, el aumento de las necesidades de aparcamiento y el consiguiente incremento de los niveles de ruido en la vía pública.
Resultaba obvio para el anterior consistorio que “el mayor número de establecimientos en un mismo espacio funcionan como reclamo de afluencia de personas e incremento de tráfico”, “multiplicando los efectos negativos descritos”. Sin embargo, este consistorio no desaturaba el barrio de Ruzafa de establecimientos públicos ni establecía por entonces medidas preventivas ni correctivas en materia de movilidad, circulación y aparcamiento particular o comercial. Todo ello para limitar el tráfico motorizado o la afluencia de personas en transporte privado a un barrio como el de Ruzafa con un déficit crónico de plazas de aparcamiento público y privado.
Tras la completa reurbanización, esta situación se agravó -especialmente para la carga y descarga comercial- con la ampliación de aceras y sobre todo de chaflanes, hoy “orejones” con macroterrazas hosteleras.
El anterior gobierno municipal simplemente limitó la apertura de nuevos locales con el Plan Ruzafa.
En modo alguno se priorizó con tal plan el espacio público como lugar de encuentro y sociabilidad vecinal, ni por supuesto un uso equilibrado entre vecinos, comercios de proximidad y el resto de actividades comerciales, especialmente la hostelera.
La plaza más emblemática de Ruzafa, la plaza del mercado y su iglesia, es una muestra suficientemente significativa del maltrato a los espacios públicos en el barrio de Ruzafa, solo hace falta verla por las mañanas durante el mercado municipal pero también sus fines de semana como mero aparcamiento indiscriminado. No ha sido ni es una prioridad municipal ni del actual ni del pasado gobierno municipal como el espacio público más representativo de sus vecinos, a pesar de la ingente inversión en el barrio. 


No todos los vecinos pueden desplazarse en transporte público al trabajo desde un barrio reurbanizado por completo que además ha limitado considerablemente el aparcamiento público disponible. Aparcar es cada vez más imposible y no se puede soslayar que más plazas de aparcamiento de acceso indiscriminado las mas de las veces no es la solución pues incluso acrecienta las necesidades de aparcamiento publico para los no residentes.
A este respecto, Russfa Descansa propone la implantación de la tarjeta naranja para residentes y vecino de Ruzafa. Así como el establecimiento de fórmulas de gestión de las plazas disponibles en tiempo real, basadas en las nuevas aplicaciones informáticas de intercambio colaborativo entre vecinos y asociadas a tal tarjeta. Se introduciria asi un servicio colaborativo limitado a los vecinos autorizados para una mejor gestion del aparcamiento publico disponible en cada momento, para disminuir la contaminacion asociada a la circulacion viciada entre vecinos y residentes.
Las “falsas” calles y plazas peatonales de Ruzafa (Clero, Femenia, Prim, Sornells, Vivons y las del mercado e iglesia) deberían recuperar tal carácter, especialmente el residencial; terrazas al margen, no deberían ser centros logísticos de distribución y prolongado reparto hostelero de camiones de bebida más allá de lo autorizado (7 a 11 horas cuando incluso ha pasado la media noche), ni para el atajo o tráfico oportunista diurno (Clero y Sornells) ni para el aparcamiento motorizado nocturno de la clientela hostelera, botellón incluido (Clero, Prim, Sornells…). A falta de medidas preZAS, en estas calles deberian al menos cumplirse las ordenanzas en sus aspectos más básicos.
La carga y descarga comercial en Ruzafa ya es prácticamente hostelera y se realiza fundamentalmente fuera de lugar y horarios, los vecinos han llegado a constatarla pasadas las doce, de la noche. Un un hotel ubicado en el barrio realiza el trasiego de la lavanderia a horarios intempestivos. Una parte significativa de los bolardos son sistemáticamente eliminados por estos grandes vehículos de reparto sin posterior reposición municipal.
El transporte público en determinadas calles (Sueca) no puede ni circular y produce algo más que simples embotellamientos, sobre todo cuando coincide con la carga y descarga de determinados supermercados.
En un barrio saturado por actividades hosteleras el aparcamiento nocturno en el carril bus no tiene ninguna función disuasoria. En una de las zonas de la ciudad donde coexisten numerosos establecimientos públicos y actividades que dan lugar a niveles sonoros exteriores que ya requieren actuaciones previas a la declaración de una zona acústicamente saturada, el aparcamiento nocturno en el carril bus solo tiene un efecto llamada en un barrio diagnosticado como ZAS por este ayuntamiento. Debería ser prohibido no relajado su amplio horario. Sin olvidar que autorizar esta modalidad de aparcamiento en las actuales y amplias franjas horarias (22 hras. 8 hras.) acrecienta los problemas de circulación mientras están ocupados por los vehículos privados de la clientela hostelera, tanto al servicio público privado de los taxistas durante sus horarios nocturnos como al comienzo del transporte publico de la EMT. Todo ello al margen de consolidar falsos derechos de aparcamiento privado y a contribuir al aparcamiento indiscriminado en cualquier sitio y hora por imitación.
En Ruzafa paradójicamente lo único que más o menos respeta la hostelería y, sobre todo, hace respetar la policía local es el carril bici, la "acera" mas transitable y accesible del barrio.
El barrio Ruzafa tiene la mayor parte de los componentes de las zonas saturadas por una única actividad, incluida la circulación viciada, rápidos embotellamientos, provocados por la afluencia masiva de visitas motorizadas para aparcar privadamente. En el núcleo histórico y tradicional de Ruzafa, así como en su ensanche popular, la clientela hostelera busca e insiste en la búsqueda de una plaza que no existe y menos aun tras la completa reurbanización del barrio de Ruzafa para la hostelería de la ciudad de Valencia. Todo ello acrecienta los niveles de contaminación atmosférica y acústica.
Todos estos problemas trascienden las competencias en materia de movilidad municipal por lo que también requieren la atención prioritaria de la policía local y su nueva responsable de protección ciudadana.
Ruzafa es un barrio con vecinos y residentes, no una zona de ocio para la hostelería de la ciudad de Valencia. Es por ello que la movilidad, la accesibilidad, la circulación motorizada, el aparcamiento, la carga y descarga comercial, incluso el carril bus, no pueden pivotar en exclusiva sobre una actividad comercial, la hostelería de la ciudad de Valencia. Ello es así cuando además esta modalidad de negocio está calificado legalmente como molesto por ruidos, vibraciones y olores, y se desarrolla en este barrio cada vez más en horarios nocturnos y cada vez más incompatibles con el trabajo y el descanso vecinal. Una actividad que además se ha apropiado de la mayor parte de sus espacios públicos a unas tasas municipales irrisorias, irresponsables y discriminatorias con respecto al comercio de proximidad, impidiendo las más de las veces la mera movilidad de sus vecinos por el barrio, no solo a los más mayores y más pequeños, sino incluso la accesibilidad a las propias viviendas y no solo en las “falsas” calles peatonales aterrazadas, sino también en todos los cruces con “macroterrazas”.
No corresponde a los vecinos de Ruzafa garantizar el cumplimiento de las ordenanzas que regulan la convivencia en la ciudad de Valencia, pero sí reclamar su cumplimiento a quien sí le corresponde hacerlas cumplir, esta corporación municipal. Este ayuntamiento no puede elevar su dejación de funciones publicas en todos los ámbitos porque si bien una terraza mal "aparcada" o su cierre fuera de horario continúa siendo un incumplimiento no sancionado, el mal aparcamiento motorizado que a veces requiere incluso grúa ha de continuar siendo sancionado con más rigor, al igual que la carga y descarga comercial fuera de lugar y horario, el trafico oportunista...
Todas las medidas anteriormente reclamadas por Ruzafa Descansa en materia de circulación, transporte y aparcamiento publico, carga y descarga comercial a la actual corporación municipal constan y están reguladas en las ordenanzas municipales en vigor. No son las medidas correctivas que corresponden a la declaración de una amplia ZAS en Ruzafa, que sí incluirá entre otras la limitación en el acceso motorizado a los no residentes durante los fines de semana.
Valencia, 21 de octubre de 2016

Ruzafa, 13 de octubre 2016

RUSSAFA DESCANSA ALEGARÁ LAS ORDENANZAS FISCALES DE TERRAZAS DE 2017, POR IRRISORIAS, RIDICULAS Y DESLEALES CON EL COMERCIO DE PROXIMIDAD. En la mayor parte de la ciudad de Valencia su ayuntamiento ha bajado las tasas por terrazas, incluso en Ruzafa, un mero café paga ampliamente la tasa municipal establecida para 2017.

RUSSAFA DESCANSA RECLAMA MEDIDAS PRE-ZAS AL AYUNTAMIENTO DE VALENCIA Y SOLICITARÁ AMPARO AL SINDIC DE GREUGES PARA DESATURAR EL BARRIO DE TERRAZAS Y RECUPERAR ESPACIOS PÚBLICOS DE CALIDAD PARA SUS VECINOS. Esta asociación solicitará:

1) La reducción en un 50% de la superficie ocupada por terrazas privadas en las aceras situadas enfrente de los establecimientos hosteleros de los cruces más saturados del barrio.
2) La no renovación/revocación de las autorizadas en las aceras de menos de 3 metros (12 metros en las "falsas" calles peatonales),
3) La deshabilitación y no autorización de las instaladas en las fincas colindantes al local hostelero, aunque cuenten con habilitación.
4) La renovación/revocación de las terrazas autorizadas en locales con ambientación musical (salones lounge y disco-pubs), aunque cuenten con mesas y sillas en su interior.

El colectivo vecinal Russafa Descansa insiste en el carácter discreccional y la concesión a precario de las autorizaciones municipales de terrazas y en su compromiso por la recuperación de espacios públicos de calidad para sus vecinos, hosteleros y comercio de proximidad.

Mientras tanto este sábado 15 de octubre por la mañana en el entorno de su mercado, RUSSAFA DESCANSA continuará informando y recogiendo firmas entre sus vecinos para delimitar e incorporar las calles que beneficiarán de las medidas correctivas que corresponde establecer en las zonas acústicamente declaradas por saturación.

Todo ello ante el silencio de la actual corporación municipal, máxime responsable de establecer medidas preZAS y evitar una amplia declaración administrativa y/o judicial de una ZAS en el todavia barrio de Ruzafa.

TASAS MUNICIPALES POR TERRAZAS IRRISORIAS, RIDÍCULAS Y DESLEALES CON EL COMERCIO DE PROXIMIDAD

8 céntimos al dia el m2 de terraza, apenas 2,5 euros al mes, es lo que va a pagar la hosteleria de la ciudad de Valencia por sus terrazas en los espacios publicos de Ruzafa en 2017 y en la mayor parte de la ciudad de Valencia, menos aún que lo que paga en 2016.

Con un cafe al dia la hosteleria va a pagar ampliamente el m2 de terraza que le alquila el ayuntamiento a unas tasas irrisorias, ridiculas y, sobre todo, irresponsables en los espacios públicos de este barrio y de la ciudad.

A irrisorias tarifas de 8 céntimos al día por m2 del dominio público municipal la mayor parte de los comercios que todavía subsisten en Ruzafa ampliarían sus escaparates invadiendo las aceras como los hosteleros con sus terrazas, y acabarían su jornada laboral a unos horarios que no serían tan molestos para sus vecinos y ofrecerían un servicio de proximidad a lo largo de casi toda la semana compatible con la convivencia vecinal y la conciliación familiar.

A ese ridículo precio muchas comunidades de vecinos pagarían por no ser molestadas, incluso en las fincas colindantes con terrazas, en las que disfrutan con locales con ambientación musical (discopubs y salones lounge o bares con musica) que además disponen de terrazas y las puertas abiertas de sus establecimientos, en las "falsas" calles peatonales aterrazadas... en los ya conocidos cruces de Ruzafa con “macroterrazas” con horarios desde las 8 de la mañana hasta pasadas las 1:30 horas, un horario de "verano" que se prolonga 8 meses, que empieza en marzo y acaba en octubre. Una cifra que además no paga lo que se ensucia, a pesar de la obligación que tienen los hosteleros a limpiar sus terrazas.

Lo que realmente es abusivo es su limitado precio y sobre todo la saturación con terrazas de los espacios públicos de todos por una única actividad comercial calificada.

A pesar de las protestas de la federación empresarial de hosteleria por el aumento de las tasas, limitado prácticamente al centro histórico de la ciudad y el entorno del antiguo cauce del Turia (donde han pasado de 35,85 euros/m2/año de 2016 a 62,37 euros/m2/año para 2017), lo que ha quedado suficientemente demostrado es la irresponsable y exclusiva apuesta de este gobierno municipal en determinados barrios, como el de Ruzafa, por una única actividad.

En vez de promocionar el entramado comercial, su diversidad, que es la que hace barrio y retiene población, este gobierno municipal apuesta y "subvenciona" una única actividad: la hostelera -una actividad calificada como molesta por ruidos, vibraciones y olores- que ocupa indiscriminadamente y a discrección de este gobierno municipal su dominio público a tasas irrisorias, ridiculas y desleales, en este caso, con el comercio de proximidad.

En Ruzafa este gobierno municipal ha bajado las tasas de las terrazas desde los 35,85 euros/m2/año de 2016 a 28,65 euros/m2/año para 2017, en un barrio en el que las terrazas son uno de los principales focos de la saturacion acústica, que este consistorio ademas subvenciona de tantas formas, pues no recauda ni lo se ensucia.

No se puede socializar el ruido entre los vecinos y residentes, privatizar las aceras y plazas, en Ruzafa con "macroterrazas" y usar tan intensivamente los espacios públicos a un coste tan bajo, a unas tasas que las más de las veces este consistorio no consigue recaudar, una de cada tres matriculaciones de terrazas no es abonada por la hosteleria de la ciudad de Valencia. Todo ello al margen de los reiterados incumplimientos de la ordenanza de terrazas (horarios, sobreocupaciones,...) que no están siendo ni controlados ni inspeccionados ni sancionados por los responsables municipales, incluida la concejalia de protección ciudadana.

Hasta cuanto está dispuesto este consistorio a subvencionar un "motor esencial para el desarrollo economico" de la ciudad que al parecer solo puede subsistir como negocio ocupando la calle a precios de risa y a costa del malestar vecinal. A estas tasas no hay dominio público municipal suficiente para una única actividad: De hecho la hosteleria de la ciudad de Valencia está modificando y ampliando sus terrazas en calles y cruces saturados de Ruzafa.

Son sólo los vecinos los que están pagando un elevado precio por la saturación de sus aceras, incluida la mera movilidad y accesibilidad a sus viviendas, con la consiguiente contaminación acústica de sus entornos vitales mas próximos: a pie de calle, incluso pegadas a sus fachadas, en fincas colindantes, en locales con ambientación musical (discopubs y salones lounge o bares con musica), en "falsas" calles peatonales aterrazadas... cruces como el de Sueca-Puerto Rico con las más de las veces hasta 400 clientes hosteleros en terrazas privadas, en espacios abiertos que no se pueden insonorizar y más allá de las 1:30 horas que establece la ordenanza.

El colectivo vecinal Russafa Descansa alegará sobre las nuevas tasas de terrazas establecidas por el actual gobierno municipal para los próximos ejercicios por considerar abusivo el uso indiscriminado del dominio publico municipal por una única actividad comercial y a unas tasas que no cubren ni lo que ensucian, pero si ocupan los espacios publicos de todos, impidiendo la mera movilidad por nuestros barrios y la accesibilidad a nuestras viviendas.

MEDIDAS PRE-ZAS EN RUZAFA

Al margen de alegar las tasas municipales de terrazas, Russafa Descansa va a continuar reclamando al Ayuntamiento de Valencia que establezca medidas previas a la declaración de Ruzafa como Zona Acústicamente Saturada (ZAS) de acuerdo con el artículo 50 de la Ordenanza municipal de Protección Contra la Contaminación Acústica.

Mientras tanto este colectivo vecinal continuará recogiendo firmas, este sábado 15 de octubre por la mañana en el entorno del mercado de Ruzafa, para delimitar e incorporar las calles que beneficiarán de las medidas correctivas que corresponde establecer en las zonas acústicamente declaradas por saturación.

RECOGIDA FIRMAS AMPARO SINDIC DE GREUGES

Al mismo tiempo, el colectivo vecinal Russafa Descansa también recoge este fin de semana firmas entre sus vecinos para solicitar al Síndic de Greuges amparo para proteger los derechos básicos y fundamentales vulnerados por la contaminación acústica de los residentes y vecinos del barrio valenciano de Ruzafa.

Ante la inactividad y permisividad municipal, esta asociación recoge firmas desde principios de septiembre para que el “defensor del pueblo valenciano” requiera al Ayuntamiento de Valencia para que establezca medidas correctivas -a corto plazo y de alcance- para revertir la saturación del barrio de Ruzafa y mejore minimamente su calidad ambiental.

MEDIDAS PRE-ZAS INSTADAS AL SINDIC DE GREUGES PARA LA DESATURACIÓN DEL DOMINIO PÚBLICO MUNICIPAL CON TERRAZAS

Entre las medidas preZAS que Russafa Descansa insta al Sindic de Greuges que requiera al Ayuntamiento de Valencia en su recogida de firmas se encuentra la mera aplicación del articulo 59 de la ordenanza municipal que regula las terrazas hosteleras. Este artículo establece que “Cuando por el Ayuntamiento se constate, a la vista de las nuevas peticiones de ocupación y de las terrazas ya autorizadas en un determinado ámbito, que existe una saturación de terrazas en el dominio público, los límites máximos señalados en el artículo anterior se reducirán aplicando criterios correctores en función del grado de saturación de la zona”. Esta circunstancia está suficientemente constatada en el mapa que acompañamos y especialmente en los ampliados y reurbanizados cruces solo para "macroterrazas" privadas y en las "falsas" calles peatonales de Ruzafa

Entre los criterios correctores básicos de la desaturación de terrazas para la recuperación de espacios públicos de calidad para sus vecinos y el comercio de proximidad, Russafa Descansa reclama:

1) La reducción en un 50% de la superficie ocupada por terrazas privadas en las aceras situadas enfrente de los establecimientos hosteleros en los cruces de las calles Cuba-Puerto Rico, Sueca-Denia, Sueca-Puerto Rico, Sueca-Buenos Aires, Cádiz-Puerto Rico-Cura Femenia, Literato Azorin-Cádiz-Reina María, Cádiz-Centelles-Sornells-Vivons, Pintor Salvador Abril-Pedro III y Pintor Salvador Abril- Dr. Sumsi.
2) La no renovación/revocación de las autorizadas en las aceras de menos de 3 metros por encontrarse pegadas a las fachadas de los edificios (12 metros en las calles peatonales para recuperar tal carácter).
3) La deshabilitación y no autorización de las instaladas en las fincas colindantes al local hostelero, aunque cuenten con habilitación.
4) La renovación/revocación de las terrazas autorizadas en locales con ambientación musical (salones lounge y disco-pubs), aunque cuenten con mesas y sillas en su interior.

Finalmente, el colectivo vecinal Russafa Descansa insiste en el carácter discreccional y la concesión a precario de las autorizaciones municipales de terrazas, tal y como establecen los artículos 9, 19, 43 de la ordenanza de ocupación del dominio público municipal en vigor. Las terrazas son meras autorizaciones municipales y actos discreccionales de este consistorio. No son derechos ni procesos reglados. De hecho, está limitada la transmisión de autorizaciones y concesiones en el artículo 18: “Las autorizaciones y concesiones para la ocupación del dominio público no podrán ser transmitidas ni cedidas a terceros, salvo que el Ayuntamiento haya otorgado su consentimiento expreso.”

El artículo 9 que fija los criterios rectores de la utilización del dominio público municipal determina en su punto 1 que “Las autorizaciones de ocupación del dominio público son actos discrecionales municipales”.

El artículo 19, relativo al otorgamiento de autorizaciones, establece que “Las autorizaciones de ocupación reguladas en la presente ordenanza se conceden a precario y podrán ser denegadas, modificadas, suspendidas temporalmente o revocadas en cualquier momento por el Ayuntamiento de Valencia por razones de interés público.”

El artículo 43, relativo al plazo de vigencia, establece en su punto 3 que “dado el carácter discrecional de este tipo de autorizaciones y su otorgamiento a precario, el Ayuntamiento estará facultado en cualquier momento para limitar, reducir o dejar sin efecto las mismas si entendiera que existen motivos de interés público que lo justificasen, sin derecho a indemnización o compensación alguna a las personas o entidades autorizadas, sin perjuicio del reintegro, en su caso, de la parte proporcional del importe abonado de la tasa correspondiente al período no disfrutado.

Como le recuerda reiteradamente el defensor del pueblo valenciano a este consistorio en todas sus recomendaciones le corresponden -a todas las administraciones públicas- la ineludible protección de los derechos fundamentales y constitucionales vulnerados por la contaminación acústica (inviolabilidad del domicilio, intimidad personal y familiar, integridad física y moral)

Ante tanto desamparo en la misma ciudad de Valencia, y la falta de medidas correctivas preZAS que le corresponde establecer a este gobierno municipal, la única alternativa que les queda a los vecinos de Ruzafa es la solicitud de una amplia delimitación de las calles residenciales beneficiadas por una declaración de ZAS para proteger legalmente sus derechos más básicos vulnerados por la contaminación y saturación acústica.


AV Russafa Descansa

Ruzafa, 30 de septiembre 2016 

RUSSAFA DESCANSA SOLICITARÁ LA INTERVENCIÓN DEL SÍNDIC DE GREUGES ANTE EL DESAMPARO DEL AYUNTAMIENTO DE VALENCIA EN LA PROTECCIÓN DE LOS DERECHOS FUNDAMENTALES VULNERADOS POR LA SATURACIÓN ACÚSTICA DEL BARRIO


El colectivo vecinal Russafa Descansa solicitará amparo al Síndic de Greuges para proteger los derechos básicos y fundamentales vulnerados por la contaminación acústica en el barrio valenciano de Ruzafa. Esta asociación recoge firmas desde principios de septiembre para que el “defensor del pueblo valenciano” requiera al Ayuntamiento de Valencia medidas correctivas para revertir la saturación del barrio de Ruzafa. Este sábado 1 de octubre por la mañana en el entorno del mercado de Ruzafa.


Entre las medidas reclamadas se encuentran la creación de una policía ambiental local, un registro público de establecimientos y autorizaciones, el desarrollo de efectivos planes de inspección, control y sanción, la inmediata convocatoria de la Mesa Municipal de Contaminación Acústica Ruzafa-Gran Vía y las propias de una declaración administrativa de una zona acústicamente saturada (ZAS) ante la inactividad y permisividad municipal en actividades calificadas por ley como molestas por ruido, vibraciones y olores en un barrio residencial con un amplio núcleo histórico tradicional protegido como Bien de Relevancia Local.


El pasado 23 de septiembre se reunieron la Defensora del Pueblo y los defensores del pueblo autonómicos en Pamplona y acordaron una serie de medidas para garantizar de manera real y efectiva los derechos vulnerados por la contaminación acústica (los derechos fundamentales a la integridad física y psíquica, la intimidad personal y familiar y la inviolabilidad del domicilio, así como los derechos de todos a un medio ambiente adecuado y a la protección de la salud).


Como indicaron las defensorías del pueblo en su reciente reunión “el ejercicio de la función pública de control ambiental de la contaminación acústica, como expresión de una buena administración al servicio de la ciudadanía, debe tener como objetivo irrenunciable garantizar el derecho a un domicilio libre de ruidos que permita a sus residentes disfrutar de su derecho al descanso”.
En casi año y medio de un nuevo consistorio está constatándose cada vez más que el ruido no está siendo tratado por el Ayuntamiento de Valencia como un problema de entidad que afecta seriamente a la calidad de vida de las personas, sino más bien como una “molestia” para el gobierno municipal cuando los vecinos de Ruzafa reclaman su ineludible intervención como le corresponde como institución pública. Al mismo tiempo se ha puesto en evidencia que el ruido se ha convertido en una “excusa” para el trato con rigor y la actuación de oficio solo contra determinados grupos hosteleros de la ciudad de Valencia que operan con varios establecimientos o concesiones en la dársena portuaria o en el antiguo cauce del Turia.
Como insisten estas instituciones públicas de protección ciudadana, “El ejercicio de la función pública relacionada con el control de la contaminación acústica hace necesario, además, que se elaboren planes de inspección dirigidos a verificar de oficio que los establecimientos e instalaciones que generan contaminación acústica dispongan de las correspondientes autorizaciones administrativas para su funcionamiento y que se respete el cumplimiento de las medidas correctoras impuestas.”
No obstante lo anterior, el Ayuntamiento de Valencia no está desarrollando de oficio ninguna campaña ni plan de inspección en los apartamentos turísticos que operan ilegalmente en fincas residenciales y que han proliferado en este barrio ante la inacción municipal. Menos aún en los establecimientos públicos que desarrollan una actividad calificada por ley como molesta por ruidos, vibraciones y olores en Ruzafa, especialmente en los locales con ambientación musical, que son los más incompatibles con el descanso y trabajo vecinal.
Estos locales musicales mantienen el “privilegio” de desarrollar una actividad calificada en zonas de predominio residencial por “seguridad jurídica” y este privilegio lo amplía el actual gobierno a costa del malestar vecinal cuando no realiza ni anualmente ni semanalmente inspecciones, auditorías acústicas, control de las insonorizaciones, ni tan siquiera control de sus aforos y limitadores de decibelios, y por supuesto inspecciones de bomberos a estos establecimientos públicos.
Todo ello en un núcleo histórico tradicional como el de Ruzafa y su amplio ensanche popular que no es una zona de ocio ni se encuentra en la alejada dársena portuaria ni en una ciudad de las ciencias dedicada en parte al ocio nocturno. Este colectivo vecinal vuelve a reclamar el mismo rigor y el desarrollo de inspecciones de oficio por parte de los responsables municipales en el barrio de Ruzafa como sí está teniendo lugar y con rigor en la “privilegiada” dársena.
Al margen de los planes de inspección, tal y como sí están desarrollando otras corporaciones municipales como la de Madrid o Barcelona, Russafa Descansa reclama un registro municipal de establecimientos públicos, terrazas y apartamentos turísticos en el que conste de una manera trasparente la información pública más relevante de las correspondientes licencias de apertura, expedientes y autorizaciones. El buen gobierno también es transparencia.
Este gobierno municipal continúa manifestando a través de sus diferentes responsables que en Ruzafa se actuó “tarde y mal” y sin embargo no actúa de oficio con planes de inspección y control, ni tan siquiera a instancia de parte. La dejación de funciones de este consistorio llega incluso al extremo de reclamar “careos” entre vecinos y hosteleros por incumplimientos reiterados de horarios de cierre, molestias asociadas al margen, que se podrían evitar simplemente cumpliendo y sobre todo haciendo cumplir y sancionando de oficio, como cuando un vehículo está mal estacionado. En vez hacer cumplir sus ordenanzas y garantizar la convivencia, este consistorio protege con celo la “seguridad jurídica” de los que insistentemente molestan y contribuyen a la saturación acústica del barrio de Ruzafa, especialmente, la de una "minoría ZAS" de la ciudad de Valencia responsable del ciclo completo de malestar más acusado.
Por todo ello los residentes de Ruzafa no tienen más remedio que recurrir a una institución pública a la que no puede eludir esta corporación municipal y sus responsables en materia de actividades, inspección, dominio público y protección cudadana, la Sindicatura de Agravios.
El colectivo vecinal Russafa Descansa solicitará al Síndic de Greuges amparo para proteger los derechos básicos y fundamentales vulnerados por la contaminación acústica de los residentes y vecinos del barrio valenciano de Ruzafa. Ante la inactividad y permisividad municipal, esta asociación recoge firmas desde principios de septiembre para que el “defensor del pueblo valenciano” requiera al Ayuntamiento de Valencia para que establezca medidas correctivas -a corto plazo y de alcance- para revertir la saturación del barrio de Ruzafa y mejore minimamente su calidad ambiental.
Entre las medidas reclamadas por los vecinos de Ruzafa al Sindic de Greuges se encuentran las propias de una declaración administrativa de una zona acústicamente saturada (ZAS) de acuerdo con la ordenanza municipal de protección contra la contaminación acústica.
Asimismo esta asociación vecinal reclama en Ruzafa y en el resto de la ciudad una policía ambiental local para la inspección “in situ”, en el foco de emisión de los ruidos, para que esta “policía verde” desarrolle una correcta medición de los niveles de ruido en los domicilios y proceda si es el caso a una intervención cautelar que suponga el cierre inmediato de los establecimientos públicos molestos. La sindicatura de agravios le está reclamando a este consistorio -y en este barrio- auditorías acústicas y sonometrías que no están teniendo lugar a pesar de la insistencia de esta institución en locales con ambientación musical instalados en Ruzafa.
Por último, en el amparo al Sindic de Greuges esta asociación vecinal le instará para que el Ayuntamiento de Valencia aplique las medidas correctivas del art. 59 de la Ordenanza Reguladora de la Ocupación del Dominio Público Municipal, dadas las continuas reclamaciones que están llegando a esta institución y constatada la saturación de Ruzafa por terrazas hosteleras en la mayor parte de los cruces, bastantes con “macroterrazas”, plazas y calles, incluidas las “falsas calles peatonales”.
La asociación vecinal Russafa Descansa reclama la inmediata convocatoria de la Mesa Municipal de Contaminación Acústica Russafa-Gran Via. Desde febrero de 2016 no se ha reunido ni convocado la organizada por la concejalía responsable de calidad ambiental y contaminación acústica del Ayunatamiento de Valencia, al margen de no haberse llevado adelante ninguna propuesta ni resolución por parte de los diferentes departamentos municipales convocados (inspección, actividades, dominio público, protección ciudadana y calidad ambiental). Todo ello cuando es manifiesto el exceso de locales de ocio nocturno o el funcionamiento de actividades que generen molestias de convivencia graves y continuadas en el saturado barrio de Ruzafa (350 establecimientos hosteleros, 230 con terrazas, 450 apartamentos turísticos).
La capacidad de carga de Ruzafa como mera zona de ocio hace tiempo que superó sus límites, ya es una zona acústicamente saturada (ZAS). A falta de medidas preZAS -que le corresponde establecer al actual gobierno municipal de acuerdo con el art. 50 de su ordenanza de proteccion contra la contaminación acústica- será precisa su declaración administrativa como ZAS.
Tal y como acordaron las defensorías del pueblo recientemente “Aunque lo deseable en un Estado de derecho es que la tutela del derecho de los ciudadanos a un domicilio libre de inmisiones acústicas que no tienen el deber jurídico de soportar, se ejerza por los órganos que tienen encomendada la potestad para ejercer esa función pública, las defensorías valoran de manera positiva las actuaciones de jueces, tribunales de justicia y fiscales a la hora de garantizar los derechos vulnerados por la contaminación acústica, cuando estos no son debidamente protegidos por las autoridades y funcionarios responsables en sede administrativa.”
Esta asociación vecinal no descarta reclamar al Síndic de Greuges que se comprometa “a realizar cuantas acciones estén legalmente a su alcance para proteger de manera eficaz el derecho de la ciudadanía a residir en un domicilio libre de ruido, incluso poniendo en conocimiento de la Fiscalía aquellos casos en que observen vulneraciones de derechos de la ciudadanía con una posible relevancia penal”.
Russafa Descansa va a continuar reclamando al Ayuntamiento de Valencia que establezca medidas previas a la declaración de Ruzafa como Zona Acústicamente Saturada (ZAS) de acuerdo con el artículo 50 de la Ordenanza municipal de Protección Contra la Contaminación Acústica. Mientras tanto este colectivo vecinal continuará recogiendo firmas, este sábado en el entorno del mercado, para delimitar e incorporar las calles que beneficiarán de las medidas correctivas que corresponde establecer en las zonas acústicamente declaradas por saturación.
Ruzafa, 30 de septiembre de 2016
 
 


Ruzafa, 24 de septiembre 2016 
DE LA DÁRSENA PORTUARIA AL BARRIO DE RUZAFA. DEL RIGOR AL TRATO DE FAVOR DEL AYUNTAMIENTO DE VALENCIA EN ZONAS RESIDENCIALES A LA MINORIA HOSTELERA “ZAS” DE RUZAFA 
Russafa Descansa reclama al Ayuntamiento de Valencia el estricto cumplimiento de la Ley de Espectáculos Públicos, Actividades Recreativas y Establecimientos Públicos de la Generalitat valenciana y la Ley de Protección Contra la Contaminación Acústica también en el barrio de Ruzafa.
  
Esta asociación vecinal exige la realización de inspecciones municipales para el control de aforos, insonorizaciones y la realización de auditorías acústicas en los locales con ambientación musical de Ruzafa, así como sonometrías en los entornos inmediatos de las discotecas que operan en este barrio. Todo ello, en el marco de las medidas preZAS que corresponde establecer a este ayuntamiento de acuerdo con el art. 50 de la Ordenanza municipal de Protección Contra la Contaminación Acústica.
  
El cumplimiento de la Ley de Espectáculos Públicos, Actividades Recreativas y Establecimientos Públicos de la Generalitat valenciana y la Ley de Protección Contra la Contaminación Acústica, incluidas las ordenanzas municipales, no corresponde ser exigido por el Ayuntamiento de Valencia solo a determinados locales de la ciudad en la dársena portuaria.
  
Los vecinos de Ruzafa quieren el mismo rigor municipal frente al trato de favor encubierto a todos los locales con ambientación musical (lounges, disco-pubs, discotecas y afters-hours) que tienen el privilegio de ubicarse en zonas y calles residenciales, muchos de ellos a menos de 65 metros: Cádiz, Carlos Cervera, Centelles, Cuba, Doctor Sumsi, Femenia, Gran Via Germanias, Literato Azorin, Matias Perello, Pedro III, Pintor Salvador Abril, Sueca, Tomasos...
  
En estas calles, el barrio de Ruzafa acumula 17 disco-pubs, 4 discotecas, 2 “afters” y un amplio número de bares con ambientación musical, los denominados salones lounge, que además disponen habitualmente de terraza. Un número de locales con ambientación musical y horarios, plenamente incompatibles con el descanso y trabajo vecinal, equivalente o superior a barrios como el Carmen declarados como Zona Acústicamente Saturada (ZAS).
  
Y a pesar del "privilegio" de encontrarse en zonas residenciales y a menos de 65 metros entre sí, estos discopubs, discotecas y afters no están siendo inspeccionados por esta corporación municipal con el mismo rigor que determinados locales musicales de la dársena portuaria. Tampoco están realizándose las correspondientes auditorias acústicas en establecimientos públicos que no disponen de las medidas adecuadas de insonorización ni están cumpliendo con sus correspondientes aforos. De acuerdo con resoluciones municipales al respecto, determinados locales musicales han estado programando sus limitadores de decibelios por encima de los niveles autorizados, incluso con limitadores no homologados. Por si no fuera suficiente para esta corporación municipal, algunos de estos locales además han ampliado recientemente sus dimensiones y aforo cuando la ordenanza de contaminación acústica en vigor nos les autoriza tales excesos por situarse en zonas residenciales y encontrarse estos locales a menos de 65 metros.
 
Como reconoció en su momento la anterior responsable de protección ciudadana, las discotecas deberían hacerse "corresponsables" del botellón que atraen a sus entornos. Discotecas y discopubs atraen como un imán tales prácticas a sus calles adyacentes, como las imágenes que acompañamos tomadas esta misma mañana del sábado, del habitual botellon del tunel la Gran Via Germanias (que cuenta con dos discotecas, una en la misma gran via y otra al principio de la calle Cuba, al margen de un discopub y lounge bar en esta avenida). Una de estas discotecas se promociona sin rubor en el mismo tunel como muestra la imagen que acompañamos. El botellon habitual del sábado noche en esta zona supera las imágenes aportadas y no suele ser visibilizado ni propagado pues las patrullas municipales se apresuran de buen domingo a limpiar el casi "macrobotellón" que tiene lugar en la gran via y su túnel, como si no hubiera pasado nada y fuera un "mal sueño" solo para sus residentes.
  
Un barrio vivo no tiene por qué ser tan molesto para sus vecinos: estos locales además están promocionando con invitaciones y carteles el ciclo completo del malestar en el barrio de Ruzafa (desde sus lounges con terrazas por las tardes hasta sus discotecas y afters, pasando por sus discopubs, todo ello hasta altas horas de la madrugada). El cartel fotografiado en el túnel es de una discoteca ubicada en la calle Tomasos. Esta minorÍa hostelera está promocionando, sobre todo, la declaración de una nueva zona acusticamente saturada en la ciudad de Valencia que perjudicará impasiblemente al conjunto de la hosteleria de este todavía barrio.
Con todo, es el ayuntamiento de Valencia el máximo responsable de este trato de favor a locales con ambientación musical incompatibles con el derecho al descanso y el trabajo vecinal en el barrio de Ruzafa. Sin embargo, esta corporación se limita a ser riguroso en la alejada dársena portuaria y se sitúa bien próxima a la minoría hostelera más ZAS que opera en Ruzafa.
  
Es el actual gobierno municipal a quien le corresponde de una manera ineludible la firme protección de derechos reconocidos como fundamentales por la legislación vigente a sus ciudadanos (inviolabilidad del domicilio, intimidad personal y familiar, integridad física y moral), derechos vulnerados sistemáticamente por estas modalidades de negocio empresarial con franjas horarias incompatibles en zonas de predominio residencial, más propias de polígonos industriales, por encima de favores a una minoría de otro grupo hostelero.
  
Ante tanto desamparo en la misma ciudad de Valencia, y la falta de medidas correctivas preZAS que le corresponde establecer a este gobierno municipal, la única alternativa que les queda a los vecinos de Ruzafa es la solicitud de una amplia delimitación de las calles residenciales beneficiadas por una declaración de ZAS para proteger legalmente sus derechos más básicos vulnerados por la contaminación y saturación acústica.


Ruzafa, 24 de septiembre de 2016


Ruzafa, 23 de septiembre 2016 

EL AYUNTAMIENTO DE VALENCIA BAJA LAS TASAS POR LAS TERRAZAS HOSTELERAS EN UNA ZAS
Russafa Descansa reclama al Ayuntamiento de Valencia que establezca medidas previas a la declaración de Ruzafa como Zona Acústicamente Saturada (ZAS) de acuerdo con el artículo 50 de la Ordenanza municipal de Protección Contra la Contaminación Acústica.
Russafa Descansa solicita la declaración de Ruzafa como zona saturada por terrazas. Este colectivo vecinal reclama la aplicación de las medidas correctivas del artículo 59 de la Ordenanza Reguladora de la Ocupación del Dominio Público Municipal, constatada su saturación en la mayor parte de los cruces, bastantes con “macroterrazas”, plazas y calles, incluidas las “falsas calles peatonales”, de Ruzafa por terrazas hosteleras.

1.- RUZAFA ZONA SATURADA POR TERRAZAS, SE BAJAN SUS TASAS

Ruzafa el barrio de las terrazas: los 350 establecimientos hosteleros disponen de más de 230 terrazas. En el mapa que acompañamos pone de relieve la saturación de Ruzafa con terrazas hosteleras.


El problema no es que haya terrazas en el dominio público municipal de Ruzafa, el problema es que sólo hay terrazas privadas en sus plazas, aceras, calles peatonales y, sobre todo, en sus recientes y ampliados chaflanes, que son sus espacios públicos.

400 mesas privadas / 1600 clientes hosteleros en 6 de los cruces más significativos de Ruzafa: calles Cuba-Puerto Rico (56 mesas), Sueca-Puerto Rico (106 mesas), Sueca-Buenos Aires (26 mesas), Cádiz-Puerto Rico-Cura Femenia (37 mesas), Literato Azorin-Cádiz-Reina María (90 mesas) y Cádiz-Centelles-Sornells-Vivons (74 mesas). En estos cruces sólo hay 7 bancos públicos de libre acceso cuando bastantes terrazas privadas -auténticas “macroterrazas”- superan las 17 mesas. Más de 60 personas en espacios abiertos a menos de 2 metros del vecindario.

A pesar de ser uno de los barrios de la ciudad de Valencia donde más han proliferado y donde más se han generalizado las molestias solo a su vecindario, el Ayuntamiento de Valencia, el máximo responsable de la resolución de su saturación reduce las tasas municipales a las terrazas hosteleras en Ruzafa. En el ejercicio 2017 las terrazas hosteleras que ocupan el dominio público municipal en este barrio pasaran a pagar 28,97 euros/m2/año cuando en el 2016 la correspondiente tasa se eleva a 35,85 euros/m2/año. Aunque el actual consistorio manifieste, a través de su responsable de Hacienda, que de momento estas tasas son una referencia, una propuesta de acuerdo, lo bien cierto es que en el barrio de Ruzafa como mucho las terrazas pagarán en el horizonte de 2021, tan sólo 30,25 euros/m2/año.

Por definición, una tasa como la de terrazas debería recaudar de acuerdo con el aprovechamiento privativo del dominio público, y permitir un uso ordenado de los espacios públicos. Sin embargo, a 28,97 euros/m2/año, que no llegan a 2,5 euros al mes por m2 de terraza privada, se está subvencionado un uso desordenado e irresponsable del dominio público municipal. Una cifra que además no paga lo que se ensucia, a pesar de la obligación que tienen los hosteleros a limpiar sus terrazas.

Una única actividad -bastante regulada y a desarrollar en establecimientos públicos- no tiene ningún inconveniente en generalizar su negocio en los espacios públicos y abiertos de todos los ciudadanos, dificultando la movilidad y la accesibilidad a sus propias residencias, ruidos y molestias al margen.

A irrisorias tarifas de 8 céntimos al día por m2 del dominio público municipal la mayor parte de los comercios que todavía subsisten en Ruzafa ampliarían sus escaparates invadiendo las aceras como los hosteleros con sus terrazas, y acabarían su jornada laboral a unos horarios que no serían tan molestos para sus vecinos y ofrecerían un servicio de proximidad a lo largo de casi toda la semana compatible con la convivencia vecinal y la conciliación familiar.

Queda suficientemente demostrado que la única apuesta municipal en determinados barrios, como el de Ruzafa, es la hostelera y en absoluto la mínima promoción de su entramado comercial, su diversidad comercial, que es la que hace barrio y retiene población.

No se puede socializar el ruido y usar tan intensivamente los espacios públicos a un coste tan bajo. Son sólo los vecinos los que están pagando un elevado precio por la saturación de sus espacios públicos y la contaminación acústica de sus entornos vitales. En entornos sobrecargados y saturados, sin espacios públicos para la relación, el intercambio y la sociabilidad no hay vecinos ni comercio: no hay barrio de Ruzafa sino un parque temático al servicio exclusivo de la hostelería de la ciudad de Valencia.

Es preciso apostar por la diversidad comercial propia de los barrios sostenibles para que continúen siendo habitables frente a la uniformidad hostelera más propia de los parques temáticos; un modelo de barrio en el que se garanticen la convivencia y el equilibrio de vecinos, comercios y hostelería, en el que no se fomente exclusivamente una única modalidad de negocio, el maduro y poco innovador negocio hostelero de bajo coste y elevado impacto ambiental para sus residentes.

Con las tasas previstas para 2017, lo relevante es que este gobierno municipal apuesta por un modelo de barrio de elevado impacto ambiental y social para sus vecinos y "low cost" para la hostelería. Todo ello en un barrio como el de Ruzafa saturado de terrazas, calles peatonales aterrazadas, y cruces con "macroterrazas", mientras se favorece a una minoría hostelera plenamente ZAS, la que cierra más allá de las terrazas. 
 
2.- DECLARACIÓN DE RUZAFA COMO ZONA SATURADA POR TERRAZAS Y ESTABLECIMIENTO DE MEDIDAS CORRECTIVAS PRE-ZAS: APLICACION ART. 59 DE LA ORDENANZA

El barrio de Ruzafa ya es una Zona Acústicamente Saturada (ZAS): acumula los negativos efectos de 350 establecimientos hosteleros, más de 230 terrazas y entorno a 450 pisos turísticos en más de 300 fincas residenciales destinados al alojamiento turístico de corta estancia y bajo coste. Russafa Descansa ha mapificado los extremos de tal saturación de actividades y establecimientos. Ante tal situación, le corresponde al Ayuntamiento de Valencia establecer las medidas preZAS, tal y como determina la ordenanza municipal de protección contra la contaminación acústica.

El colectivo vecinal Russafa Descansa considera que le corresponde al Ayuntamiento de Valencia establecer las medidas oportunas, dentro de su ámbito de competencia, tendentes a disminuir el nivel sonoro exterior de las calles del centro histórico tradicional de Ruzafa y su amplio ensanche popular hasta situarlo en el permitido en la Ordenanza de Protección Contra la Contaminación Acústica.

Russafa Descansa reclama al Ayuntamiento de Valencia que establezca las medidas previas a la declaración de una zona acústicamente saturada de acuerdo con el artículo 50 de la Ordenanza de Protección Contra la Contaminación Acústica. Este artículo relativo a “Actuaciones previas a la declaración de zona acústicamente saturada” establece que “en aquellas zonas de la ciudad donde existan numerosas actividades destinadas al uso de establecimientos públicos y niveles de recepción en el ambiente exterior, producido por la adición de las múltiples actividades existentes y por la actividad de las personas que utilicen estos establecimientos, que superen en más de 15 dBA los niveles fijados en el anexo II de la presente ordenanza, el Ayuntamiento podrá establecer las medidas oportunas, dentro de su ámbito de competencias, tendentes a disminuir el nivel sonoro exterior hasta situarlo en el permitido por el citado anexo.”

A tal efecto, Russafa Descansa solicita la declaración de Ruzafa como zona saturada por terrazas. Este colectivo vecinal reclama la aplicación de las medidas correctivas del artículo 59 de la Ordenanza Reguladora de la Ocupación del Dominio Público Municipal, constatada su saturación en la mayor parte de los cruces, bastantes con “macroterrazas”, plazas y calles, incluidas las “falsas calles peatonales”, de Ruzafa por terrazas hosteleras.

El articulo 59 de la ordenanza de terrazas establece que “Cuando por el Ayuntamiento se constate, a la vista de las nuevas peticiones de ocupación y de las terrazas ya autorizadas en un determinado ámbito, que existe una saturación de terrazas en el dominio público, los límites máximos señalados en el artículo anterior se reducirán aplicando criterios correctores en función del grado de saturación de la zona”.

Todo ello, a partir de la discrecionalidad municipal en las autorizaciones municipales de terrazas -que no son actos reglados ni licencias ni por su puesto patentes de corso de por vida- Es un tema de voluntad política, por lo que sí es posible reordenar los usos de los espacios públicos de Ruzafa para su desaturación, de forma que se recuperen como espacios de calidad para el encuentro, la relación y la sociabilidad de sus vecinos.

Todo ello en el marco de un “Plan de Ordenación de terrazas para la recuperación de espacios públicos de calidad para los vecinos, comerciantes y hosteleros de Ruzafa”. A tal efecto, en próximas semanas la asociación vecinal Russafa Descansa publicará una estudio cartográfico sobre densidades y el grado de saturación alcanzado por las terrazas en el barrio de Ruzafa.

Solo las medidas correctivas en las zonas saturadas, también por terrazas, contribuyen a la reducción de los niveles de contaminación acústica que padecen sus vecinos, a la mejora de su calidad de vida y a la protección de derechos básicos reconocidos como fundamentales, cuya salvaguarda resulta ineludible por parte de las instituciones publicas, incluido el Ayuntamiento de Valencia.

La asociación vecinal Russafa Descansa proseguirá este sábado 24 de septiembre en el entorno del mercado de este barrio la recogida de firmas para la delimitación de las calles y comunidades de vecinos beneficiadas por las medidas correctivas que corresponden a la declaración de Ruzafa como zona acústicamente saturada (ZAS).

De lo que se trata es del modelo de barrio que queremos, y el modelo de barrio lo definen los usos de sus espacios públicos y zonas residenciales, pero también los abusos consentidos. A este respecto, no se ha considerado en esta nota de prensa la actual regulación de las terrazas privadas hosteleras, que entrega en bandeja de plata el dominio público municipal a única actividad comercial, ni la falta de control e inspección de las autorizaciones de terrazas por el actual gobierno municipal y la sanción por el sistemático incumplimiento de la ordenanza municipal del dominio público municipal en las cuestiones más básicas: su sobreocupación por terrazas no autorizadas e incumplimiento de horarios de cierre y el mero respeto del transito vecinal y acceso a las propias viviendas
 
Ruzafa, 23 de septiembre de 2016
AV Russafa Descansa

Ruzafa, 15 de septiembre 2016

RUSSAFA DESCANSA MAPIFICA LOS APARTAMENTOS TURÍSTICOS ILEGALES EN FINCAS RESIDENCIALES. Una de cada tres fincas residenciales de Ruzafa afectada por el alojamiento turístico de corta estancia.

REUNIÓN AAVV BARRIOS HISTÓRICOS DE VALENCIA
ALOJAMIENTO TURÍSTICO DE CORTA ESTANCIA EN FINCAS Y ZONAS RESIDENCIALES. El elevado y negativo impacto social y ambiental del turismo de bajo coste de los apartamentos turísticos. SU REGULACION “HOSTEL”

1.- LA PROLIFERACIÓN DE APARTAMENTOS TURÍSTICOS ILEGALES EN FINCAS RESIDENCIALES DE RUZAFA: SU MAPIFICACIÓN

Ruzafa ya es una zona acústicamente saturada (ZAS), 350 establecimientos hosteleros y unas 250 terrazas en un barrio reurbanizado casi por completo ponen de manifiesto los niveles de saturación alcanzados cuando eran 303 solo los locales cuando se estableció la limitación en la apertura de nuevos, a finales de 2014. La asociación vecinal Russafa Descansa está reclamando al actual gobierno municipal actuaciones previas a la declaración de zona acústicamente saturada (ZAS), de acuerdo con el art. 50 de su ordenanza de protección contra la contaminación acústica. Y mientras tanto, los apartamentos turísticos ilegales han proliferado en fincas residenciales de este todavía barrio ante la inactividad y permisividad municipal.
 
¿Autoriza y consiente este ayuntamiento trasladar nuevas “molestias” al interior de sus comunidades de vecinos? ¿Esperamos en Ruzafa los acusados problemas que están padeciendo los vecinos que aún viven en los barrios valencianos de Ciutat Vella con los pisos turísticos y con los bloques de viviendas residenciales destinados al alojamiento de corta estancia?

Lo que está en cuestión es del modelo de barrio y ciudad, y son las mal consideradas “zonas de ocio” las que atraen el negocio inmobiliario del alojamiento turístico de corta estancia y las molestias asociadas a esta modalidad de turismo de bajo coste. Ruzafa continúa definida como zona residencial en el PGOU de Valencia en vigor.

La capacidad de carga de Ruzafa como mera zona de ocio hace tiempo que superó sus límites, ya es una zona acústicamente saturada (ZAS). A falta de medidas preZAS -que le corresponde establecer al actual gobierno municipal- será precisa su declaración administrativa como ZAS. El modelo propuesto para Ruzafa como “parque temático hostelero” exclusivo de la ciudad de Valencia es claramente insostenible para sus vecinos y su comercio de proximidad, y lo será aún más con la proliferación en fincas residenciales de pisos destinados al turismo de bajo coste. SIN VECINOS, NO HAY BARRIO.

El modelo de barrio lo definen los usos a los que se destinen sus fincas residenciales, pero también los abusos consentidos. El máximo responsable de controlar los usos indebidos en fincas residenciales en el barrio de Ruzafa es el ayuntamiento de Valencia. Con los extremos a los que se ha llegado en los barrios de Ciutat Vella, el actual gobierno municipal no garantiza ni tan siquiera la “vivencia” de sus diezmados residentes ni su recuperación ante los negativos efectos del turismo de bajo coste. Con estas perspectivas, tampoco parece que este consistorio vaya a garantizar la “convivencia” en Ruzafa ni por supuesto la ineludible protección que le corresponde garantizar como administración pública de derechos reconocidos como fundamentales por la constitución española (inviolabilidad del domicilio, intimidad personal y familiar, integridad...).

El barrio de Ruzafa ya se encuentra saturado de apartamentos turísticos en fincas residenciales. Como pone de relieve el mapa adjunto, en la actualidad unos 450 pisos turísticos se alquilan para el alojamiento de corta estancia en ya más de 300 fincas residenciales de Ruzafa, pronto una de cada tres fincas residenciales de Ruzafa tendrá algún piso turístico en su comunidad de vecinos.

La mapificacion realizada por este colectivo vecinal, a partir de los principales portales de internet que anuncian alojamientos de corta estancia en fincas residenciales en Ruzafa, pone de relieve el grado de saturación alcanzado por esta modalidad de negocio en fincas destinadas según el PGOU a uso residencial y no terciario.
 
Asimismo se acompaña a esta nota de prensa una muestra significativa con las imágenes de las fincas residenciales que publicitan sus propietarios en los más conocidos portales de internet esta modalidad de negocio de alquiler de corta estancia en el barrio de Ruzafa.

Esta mapificación de las fincas residenciales con apartamentos turísticos es pública y se encuentrá disponible en el blog de Russafa Descansa a partir de mañana viernes. http://russafadescansa.blogspot.com.es/




en el que esta asociación vecinal facilita un formulario a los vecinos de Ruzafa para incorporar todos aquellos pisos y fincas residenciales destinados ilegalmente a alojamientos turísticos de corta estancia y contribuir a completar la “zonificación” e inspección que ha anunciado el actual gobierno municipal de los apartamentos turísticos en este barrio.

También se puede consultar ya en el enlace https://russafa-descansa.carto.com/me

¿Rescata este gobierno municipal de la ilegalidad el negocio inmobiliario de los apartamentos turísticos en fincas residenciales? o por contra ¿protege este consistorio derechos básicos que deben prevalecer en zonas y fincas definidas como residenciales en el PGOU en vigor en núcleos históricos tradicionales protegidos, como el de Ruzafa? ¿Volverá a pasar lo mismo en Ruzafa: tarde y mal, con el alojamiento turistico de corta estancia en pisos y fincas de zonas residenciales como ha sucedido con la saturación hostelera?

La permisividad municipal con estas modalidades de negocio inmobiliario en Ruzafa va a contribuir, al apartar viviendas del alquiler residencial para su uso y abuso turístico, a encarecer y dificultar el acceso a la vivienda de sus vecinos. Con esta inactividad y dejación de funciones, este consistorio estimula la progresiva sustitución de vecinos, originarios y acogidos, por turistas en núcleos históricos tradicionales como el Ruzafa. El núcleo histórico de Ruzafa y su amplio ensanche popular está protegido como Bien de Relevancia Local (BRL), y sin embargo cada vez se encuentra más maltratado y acosado acústicamente. Sin vecinos, no hay barrio, pues los vecinos se mudan por acoso acústico y están siendo sustituidos por turistas de fin de semana. Sin comercio de proximidad tampoco hay barrio. ¿Compran en el mercado de Ruzafa o en los supermercados los turistas alojados en el barrio de Ruzafa?

La Asociación Vecinal Russafa Descansa reclama una campaña municipal de inspección, cese de actividad y clausura de los pisos turísticos ilegales en bloques y fincas residenciales en este barrio.

¿Es este el modelo de turismo de bajo coste, propio de los pisos para turistas de corta estancia, por el que apuesta el actual gobierno municipal? ¿Es este el modelo de barrio -de elevado y negativo impacto ambiental para sus vecinos como están poniendo de relieve los bloques de apartamentos turísticos en zonas residenciales- por el que vuelve a apostar otro gobierno municipal en el barrio de Ruzafa y en los barrios históricos de la ciudad de Valencia?

Todo ello, contribuye a promocionar una nueva declaración de zona acústicamente saturada (ZAS) al no establecer este consistorio medidas correctivas de alcance, al margen de la manifiesta desprotección de derechos básicos y reconocidos como fundamentales (el mero derecho a una vivienda digna, entre otros).

REUNIÓN AAVV BARRIOS HISTÓRICOS DE VALENCIA
ALOJAMIENTO TURÍSTICO DE CORTA ESTANCIA EN FINCAS Y ZONAS RESIDENCIALES. El elevado y negativo impacto social y ambiental del turismo de bajo coste de los apartamentos turísticos


Tal y como fue anunciado en un comunicado de prensa de 12 de agosto, la asociación vecinal Russafa Descansa ha convocado a las asociaciones de los barrios valencianos más afectados por la saturación de alojamientos turísticos de corta estancia en fincas residenciales (AVV. del Carmen, AVC. Amics del Carme, AV. El Palleter, AVC. La Boatella) y a los barrios con una incipiente presencia (AVV. Cabanyal-Canyamelar y Plataforma Salvem el Cabanyal), asi como a las del barrio de Ruzafa (AVV. Russafa-Gran Vía, Plataforma per Russafa y Gent de Russafa).

La reunión tendrá lugar este viernes 16 de septiembre por la tarde en el barrio de Ruzafa.

Esta reunión pretende acordar una postura común con la Federación de AAVV de Valencia ante este gobierno municipal y autonómico por el elevado y negativo impacto social y ambiental del turismo de bajo coste de los apartamentos turísticos en zonas y fincas residenciales, especialmente acusado en barrios históricos y tradicionales como los convocados. Todo ello ante la más que previsible desregulación de esta modalidad de negocio de alquiler inmobiliario, el alojamiento turístico de corta estancia, por parte del actual gobierno municipal y la Agencia Valenciana de Turismo, reclamando a tal efecto una mesa de concertación conjunta para evitar una normativa “HOSTEL”.

A tal efecto, la asociación vecinal Russafa Descansa remitió a las AAVV y su Federación un documento de trabajo de referencia para mantener una posición común ante el Ayuntamiento de Valencia y la Generalitat valenciana, siempre desde el respeto a las prioridades de las diferentes asociaciones y sus particulares problemáticas.

En modo alguno, se puede considerar al turismo de bajo coste, que se ha generalizado en determinados barrios con apartamentos turísticos en pisos y bloques residenciales, un turismo que fortalezca y revalorice la identidad de barrios históricos de la ciudad de Valencia, pronto lo serán los barrios más marítimos.

Ruzafa, 15 de septiembre de 2016


AV Russafa Descansa



Ruzafa, 8 de septiembre 2016

RUSSAFA DESCANSA RECLAMA MEDIDAS PRE-ZAS AL AYUNTAMIENTO DE VALENCIA E INICIA UNA CAMPANYA INFORMATIVA Y DE RECOGIDA DE FIRMAS PARA LA DELIMITACION DE LAS CALLES BENEFICIADAS POR LAS MEDIDAS CORRECTIVAS DE LA DECLARACION DE UNA ZAS EN EL BARRIO DE RUZAFA

La asociación vecinal Russafa Descansa proseguirá este sábado 10 de septiembre en el entorno del mercado la recogida de firmas para la delimitación de las calles y comunidades de vecinos beneficiadas por las medidas correctivas que corresponden a la declaración del barrio como zona acústicamente saturada (ZAS).

Mientras tanto el colectivo de Russafa Descansa reclama al ayuntamiento de Valencia que establezca las medidas previas a la declaración de una zona acústicamente saturada de acuerdo con la Ordenanza municipal Protección Contra la Contaminación Acústica.

En este sentido, el art. 50 relativo a “Actuaciones previas a la declaración de zona acústicamente saturada” establece que “en aquellas zonas de la ciudad donde existan numerosas actividades destinadas al uso de establecimientos públicos y niveles de recepción en el ambiente exterior, producido por la adición de las múltiples actividades existentes y por la actividad de las personas que utilicen estos establecimientos, que superen en más de 15 dBA los niveles fijados en el anexo II de la presente ordenanza, el Ayuntamiento podrá establecer las medidas oportunas, dentro de su ámbito de competencias, tendentes a disminuir el nivel sonoro exterior hasta situarlo en el permitido por el citado anexo.”

El colectivo vecinal Russafa Descansa considera que le corresponde al ayuntamiento de Valencia establecer las medidas oportunas, dentro de su ámbito de competencia, tendentes a disminuir el nivel sonoro exterior de las calles del centro histórico tradicional de Ruzafa y su amplio ensanche popular hasta situarlo en el permitido en la Ordenanza municipal de Protección Contra la Contaminación Acústica.

1.- EN 2016 EL BARRIO DE RUZAFA YA ESTÁ SATURADO POR LA HOSTELERÍA Y DIAGNOSTICADO COMO TAL POR EL AYUNTAMIENTO DESDE 2014

El barrio de Ruzafa cuenta con suficientes calles donde existen numerosas actividades destinadas al uso de establecimientos públicos.

La corporación municipal hace tiempo que tiene el diagnóstico sobre la saturación del barrio de Ruzafa desde 2014: se encuentra contenida en la memoria técnica que justificó la “Modificación de las Normas Urbanísticas del Plan Especial de Protección del Ensanche Ruzafa - Sur Gran Vía (PEPP-2)” por la que se limitaba la apertura de nuevos locales hosteleros en Ruzafa, la medida “preventiva” anunciada por el pasado gobierno municipal para evitar la declaración de una zona acústicamente saturada (ZAS) en Ruzafa.

En 2014 Ruzafa ya duplicaba la media de locales de Valencia

Según el mencionado plan la "Zona Ruzafa" el número de bares por cada 1.000 habitantes en el barrio de Ruzafa se situaba en 11,37, que en relación a la media de la ciudad (5,8 bares por cada 1.000 habitantes) casi la duplicaba (1,96 veces la media de bares/1.000 habs.). Según el ayuntamiento en la zona de mayor densidad del barrio de Ruzafa disfrutábamos de 44,8 bares por cada 1.000 habitantes, es decir, 7,7 veces más la media de bares de la ciudad de Valencia contaba por entonces.

El barrio de Ruzafa contaba por mayo de 2014 con un total de 303 establecimientos hosteleros: 277 restaurantes (se incluyen cafeterías, bares y restaurantes), 17 pubs, 3 discotecas y 6 salones lounge. El mapa que acompañamos de la memoria solo pinta en azul las cafeterías, bares y restaurantes.



En el verano de 2016 el barrio de Ruzafa ya dispone de 350 establecimientos hosteleros, y la asociacion vecinal de Russafa Descansa los tiene mapificados.

En la memoria técnica de 2014 no se consideraban ni las correspondientes terrazas, más de 250 en la actualidad, incluidas las que afectan a fincas colindantes, ni los más que recientes apartamentos turísticos (en la actualidad una de cada tres fincas residenciales de Ruzafa ya cuenta con un piso destinado al alojamiento de corta estancia para turistas, un uso incompatible con el residencial, tal y como establece el PGOU en vigor). Esta asociación tiene mapificadas también las terrazas hosteleras y una parte significativa de las fincas residenciales con apartamentos turísticos. Solo avanzamos una muestra a los medios de comunicación.



2.- EL BARRIO DE RUZAFA YA SE ENCUENTRA SATURADO ACÚSTICAMENTE

El barrio de Ruzafa ya se están superando en más de 15 dBA los niveles fijados la ordenanza municipal de protección contra la contaminación acústica. Lo que no se puede negar son los elevados niveles de recepción en el ambiente exterior producidos por la adición de las múltiples actividades hosteleras existentes en el barrio de Ruzafa y por la actividad de las personas que utilizan estos establecimientos, no solo en su interior, sino también en sus terrazas. Corresponde a este gobierno municipal empezar a realizar las correspondientes sonometrías como le está reclamando Russafa Descansa.

Desde 2014 también están diagnosticados los negativos efectos de la saturación hostelera de Ruzafa, incluidos los niveles de ruido en la vía pública.

En la referida memoria técnica de mayo de 2014 se reconoce a las claras la saturación hostelera de Ruzafa y "las consecuencias o efectos negativos generados por una excesiva acumulación de este tipo de actividades son, entre otras, las siguientes:

- Acumulación importante de residuos en franjas horarias concretas.
- Aumento de viandantes y de ocupación de la vía pública.
- Incremento del tráfico rodado.
- Aumento puntual de las necesidades de aparcamiento.
- Mayor deterioro del entorno urbano por utilización intensiva del mismo.
- Incremento de los niveles de ruido en la vía pública como resultado de la adición de incremento del tráfico + incremento de transeúntes + mayor utilización de la vía pública con terrazas, venta ambulante, concentraciones a la puerta de los locales de restauración y ocio debido a las restricciones impuestas por la Ley del tabaco, etc..."

El ayuntamiento manifiesta en esta memoria que "también puede ocurrir que aún teniendo los locales en condiciones reglamentarias su utilización no se ajusta totalmente a las condiciones impuestas en la licencia (tener doble puerta y mantenerlas abierta ya que se está sirviendo una terraza, mal funcionamiento del limitador de sonido, aumentar la ocupación de mesas y sillas concedidas, etc…)".

También le "resulta obvio que el mayor número de establecimientos en un mismo espacio urbano funcionan como reclamo de afluencia de personas e incremento de tráfico, con la consiguiente repercusión en el funcionamiento de los mismos, multiplicando los efectos negativos descritos".

4.- SON LOS VECINOS DE RUZAFA LOS QUE PADECEN ESTA ZONA ACÚSTICAMENTE SATURADA NO SUS RESPONSABLES

Son los residentes de Ruzafa los principales perjudicados por los negativos efectos y del deterioro en la calidad de vida que provoca esta ZAS en su entorno y en sus vidas.

Muchos vecinos de Ruzafa ya han renunciado a su proyecto de vida en el barrio. El goteo de vecinos que lo abandonan por el ruido es continuo. Solo cabe preguntarle al actual gobierno municipal la relación de mudanzas que han tenido lugar a lo largo de este verano en el barrio. Ya es un tema habitual de conversación entre sus vecinos, originarios o acogidos, tener en mente irse de Ruzafa.

Las "zonas cero" y las “falsas” calles peatonales de los entornos de determinados disco-pubs, discotecas y "afters", ubicados en zonas que eran de predominio residencial en Ruzafa, son la muestra más clara de la degradación de las zonas más acústicamente saturadas. Estas actividades son las grandes responsables de la ZAS de Ruzafa, sus negativos efectos ya no afectan solo a cuatro calles del barrio ni a un grupo reducido de residentes; estas actividades, que mantienen el “privilegio” de mantener sus licencias en un barrio de predominio residencial, están promocionando y centrifugando el ruido y sus molestias por todo el barrio, suficientes semanas seguidas o alternas. Las amplias franjas horarias de esta minoría hostelera son plenamente incompatibles con el descanso en un barrio residencial, al margen de atraer las molestias más extremas a sus calles adyacentes, molestias de las que son “corresponsables”.

Ruzafa ya es una ZAS, y le corresponde al ayuntamiento de Valencia establecer las medidas preZAS, tal y como determina la ordenanza municipal de protección contra la contaminación acústica. El máximo responsable de la resolución del malestar del barrio se mantiene sin embargo en silencio.

Solo las medidas correctivas en las zonas saturadas contribuyen a la reducción de los niveles de contaminación acústica que padecen sus vecinos, a la mejora de su calidad de vida y a la protección de derechos básicos reconocidos como fundamentales, cuya salvaguarda resulta ineludible por parte de las instituciones publicas, incluido el ayuntamiento de Valencia.

Cuando los vecinos solicitan una declaración de zona acústicamente saturada no han llegado a ningún extremo: no son los responsables ni corresponsables de la saturación acústica de un barrio, en estos momentos, el de Ruzafa. Más bien al contrario, estos mismos vecinos y sus comunidades son víctimas de los desagradables extremos de las zonas acústicamente saturadas, por lo que no cabe manipular y añadir, a sus padecimientos, su victimización secundaria.

Un barrio vivo y con vida comercial no tiene por qué serlo solo hostelero y menos aún molesto y ruidoso para sus vecinos, pues afortunadamente hay vida más allá de la hostelería y con la hostelería. En un barrio vivo hay además modalidades de hostelería y franjas horarias para su desarrollo respetuosas con el descanso de sus también vecinos.

Ruzafa, 8 de septiembre de 2016

AV Russafa Descansa

Ruzafa, 2 de septiembre de 2016


LA LIMITACIÓN EN LA APERTURA DE LOCALES HOSTELEROS EN RUZAFA: TARDE Y MAL. UN MODELO A EVITAR EN LA CIUDAD DE VALENCIA

Pretender en 2016 extender el modelo de Ruzafa al resto de la ciudad, como regularmente realiza la hostelería más organizada, es a engañar ahora a los vecinos de Valencia. El anterior gobierno municipal anunció en 2013 y estableció a finales de 2014 esta medida para evitar la saturación hostelera y acústica del barrio de Ruzafa. La medida estrella fue la limitación en la apertura de nuevos locales.

Esta propagada medida se aplicó tarde en Ruzafa, pues el barrio ya estaba saturado, pero también mal por parte de este consistorio, sus resultados son ZAS.

La limitación en la apertura de nuevos locales hosteleros fue la gran medida “preventiva” anunciada por el pasado gobierno municipal para evitar la declaración de una zona acústicamente saturada (ZAS) en Ruzafa. Esta limitación está contenida en la "Memoria para la Modificación de las Normas Urbanísticas del Plan Especial de Protección del Ruzafa - Sur Gran Vía (PEPP-2)" del ayuntamiento de Valencia. Esta medida fue publicada a mediados de 2014 y no entró definitivamente en vigor hasta diciembre de 2014.

La “Modificación de las Normas Urbanísticas del Plan Especial de Protección de Ruzafa - Sur Gran Vía (PEPP-2)” implicó fundamentalmente la limitación en la apertura de nuevos locales hosteleros en Ruzafa fijando unas distancias mínimas y unas densidades máximas por tipología de establecimientos (65 metros para bares y restaurantes -en un radio de 80 metros no podrán haber más de nueve- y 130 metros para bares musicales o lounges, pubs y discotecas -en un radio de 200 metros no podrán haber más de dos-).

1.- UNA LIMITACIÓN QUE LLEGÓ TARDE: EL BARRIO DE RUZAFA YA ESTABA DIAGNOSTICADO COMO SATURADO POR LA HOSTELERIA EN 2014

La corporación municipal hace tiempo que tiene el diagnóstico sobre la saturación del barrio de Ruzafa: se encuentra contenida en la memoria técnica que justificó la “Modificación de las Normas Urbanísticas del Plan Especial de Protección del Ensanche Ruzafa - Sur Gran Vía (PEPP-2)” por la que se limitaba la apertura de nuevos locales hosteleros en Ruzafa.

RUZAFA YA DUPLICABA LA MEDIA DE LOCALES DE VALENCIA EN 2014
Según el mencionado plan la "Zona Ruzafa" el número de bares por cada 1.000 habitantes en el barrio de Ruzafa se situaba en 11,37, que en relación a la media de la ciudad (5,8 bares por cada 1.000 habitantes) casi la duplicaba (1,96 veces la media de bares/1.000 habs.). Según el ayuntamiento en la zona de mayor densidad del barrio de Ruzafa disfrutábamos de 44,8 bares por cada 1.000 habitantes, es decir, 7,7 veces más la media de bares de la ciudad de Valencia contaba por entonces. 

El barrio de Ruzafa contaba por mayo de 2014 con un total de 303 establecimientos hosteleros: 277 restaurantes (se incluyen cafeterías, bares y restaurantes), 17 pubs, 3 discotecas y 6 salones lounge. El mapa que acompañamos de la memoria solo pinta en azul las cafeterías, bares y restaurantes.



TARDE: TAMBIÉN ESTABAN DIAGNOSTICADOS LOS EFECTOS NEGATIVOS DE LA SATURACIÓN HOSTELERA DE RUZAFA EN 2014

En esta memoria técnica fechada en mayo de 2014 se reconoce a las claras la saturación hostelera de Ruzafa y "las consecuencias o efectos negativos generados por una excesiva acumulación de este tipo de actividades son, entre otras, las siguientes:

- Acumulación importante de residuos en franjas horarias concretas.
- Aumento de viandantes y de ocupación de la vía pública.
- Incremento del tráfico rodado.
- Aumento puntual de las necesidades de aparcamiento.
- Mayor deterioro del entorno urbano por utilización intensiva del mismo.
- Incremento de los niveles de ruido en la vía pública como resultado de la adición de incremento del tráfico + incremento de transeúntes + mayor utilización de la vía pública con terrazas, venta ambulante, concentraciones a la puerta de los locales de restauración y ocio debido a las restricciones impuestas por la Ley del tabaco, etc..."

El ayuntamiento manifiesta en esta memoria que "también puede ocurrir que aún teniendo los locales en condiciones reglamentarias su utilización no se ajusta totalmente a las condiciones impuestas en la licencia (tener doble puerta y mantenerlas abierta ya que se está sirviendo una terraza, mal funcionamiento del limitador de sonido, aumentar la ocupación de mesas y sillas concedidas, etc…)".

También le "resulta obvio que el mayor número de establecimientos en un mismo espacio urbano funcionan como reclamo de afluencia de personas e incremento de tráfico, con la consiguiente repercusión en el funcionamiento de los mismos, multiplicando los efectos negativos descritos".

YA ESTABA DIAGNOSTICADA LA SATURACIÓN ACÚSTICA
No se trataba pues de ningún establecimiento hostelero particular ni concreto y este plan -aprobado a finales de 2014- establecía medidas cuyo ámbito de aplicación era el barrio de Ruzafa.

Y sin embargo, no se desaturaba de establecimientos el barrio de Ruzafa: como se determina en la nueva normativa “los establecimientos existentes a la entrada en vigor de esta modificación se mantendrán en sus condiciones actuales”.

2.- UNA LIMITACIÓN QUE SE APLICÓ MAL: EL EFECTO LLAMADA Y LA PERVERSIÓN DE UNA LIMITACIÓN PROPAGADA Y PUBLICITADA. SATURADO EL BARRIO, SE HA SATURADO MÁS RUZAFA:

Las Normas Urbanísticas del Plan Especial de Protección del Ruzafa fueron aprobadas definitivamente a finales de 2014 y establecían que las mencionadas distancias y densidades sólo eran para los nuevos locales hosteleros.

Estas medidas se aplicaron mal y cuando se implantaron ya era demasiado tarde o eran un puro engaño: no se puede urbanizar completamente el espacio público de un barrio, aceras, calles y chaflanes, privatizarlo y entregarlo en bandeja a una única actividad comercial, calificada como molesta por ruidos, vibraciones y olores, la hostelería, que además ha generalizado su actividad el dominio público municipal a precios irrisorios, terrazas en espacios abiertos y públicos; todo ello, sin establecer previamente un plan de ordenación usos que limite la previsible saturación hostelera y terracera de Ruzafa. Fueron 90.000 m2 los ganados como espacios públicos en tales obras.

No se desaturaba simplemente se mantenían los niveles de saturación, y además se aplicó tal limitación mal, muy mal.

NO ES UN MODELO PARA EL RESTO DE LA CIUDAD

Según apuntó en su momento el anterior gobierno municipal -y para toda la ciudad de Valencia- “con el criterio de los 65 y los 130 metros de distancia, se daba la circunstancia de que sólo cuatro emplazamientos estaban dentro de la nueva normativa aprobada, en lo que respecta a bares y restaurantes. En cuanto a las discotecas y pubs, la cifra era ligeramente superior al alcanzar los 13 establecimientos.”

EL EFECTO LLAMADA Y LA PERVERSIÓN DE UNA LIMITACIÓN PROPAGADA Y PUBLICITADA: EL BARRIO DE RUZAFA SE HA SATURADO MÁS

¿No decían que no iban a abrir más locales? pues no pararon de abrir y todavía están abriendo nuevos locales!!!

La bien propagada limitación en la apertura de nuevos locales hosteleros en Ruzafa fue como anunciar la devaluación de una moneda nacional sin llevarla a cabo, cuando por fin se decretó la mayor parte de la población la ha cambiado por moneda extranjera. En otros términos los “emprendedores” del maduro negocio hostelero de la ciudad de Valencia se anticiparon y comenzaron a abrir locales antes de la llegada del “corralito” hostelero de Ruzafa o simplemente registraban meras solicitudes de declaraciones responsables para una posterior apertura o incluso se anunciaban locales “con licencia provisional". En septiembre de 2016 aún se anuncian.

Durante el verano de 2014 los hosteleros apresuraron las obras en bajos comerciales para la apertura de nuevos locales en el barrio de Ruzafa pues no había entrado en vigor ninguna limitación ni de distancias mínimas ni densidades máximas. En el verano de 2014 la mitad de las nuevas actividades hosteleras aprobadas en la ciudad de Valencia se localizaron en el barrio de Ruzafa.

Cuando el local hostelero ya estaba abierto y en funcionamiento, animada su apertura por meras declaraciones responsables, las conocidas como “licencias exprés”. Locales en edificios protegidos, el barrio de Ruzafa dispone de un amplio catálogo de edificios reconocidos, a los que correspondía comunicación ambiental han abierto simplemente sin cumplir el procedimiento municipal. Acabadas las reformas más básicas, solo cabía esperar la “licencia” de apertura para ocupar y saturar más el dominio público municipal con sus terrazas. No fue previsto nada con respecto a las autorizaciones de terrazas, pues la limitación era solo para los establecimientos hosteleros.

En el verano de 2015 todavía abrieron locales hosteleros en el barrio con meras solicitudes de declaraciones responsables de 2014, superando las densidades apuntadas y dentro de las distancias mínimas.

En el mismo 2016 han continuado abriendo nuevos locales, incluso disco-pubs en las zonas más maltratadas, establecimientos con densidades y distancias más ajustadas. Se han rescatado licencias dormidas en Ruzafa.

El Ayuntamiento de Alicante va a establecer en 2016 medidas para la limitación en la apertura de nuevos locales en el casco antiguo y lo primero que han determinado es la paralización de las licencias de obras, para evitar mientras se modifican las normas urbanísticas, el efecto llamada que tuvo lugar en Ruzafa por la propagada y anunciada limitación. En Valencia se hizo muy mal.

Mientras tanto un nuevo barrio de la ciudad de Valencia se ha devaluado y saturado más de lo que ya estaba, otra vez por la demostrada incapacidad de este ayuntamiento en la materia, y experiencias no le han faltado en el Carmen, en el barrio de San José...

MAL: LOS ESTABLECIMIENTOS HOSTELEROS HAN PROLIFERADO. HAN AUMENTADO UN 20% A PESAR DE LA PROPAGADA LIMITACIÓN, YA NO SON 300 SINO 350 EN 2016

3.- EL BARRIO DE RUZAFA ERA ZAS EN 2014 Y AÚN LO ES MÁS EN 2016

La realidad no nos engaña y sólo hace falta echar un vistazo al barrio.

En el verano de 2016 el barrio de Ruzafa ya dispone de 350 establecimientos hosteleros, y la asociacion vecinal de Russafa Descansa los tiene mapificados.

En la memoria técnica de 2014 no se consideraban ni las correspondientes terrazas, más de 250 en la actualidad, incluidas las que afectan a fincas colindantes, cuyos vecinos no pintan nada en el proceso de autorización municipal, ni los más que recientes apartamentos turísticos (en la actualidad una de cada tres fincas residenciales de Ruzafa ya cuenta con un piso destinado al alojamiento de corta estancia para turistas, un uso incompatible con el residencial, tal y como establece el PGOU en vigor). Esta asociación tiene mapificadas también las terrazas hosteleras y una parte significativa de las fincas residenciales con apartamentos turísticos. Solo avanzamos una muestra a los medios de comunicación.

MAPIFICACIÓN POR ACTIVIDADES Y HORARIOS EN RUZAFA


MAPIFICACIÓN DE FINCAS RESIDENCIALES CON ALOJAMIENTOS TURÍSTICOS DE CORTA ESTANCIA EN RUZAFA



Con todas las explicaciones anteriores, y que ponen a las claras el grado de saturación acústica del barrio de Ruzafa, no caben pues medidas preventivas ni paliativas en el momento actual.

El barrio de Ruzafa ya estaba suficientemente saturado como ZAS -se actuó tarde- y el proceso de tramitación y aprobación de la publicitada limitación en la apertura de locales hosteleros tuvo el efecto perverso de animar la proliferación de locales -se actuó mal-.

El barrio de Ruzafa solo hace falta declararlo administrativamente como ZAS, delimitar al máximo las calles beneficiadas por tal declaración y establecer las medidas correctivas para revertir la situación actual.

Las declaraciones de Zonas Acústicamente Saturadas son siempre la historia de un fracaso. Como tal fracaso siempre la ZAS de Ruzafa será una medida injusta ya que tratará a todos por igual, como injusto e intolerable resulta el padecimiento al que están sometidos los vecinos del todavía barrio de Ruzafa, especialmente aquellos que malviven con las actividades y horarios más incompatibles con el descanso y el trabajo vecinal: discopubs, discotecas y “afters” que canalizan, promueven y centrifugan su ciclo completo de malestar por todo el barrio hasta altas horas de la madrugada. El derecho al negocio no es un derecho absoluto ni puede convertir a zonas de predominio residencial en “zonas de ocio” propias de otras latitudes y culturas.

Cuando el ruido rebasa ciertos límites y de forma reiterada se deben adoptar medidas contundentes, inmediatas y directas dirigidas a neutralizar las fuentes de ese ruido, no sus consecuencias. Las medidas establecidas hasta la fecha solo han prolongado y ampliado el malestar entre los vecinos del barrio, no han demorado la declaración de una ZAS en Ruzafa sino que han contribuido a saturar más el barrio y a facilitar su correspondiente declaración.

El malestar creciente entre los vecinos de Ruzafa por la saturación y “acoso acústico” se corresponden con un grado de la saturación hostelera suficientemente diagnosticado por este consistorio en este barrio y requieren medidas integrales y de carácter correctivo de mayor alcance, en el marco de un proceso amplio y dialogado con sus afectados y responsables.

Ruzafa, 2 de septiembre de 2016


AV Russafa Descansa


Ruzafa, 1 de septiembre de 2016

RUSSAFA DESCANSA RECLAMA MENOS “PRIVILEGIOS” A LOS GRANDES PROMOTORES DE UNA ZAS EN RUZAFA: DISCOTECAS, DISCOPUBS Y “AFTERS” mediante el control municipal de aforos, auditorías acústicas y la insonorización ante los abusos de las "licencias" de estos establecimientos públicos en zonas de predominio residencial

El núcleo histórico tradicional de Ruzafa y su ensanche popular, protegidos como Bien de Relevancia Local (BRL), no son zonas de ocio. De acuerdo la actual ordenanza municipal de protección contra la contaminación acústica, se “denominan “zonas de ocio” aquellas que, de acuerdo con el planeamiento, se destinen de forma específica, a espectáculos públicos y actividades recreativas”; a este respecto, continúa este articulo “El ayuntamiento podrá establecer “zonas de ocio”, incompatibles en todo caso con zonas de uso dominante residencial, que serán objeto de regulación específica.”

La saturación hostelera de Ruzafa ha convertido a bastantes de sus calles en "zonas cero" de la saturación acústica de este barrio. con disco-pubs, discotecas y “afters” a menos de 65 metros.

Estas calles de Ruzafa, y no son cuatro calles, entre las que se encuentra la misma Gran Vía Germanías, están en el entorno de cuatro discotecas, diecisiete disco-pubs y bastantes bares con ambientación musical (los denominados salon lounge) y varios “afters-hours”. Son las calles de Cádiz, Carlos Cervera, Centelles, Cuba, Doctor Sumsi, Femenia, Gran Via Germanias, Literato Azorin, Matias Perello, Pedro III, Pintor Salvador Abril, Sueca, Tomassos...

Algunas de estas calles cuentan con dos disco-pubs a menos de 65 metros y dos salas de discotecas que han comenzado a mezclar sus aforos, otras con su correspondiente disco-pub y su “after”. Estas calles, algunas con el privilegio de ser “peatonales”, padecen horarios hosteleros, aglomeraciones, vibraciones, resonancias, estridencias, suciedad... completamente incompatibles la intimidad y la dignidad de la vivienda. Otras han acabado sutilmente ocupadas por apartamentos turísticos en su totalidad ante la degradación que acompañan actividades y horarios plenamente incompatibles con el descanso y el trabajo vecinal,

Y a pesar del "privilegio" de encontrarse en zonas residenciales y a menos de 65 metros entre sí, estos discopubs, discotecas y afters no están siendo inspeccionados por este ayuntamiento. Esta corporación ni tan siquiera realiza ni exige las correspondientes auditorias acústicas e inspecciones a establecimientos públicos que no disponen de las adecuadas medidas de insonorización y que incluso incumplen con sus aforos.

Algunos de estos locales deberían estar apercibidos y en proceso de cierre por acumular incumplimientos tan graves como la manipulación de sus limitadores de decibelios, programados por encima de lo autorizado, no encontrarse ni homologados o por su mera ausencia, denuncias que cuentan con resoluciones municipales al respecto. Por si no fuera suficiente, algunos de estos locales además han ampliado recientemente sus dimensiones y aforo cuando la ordenanza de contaminación acústica en vigor nos les autoriza tales excesos por situarse en zonas residenciales y encontrarse estos locales a menos de 65 metros.

Otros grandes privilegiados, los salon lounge o bares musicales, no solo han podido abrir a menos de 65 metros de otros locales con ambientación musical (discopubs, discotecas y afters), con un horario de cierre hasta las 2:30 horas, sino disponen de menores exigencias de insonorización y limitación de decibelios, y pueden tener terrazas. Estos establecimientos públicos, aunque tengan mesas y sillas en su interior, no deberían tener terrazas autorizadas, que son actos discreccionales -no son licencias- se pueden revocar y no renovar por este ayuntamiento. Con todo, mantienen sus puertas abiertas para dar servicio a sus terrazas y cómo no “ambientación musical” a fincas y entornos de predominio residencial.

El "privilegio" de disponer de una “licencia” en vigor en zonas de predominio residencial no debería ser consentido por este gobierno municipal si va acompañado de abusos como los expuestos. Este consistorio aún así ni realiza las sonometrías que le está reclamando el Síndic de Greuges desde hace meses a algunos de estos “locales musicales”.
El barrio de Ruzafa no es el maltratado tramo IX del antiguo cauce del Turia ni la Marina real, no es una “zona de ocio”, es un barrio todavía con predominio residencial, y sin embargo también son precisas auditorias acústicas, insonorizaciones y un efectivo control del aforo de todos estos establecimientos públicos.



Mientras reclama menos competencia desleal a determinadas zonas portuarias, esta minoría hostelera de discopubs y discotecas está promocionando en Ruzafa, sobre todo, la declaración de una nueva zona acústicamente saturada (ZAS) en la ciudad de Valencia. Tal declaración administrativa y/o judicial afectará a la totalidad hosteleros de Ruzafa, la gran mayoría con horarios más compatibles y respetuosos con el derecho al descanso y al trabajo; una declaración que sí beneficiará a la gran mayoría de los vecinos y residentes de este barrio que verán más protegidos derechos reconocidos como básicos.

Esta minoría hostelera lleva suficiente tiempo canalizando y promoviendo sin rubor -suficientes veces por semana durante suficientes semanas consecutivas en un ya largo periodo- la saturación acústica del barrio de Ruzafa desde el copeo/tardeo en sus nuevas terrazas y bares musicales a las 17:00 horas hasta más allá de las 7:30 horas de la madrugada a las que habitualmente cierran sus discotecas en el todavía barrio Ruzafa, al margen de atraer como un imán a sus entornos el botellón del que también son "corresponsables", como ha reconocido públicamente la anterior responsable municipal de protección ciudadana, a la vista y en plena Gran Vía Germanías o en las maltratadas calles peatonales de Ruzafa.


Entre los negativos efectos acumulativos también cabe apuntar el goteo continuo de residentes que se han ido del barrio de Ruzafa en las calles más afectadas por disco-pubs, discotecas y afters. Los vecinos abandonan sus residencias, sus proyectos de vida en este barrio, y se mudan contra su voluntad por acoso acústico. Solo hace falta preguntar al Ayuntamiento de Valencia por las mudanzas que han tenido lugar en los últimos meses en estas zonas cero de la saturación acústica de Ruzafa.

Este gobierno municipal ya no puede limitarse a limpiar la suciedad a la mañana siguiente para que en el escenario de estas calles parezca que no ha pasado nada. El “privilegio” y los abusos de estos locales en plena Gran Via Germanias o con menos trascendencia pública en la calles Matías Perelló, se amplifican en las estrechas calles del núcleo histórico y tradicional de Ruzafa, en las calles de Cuba, Femenia, Salvador Abril, Sumsi, Tomasos, en los discopubs, discotecas y afters de una minoría de establecimientos.

Este consistorio no puede continuar consintiendo los negativos efectos acumulativos de establecimientos públicos, plenamente incompatibles con zonas residenciales y el descanso vecinal, cuando los “privilegios” se convierten sistemáticamente en abusos y desprotección de derechos básicos que siempre van a prevalecer ante los tribunales. A este gobierno municipal también le corresponde la tutela efectiva de las licencias concedidas, y a tal efecto le corresponde el control de aforos, la inspección de las insonorizaciones llevadas a cabo y la realización de las auditorías acústicas correspondientes de los salones lounge, disco-pubs, discotecas y afters que desarrollan su actividad en el barrio de Ruzafa. ¿Para cuando la competencia efectiva del cierre de locales?


Un barrio vivo y animado no tiene por qué ser tan molesto para su vecindario, determinados horarios y actividades se corresponden con las “zonas de ocio” no con barrios de predominio residencial.

El ruido no crea ni sostiene empleo ni puede garantizar privilegios, pero sí patrocina y promueve zonas acústicamente saturadas. Este mismo fin de semana se comprobará otra vez en el todavía barrio de Ruzafa, las llamadas a horas intempestivas a la policía local lo pondrán de relieve, las consecuentes quejas y reclamaciones por escrito también.

Ruzafa, 1 de septiembre de 2016
AV Russafa Descansa 


Ruzafa. 30 de agosto de 2016 

8.000 VECINOS DE RUZAFA PADECEN NIVELES DE RUIDO EXCESIVOS. UNO DE CADA TRES DE SUS RESIDENTES DE ACUERDO CON EL MAPA MUNICIPAL DE RUIDO DE 2012. LA MITAD DE SU POBLACION PARA 2017

En la actualidad más de 8.000 vecinos de Ruzafa padecen niveles de ruido excesivos. Todo ello de acuerdo con el último mapa de ruido elaborado por el ayuntamiento de Valencia para el año 2012. Según esta misma fuente municipal, uno de cada cuatro ciudadanos valencianos soporta niveles de ruido por encima del límite legal de los 65 decibelios (ruido diurno), que se amplia a una de cada tres personas si se considera el limite legal de ruido nocturno, 55 decibelios, y aún hay otro límite administrativo en los 45 decibelios referencia para las zonas acústicamente saturadas.

Este ayuntamiento solo midió en este mapa de 2012 los focos de ruido provocados por el tráfico, el ferrocarril, los aeropuertos y los puertos. Este mapa no consideró el ruido generado por actividades como las hosteleras calificadas como molestas por ruidos y vibraciones. Ni tan siquiera lo midió en las consideradas "zonas de ocio" pese a que tener declaradas varias ZAS en la ciudad de Valencia desde hace años.

Este consistorio debería considerar en el ruido ambiental que miden sus mapas todo el ruido, es decir, el "sonido" exterior no deseado o nocivo, entre el que se encuentra el generado por las actividades hosteleras en zonas residenciales como Ruzafa, cuyo desarrollo es cada vez más amplio en los espacios abiertos de las vías públicas, calles y plazas con sus terrazas, pero sobre todo con actividades cuyos horarios y molestias son plenamente incompatibles con el descanso vecinal (discopubs, discotecas y “afters”).

Desde del último mapa de ruido municipal, los establecimientos hosteleros y las autorizaciones municipales de terrazas han proliferado sobremanera en el barrio de Ruzafa, pues este ayuntamiento no ha parado de conceder nuevas "licencias" y rescatar “antiguas” licencias hosteleras, incluidas discotecas y discopubs en zonas de predominio residencial. A pesar de la propagada limitación no son 300 los establecimientos públicos los que hay actualmente en Ruzafa, sino 350 locales y 250 terrazas ya mapificados por esta asociación vecinal, tal limitación que pretendía controlar la saturación del barrio ha sido contraproducente.

A tal efecto, este consistorio debería plantearse no solo “monitorizar” todos sus actuales puntos de medida del ruido urbano sino también ampliarlos, incluyendo el barrio de Ruzafa. Dados los niveles de saturación hostelera alcanzados en este barrio, este gobierno debería situar sonómetros en el núcleo histórico tradicional de Ruzafa y su amplio ensanche popular, especialmente en sus conocidos cruces con “macroterrazas”, en las falsas calles peatonales y en las “zonas cero” del barrio más afectadas por discopubs, discotecas y afters. Todo ello, para llevar a cabo un "seguimiento" efectivo de la contaminación acústica y cumplir con las exigencias normativas sobre evaluación y gestión del ruido ambiental también en el barrio de Ruzafa, sobre todo, porque tiene en camino una nueva ZAS. A tal efecto, es preciso incorporar una estación "monitorizada" en Ruzafa con sus correspondientes puntos de medición.

No hay que ir muy con iniciativas similares, el Ayuntamiento de Alicante instalará aparatos medidores de ruido en el Casco Antiguo a petición de sus vecinos, resultado del proceso de presentación de propuestas en los presupuestos participativos para 2016. Es una cuestión de voluntad política del gobierno municipal de Valencia.

Con todo, medir no implica necesariamente reducir el ruido ni sobrellevar las molestias asociadas. Para comenzar a controlar y reducir los niveles de contaminación acústica alcanzados el actual gobierno municipal debería no sólo elaborar meros mapas de ruido, y medir adecuadamente todos los focos, sino sobre todo establecer efectivos planes de acción contra el ruido, también en el barrio de Ruzafa, más allá de incrementar la presencia policial. El colectivo vecinal Russafa Descansa hace tiempo que presentó a todos los responsables municipales con los que ha mantenido reuniones su plan integral para la desaturación acústica y la recuperación de los espacios públicos de Ruzafa.

En 2017 elaborará este consistorio el próximo mapa de ruido de la ciudad de Valencia. En el mapa de 2017 los niveles de ruido y los vecinos afectados de este barrio ya duplicarán los 8.000 residentes, más de la mitad de su población actual. ¿Continuaremos para entonces con cero responsables y sin medidas correctivas de alcance?

El núcleo histórico y tradicional de Ruzafa, así como gran parte de su ensanche popular, está protegido y delimitado por este consistorio como Bien de Relevancia Local (BRL) no es una zona de moda ni de ocio. De acuerdo con el artículo 48 de la actual ordenanza municipal de protección contra la contaminación acústica, se “denominan “zonas de ocio” aquellas que, de acuerdo con el planeamiento, se destinen de forma específica, a espectáculos públicos y actividades recreativas”; a este respecto, continúa este articulo El ayuntamiento podrá establecer “zonas de ocio”, incompatibles en todo caso con zonas de uso dominante residencial que serán objeto de regulación específica.”

El barrio de Ruzafa no es una zona de ocio es el entorno vital de casi 24.000 vecinos -una zona de predominio residencial- y el Ayuntamiento de Valencia no está garantizando ni priorizando la convivencia, el respeto y el derecho al descanso de los que sí residen en este barrio. Es por ello que solo cabe reclamar e iniciar el legítimo proceso de protección de los derechos más básicos de sus vecinos ante tanto desamparo en la ciudad de Valencia.

Ruzafa, 30 de agosto de 2016
Associació Veïnal Russafa Descansa

Ruzafa, 12 de agosto de 2016

RUZAFA ZONA SATURADA DE APARTAMENTOS TURÍSTICOS A LA ESPERA DE UNA NORMATIVA “HOSTEL”. OTRA VEZ TARDE Y MAL

1.- RUZAFA ZONA YA SATURADA DE PISOS TURÍSTICOS EN FINCAS RESIDENCIALES

El actual gobierno municipal pretende llevar a cabo en unos meses una pretendida “regulación” de los apartamentos turísticos en fincas residenciales mediante una revisión del Plan General de Ordenación Urbana en vigor. A la espera de una normativa “hostel” para los apartamentos turísticos en fincas residenciales, estos proliferan en zonas ya saturadas acústicamente como Ruzafa por actividades molestas e incompatibles con el descanso vecinal.

La Asociación Vecinal Russafa Descansa reclama una campaña municipal de inspección, cese de actividad y clausura de los apartamentos turísticos en fincas residenciales en este barrio. A tal efecto pondrá a disposición pública en septiembre una base de datos mapificada de los apartamentos turísticos en fincas residenciales para poner de manifiesto el grado de saturación alcanzado en este barrio, información obtenida a partir de los principales portales de internet que ofrecen alojamiento de corta estancia en apartamentos en Ruzafa.

Unos 450 pisos turísticos se alquilan para el alojamiento de corta estancia en unas 300 fincas residenciales de Ruzafa, pronto una de cada tres fincas residenciales de Ruzafa tendrá algún piso turístico en su comunidad de vecinos.

2.- OTRA VEZ TARDE Y MAL, EN RUZAFA

Otra vez TARDE y MAL, esta vez con los pisos turísticos en fincas residenciales del barrio de Ruzafa, como con la limitación en la apertura de nuevos establecimientos hosteleros.

Ya es TARDE puesto que el barrio de Ruzafa ya se encuentra saturado de apartamentos turísticos en fincas residenciales. Como pone de relieve el mapa adjunto, en la actualidad unos 450 pisos turísticos se alquilan para el alojamiento de corta estancia en unas 300 fincas residenciales de Ruzafa, pronto una de cada tres fincas residenciales de Ruzafa tendrá algún piso turístico en su comunidad de vecinos.

Otra vez MAL pues la ahora pretendida regulación de los pisos turísticos en fincas residenciales no es sino otra moratoria encubierta para el estudio y tramitación de la revisión del Plan General de Ordenación Urbana de Valencia (PGOU), un proceso que se anuncia durará ocho meses. Otra vez este ayuntamiento vuelve a anunciar una limitación de usos, esta vez hoteleros, en zonas ya saturadas. Esta pretendida regulación tardará a tener efectos y no tendrá otro efecto que el de llamada. (“no iban a abrir nuevos locales”, “no abrirán más locales”) y se retroalimentará en las zonas más saturadas.

Además la normativa que está en camino es una normativa HOSTEL para el negocio inmobiliario de los pisos turísticos en fincas residenciales, que en modo alguno se planteará lo más relevante, la responsabilidad subsidiaria de los propietarios de estos inmuebles y negocios, y la protección de los residentes ante las molestias y elevada rotación de estos pisos destinados al negocio y alojamiento turístico de corta estancia. Esta actividad empresarial en fincas residenciales debería estar tutelada efectivamente por administraciones públicas y además sujeta a autorización, renovación y revocación municipal.

3.- A LA ESPERA DE LA NORMATIVA “HOSTEL” EN LAS COMUNIDADES DE VECINOS

Los contratos para el alojamiento de corta estancia en apartamentos turísticos no son meros contratos de arrendamiento de viviendas. El alojamiento de corta estancia es una actividad económica asociada a establecimientos y viviendas destinadas a uso turístico. Esta modalidad de negocio requiere la correspondiente “licencia” municipal de actividad, la cédula de habitabilidad y una calificación de compatibilidad urbanística, al margen de su inscripción en el registro autonómico de establecimientos turísticos.

Como tal actividad el alojamiento turístico precisa la correspondiente comunicación ambiental .

El actual gobierno municipal pretende modificar sus ordenanzas solo para que el procedimiento de apertura de este negocio privado inmobiliario en fincas residenciales se lleve a cabo mediante una mera declaración responsable de su promotor, es decir, mediante las conocidas “licencias exprés”, que tanto juego han dado a actividades calificadas como molestas como las hosteleras.
En cualquier caso, el núcleo histórico tradicional de Ruzafa está reconocido como Bien de Relevancia Local (BRL), una gran parte de sus edificios protegidos. Es por ello que cualquier modalidad de negocio que pretenda iniciar su actividad está sujeto a comunicación ambiental, no una mera declaración responsable o “licencia exprés”.

Como tal modalidad de negocio es precisa su compatibilidad urbanística. Es el Plan General de Ordenación Urbana de Valencia (PGOU) vigente desde 1990 quien define los usos industriales, terciarios, residenciales... Esta norma es suficientemente tajante tanto en edificios de uso exclusivo como de uso mixto.

El PGOU en su art. 6.17 destina el apartado h) a Hoteles, hostales, pensiones y apartamentos en régimen de explotación hotelera. A este respecto, establece con claridad que “Se admite en edificio de uso exclusivo. Si se ubica en edificio de uso mixto las plantas destinadas a este uso se situarán siempre por encima de las destinadas al resto de usos no residenciales y por debajo de las destinadas a usos residenciales.”

Los apartamentos turísticos no tienen cabida en fincas residenciales, de acuerdo con el PGOU en vigor. Y el actual gobierno municipal lo que pretende realmente con la revisión del PGOU vigente es ampliar el uso mixto a toda finca residencial. La correspondiente dirección territorial de turismo remite regularmente un listado con las viviendas turísticas registradas en la ciudad de Valencia a su ayuntamiento. Ningún apartamento turístico de esta ciudad en finca residencial se encuentra inscrito legalmente en el registro autonómico de viviendas turísticas por cuanto se encuentran en zonas residenciales.

El registro e inscripción de los apartamentos turísticos se realiza concretamente en el Registro de Empresas, Establecimientos y Profesiones Turísticas de la Comunidad Valenciana. Para llevarlo a cabo es necesaria la referida compatibilidad urbanística que como se ha establecido no procede en fincas residenciales, de acuerdo con el PGOU en vigor en la ciudad de Valencia.

A este respecto, quedó suficientemente clara la misión principal de una Proposición No de Ley presentada por el grupo parlamentario Podem en las Cortes Valencianas y aprobada recientemente por todos los grupos parlamentarios: redefinir las viviendas turísticas, incorporando las ubicadas en fincas residenciales, y darle cobertura al ayuntamiento de Valencia y a la Generalitat en la calificación urbanística del suelo donde debe estar un vivienda turística.

Esta proposición no de ley redefine el concepto de “viviendas de uso turístico” de esta forma: “Se entiende por viviendas de uso turístico aquellas ubicadas en inmuebles situados en suelo de uso residencial, donde se vaya a ofrecer mediante precio el servicio de alojamiento en el ámbito de la Comunidad Autónoma de Valencia, de forma habitual y con fines turísticos". Para cerrar el círculo, esta proposición no de ley contempla incluso el cambio de uso a terciario de las fincas residenciales cuando se cumplan las condiciones de vivienda turística, finca con vecinos al margen. De esta forma, “Aquellas viviendas turísticas que se encuentren en suelo residencial y en las que se presten servicios complementarios o similares a los que se prestan en los establecimientos hoteleros, habrán de solicitar previamente el cambio de uso a terciario”.

En cualquier caso, el PGOU de Valencia continúa en vigor, así lo sentenciarán los tribunales de justicia.

Concluyendo, molestias para los residentes y pisos turísticos para todos, que es de lo que se trata con esta pretendida regulación de los apartamentos turísticos en fincas residenciales. De lo que se trató recientemente en las Cortes Valencianas no es sino de unadesregulación” encubierta sin control de los pisos turísticos. Todo ello para evitar el PGOU de la ciudad de Valencia y entrar por la puerta falsa los pisos turísticos en las fincas residenciales de los barrios de Valencia, especialmente, de aquellos dotados con núcleos históricos tradicionales como el de Ruzafa.

Una mera cédula de habitabilidad será el requisito que va a exigir el actual gobierno municipal y autonómico para que entren los pisos turísticos en las fincas residenciales y sean con el tiempo abandonadas contra su voluntad por sus vecinos originarios o acogidos, dado el elevado impacto ambiental de esta modalidad de negocio.

Este ayuntamiento con el amparo autonómico pretende desregular una actividad potencialmente molesta en fincas residenciales cuando reconoce públicamente que carece de inspectores para el cierre y clausura de los apartamentos ilegales, pero sí para controlar y subsanar los que incurran en irregularidades, pero no de oficio.

Así las cosas, no se puede considerar que la normativa que está en camino pueda calificarse como ordenada, racional y equilibrada, como ha realizado el actual responsable municipal de urbanismo, sino más bien una normativa HOSTEL para los apartamentos turísticos en las fincas residenciales de la ciudad de Valencia.

Mientras tanto, es decir, mientras proliferan los apartamentos turísticos en zonas acústicamente ya saturadas como Ruzafa, el ayuntamiento de Valencia simplemente solicita en pleno agosto a la Agencia Valenciana de Turismo el listado de de alojamientos turísticos inscritos en el registro autonómico. Al parecer para elaborar un mapa y comprobar los barrios con más concentración de oferta turística, para evaluar aquellos que están saturados. Simplemente para salir del paso, a la espera de llegar, esta vez mal y tarde.

Recientemente el ayuntamiento de Barcelona sí ha llevado a cabo un plan de choque de inspección de viviendas turísticas de uso público. Al mismo tiempo, ha puesto a disposición pública en su misma web municipal los apartamentos turísticos de toda la ciudad (calle, portal, número de vivienda...) con el correspondiente expediente y licencia en vigor. Una sencilla base de datos que se puede consultar tanto por los vecinos residentes como por los usuarios turísticos. Una web en la que se invita al usuario a comprobar si su estancia es la contratada legalmente, y al vecino a comprobar y comunicar las situaciones ilegales.

Por su parte, la conselleria valenciana correspondiente remite con regularidad al ayuntamiento de Valencia las viviendas turísticas registradas legalmente, que al parecer son sólo un millar. La información está disponible para el actual gobierno municipal.

La Asociación Vecinal Russafa Descansa reclama, por tanto, una campaña municipal de inspección, cese de actividad y clausura de los apartamentos turísticos en fincas residenciales en este barrio, a tal efecto pondrá a disposición pública en septiembre una base de datos de los apartamentos turísticos en fincas residenciales que pone de relieve el grado de saturación alcanzado por esta modalidad de negocio en Ruzafa.

En cualquier caso, el PGOU de Valencia continúa en vigor, así lo sentenciarán los tribunales de justicia.

4.- MODELO DE CIUDAD Y DE TURISMO: TURISMO “HOSTEL” Y DE BAJO COSTE ¿ES ESTE EL MODELO DE CIUDAD POR EL QUE APUESTAN SUS ASOCIACIONES VECINALES?

Es necesario volver a insistir: en modo alguno, se puede considerar al turismo de bajo coste como el de los apartamentos turísticos en fincas residenciales un turismo de calidad que fortalezca y revalorice la identidad de barrios históricos de la ciudad de Valencia. Más bien al contrario, puesto que se apropian incluso de su identidad barrial como mero reclamo comercial, en su visita puntual al barrio de moda, pronto lo serán los castigados barrios de la “fachada” más marítima de nuestro litoral.

No corresponde a las asociaciones vecinales ni sus federaciones defender el derecho al negocio inmobiliario asociado al alojamiento turístico de corta estancia en el barrio de Ruzafa ni en los barrios más históricos de la ciudad de Valencia; sobre todo cuando es a costa y en exclusiva del malestar de sus residentes, en la medida que esta modalidad de turismo de bajo coste contribuye a deteriorar aún más su sobrecargado entorno y su menguada calidad de vida.

Sí que corresponde a las asociaciones vecinales reclamar la ineludible protección de los derechos más básicos por parte de las administraciones públicas y la correspondiente responsabilidad cuando son vulnerados en sus propias comunidades de vecinos; les corresponde también reclamar la tutela municipal efectiva de actividades y negocios desarrollados en la ciudad cuando proliferan en sus barrios sin control, con una amplia permisividad municipal, cuando atraen molestias y malestar incompatible con la vida diaria y los derechos más básicos, cuando expulsan y desarraigan vecinos de su entorno de origen o acogida.

La asociación vecinal Russafa Descansa remitirá a partir de septiembre una convocatoria a las asociaciones de los barrios valencianos más maltratados por la saturación de pisos turísticos en fincas residenciales (AVV. del Carmen, AVC. Amics del Carme, AV. El Palleter, AVC. La Boatella). a los barrios con una incipiente problemática (AVV. Cabanyal-Canyamelar y Plataforma Salvem el Cabanyal), asi como a las del barrio de Ruzafa (AVV. Russafa-Gran Vía, Plataforma per Russafa y Gent de Russafa). Todo ello para mantener una postura mínimamente común con la Federación de AAVV de Valencia en la problemática de los pisos turísticos en fincas residenciales ante este gobierno municipal, la protección de los derechos más básicos de los vecinos en sus propias viviendas ante la más que previsible regulación HOSTEL de esta modalidad de negocio por parte del actual gobierno municipal, reclamando a tal efecto una mesa de concertación conjunta.

Otra vez tarde y mal, Ruzafa como ejemplo de lo que no hay que hacer ni como hacerlo en la ciudad de Valencia y en sus núcleos históricos tradicionales, esta vez en las propias comunidades de vecinos con los pisos turísticos.


Ruzafa, 12 de agosto de 2016
Associació Veïnal Russafa Descansa


Ruzafa, 8 de agosto de 2016

EL"REURBANIZADO" BARRIO DE RUZAFA ESTÁ MÁS SUCIO POR LA SATURACIÓN HOSTELERA. "RECICLAR" RUZAFA: ENSUCIAR Y SATURAR MENOS

En el barrio de Ruzafa no solo es preciso limpiar más y mejor sino, sobre todo, ensuciar menos. Se puede mejorar la gestión municipal, los vecinos podrían consumir y ensuciar menos, pero es preciso destinar algo más que recursos municipales. El nuevo gobierno municipal aprobó con urgencia un plan de choque para mejorar la limpieza de la ciudad y evitar la sensación prolongada de suciedad. Se ha aumentado el baldeo de aceras y zonas peatonales, al parecer se ha reforzado el servicio de recogida de enseres, y hay más operarios para la limpieza de sus calles.

Sin embargo, en el barrio de Ruzafa la acumulación de residuos y suciedad no tiene su origen solo en la reducción de limpieza municipal por el pasado gobierno municipal, ni se trata solo de la falta de educación ciudadana e incivismo.

En Ruzafa es necesario añadir como causa de la suciedad de sus calles el considerable deterioro de su entorno urbano por el uso intensivo y abusivo que conlleva la saturación hostelera del barrio.

La saturación hostelera alcanzada (350 locales hosteleros), así como el uso intensivo y abusivo de sus espacios públicos (unas 250 terrazas, bastantes además en las fincas colindantes, los ampliados chaflanes de los cruces más significativos con “macroterrazas”, las “falsas” calles peatonales...) explican una parte importante de los niveles de suciedad actuales. A todo ello cabe añadir el botellón y la venta ambulante que atraen las discotecas a sus entornos y calles adyacentes. El resultado más palpable de todo ello es que el "reurbanizado" barrio de Ruzafa está más sucio.

La muestra más evidente de este insostenible uso de los espacios públicos de Ruzafa es el rápido deterioro de todas sus aceras, chaflanes y plazas a pesar de ser relativamente recientes las obras de "reurbanización" de este barrio. Así, lo están mostrando la mayor parte las imágenes aportadas este pasado domingo y este mismo lunes por diferentes vecinos de Ruzafa a esta nueva asociación vecinal.

Y no es solo que los contenedores no den abasto, las más de las veces simplemente se depositan los restos de envases de vidrio y cajas de cartón al pie de los mismos.

No sólo la excesiva concentración de actividades hosteleras en un núcleo histórico tradicional como el de Ruzafa explica la suciedad de nuestras calles, cabe añadir más responsables: una parte importante de la hostelería de la ciudad de Valencia que opera en este barrio no recicla en absoluto. Los vecinos de este barrio están acostumbrándose a su pesar a encontrarse con contenedores orgánicos repletos de cajas de cartón y botellas de vidrio o muestras como las imágenes que se acompañan. La hostelería de la ciudad de Valencia debería empezar a trabajar al menos en lo más básico, cuando está en camino un nuevo sistema de gestión de residuos, el conocido como SDDR (siglas del sistema de depósito, devolución y retorno de envases).

Con todo, una gran parte de la suciedad de Ruzafa no se visibiliza con toda su crudeza pues la limpian todos los fines de semana de buena mañana las patrullas de limpieza. Esta situación se reproduce semana tras semana, y no tiene su origen en el botellón nocturno sino en la saturación acumulada y generalizada de un barrio residencial, desde sus mismas tardes hasta altas horas de la madrugada, incluso en un periodo como el estival con algo menos de actividad hostelera.

Ruzafa, 8 de agosto de 2016
Associació Veïnal Russafa Descansa
 


Ruzafa, 3 de agosto de 2016

APARTAMENTOS TURÍSTICOS EN FINCAS RESIDENCIALES TURISMO DE BAJO COSTE ¿ES ESTE EL MODELO DE TURISMO Y DE CIUDAD POR EL QUE APUESTA EL ACTUAL GOBIERNO MUNICIPAL? 
De nuevo, Ruzafa un ejemplo de lo que no hay que hacer en la ciudad de Valencia

Ruzafa ya cuenta con unos 340 pisos turísticos en fincas residenciales de las calles Sueca, Denia, Cádiz, Sevilla, Puerto Rico, Cuba, Salvador Abril, Literato, Luis de Santangel, Pedro III, Femenia, Clero... apartamentos turísticos que se anuncian sobre todo en conocidos portales de internet. El mapa y las imágenes que se acompañan son una clara muestra de su amplia proliferación en este saturado barrio. Pronto una de cada tres fincas residenciales de Ruzafa tendrá algún piso turístico en su comunidad de vecinos.

El modelo de ciudad y de barrio lo definen los usos a los que se destinen sus fincas residenciales, pero también los abusos consentidos. ¿Es el modelo de turismo de bajo coste, propio de los pisos para turistas de corta estancia en fincas residenciales, por el que apuesta el actual gobierno municipal? ¿Es este el modelo de barrio -de elevado coste social y negativo impacto ambiental- para los vecinos de Ruzafa por el que vuelve a apostar otro gobierno municipal?

Hace años que los tribunales han asumido que el ruido que se cuela en nuestras casas vulnera el derecho fundamental a la inviolabilidad del domicilio. A partir de ahora, también en las mismas comunidades de vecinos mediante esta modalidad de negocio inmobiliario basada en el alojamiento turístico de corta estancia en fincas residenciales. ¿Trasladamos las “molestias” de las calles de Ruzafa también al interior de sus comunidades de vecinos? ¿Está animando este consistorio otra forma de saturación acústica, esta vez en las mismas fincas vecinales, para más adelante responsabilizar a los vecinos de la declaración de una nueva zona acústicamente saturada?

A este consistorio no solo le basta con desproteger y saturar acústicamente a sus vecinos desde las aceras, chaflanes, calles y plazas... en locales con ambientación musical mal insonorizados, sin control de aforos y con limitadores de decibelios programados por encima de lo autorizado -pirateados- o simplemente no homologados. Esta corporación municipal pretende rescatar el negocio privado y cada vez más profesionalizado de los apartamentos turísticos en fincas residenciales de la ciudad de Valencia y en el barrio de Ruzafa. Mientras tanto continúa desamparando derechos básicos y fundamentales vulnerados por la contaminación y saturación acústica (inviolabilidad del domicilio, la intimidad personal y familiar, la protección de la salud, medio ambiente adecuado y a una vivienda digna, al margen de la integridad física y moral) con la misma permisividad con la que ha mantenido y mantiene los pisos turísticos en fincas residenciales desde hace bastante tiempo en la ciudad de Valencia, también en este todavía barrio.

Con todo, este gobierno municipal considera a través de su responsable de turismo que las fincas residenciales con pisos turísticos son fincas “normales” como sus clientes. En la misma linea, la asociación de propietarios de apartamentos turísticos ha afirmado sin rubor que estos vecinos molestan como puede molestar un vecino normal. Sin embargo, no son unos vecinos/inquilinos cualesquiera ni tampoco sus molestias no son las normales... El pasado domingo por la tarde tuvieron que intervenir bomberos, policía y una ambulancia para llevarse al hospital a un turista que se alojaba en un piso turístico en una finca residencial de la calle Cádiz. Simplemente se había olvidado las llaves y pasó de un piso a otro y acabó con los tobillos rotos en el deslunado. No son pisos normales, los turísticos en fincas residenciales. La foto adjunta ilustra estos hechos.

No hay nada como reducir los problemas a unas pocas fincas, limitarlos a unos exagerados vecinos. No hay nada como banalizar el "malestar”.

¿Rescatamos personas y protegemos derechos básicos que deben prevalecer sobre el derecho absoluto al negocio de los pisos turísticos, incompatibles con el derecho al descanso en barrios residenciales y núcleos históricos como el de Ruzafa? o realmente ¿Este nuevo consistorio rescata y promueve negocios molestos en fincas residenciales?

Si lo que pretende el actual gobierno municipal es avanzar hacia ciudades con barrios sostenibles, en los que se garantice un mínimo equilibrio entre los usos residenciales y comerciales, es precisa una amplia campaña de inspección de esta modalidad de alojamientos turísticos de corta estancia. Todo ello para el cese de la actividad y la clausura de la mayor parte los que operan en fincas residenciales del amplio núcleo histórico tradicional de Ruzafa y su ensanche popular.

De acuerdo con el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) en vigor en la ciudad de Valencia los apartamentos turísticos no tienen cabida en fincas residenciales. El PGOU de Valencia continúa en vigor, así lo sentenciarán los tribunales de justicia.
La Asociación Vecinal Russafa Descansa no reclama una mera campaña de control de los apartamentos turísticos en Ruzafa. Este colectivo vecinal reclama una amplia campaña municipal de inspección, cese de actividad y clausura de los apartamentos turísticos en fincas residenciales en este barrio.

Todo ello para evitar actuar tarde y mal, esta vez con los pisos turísticos, en Ruzafa como con la limitación en la apertura de nuevos establecimientos hosteleros; TARDE dado que el barrio ya estaba saturado en diciembre de 2014 cuando entró finalmente en vigor tal pretendida limitación (303 locales sin considerar las terrazas hosteleras); y MAL, pues la moratoria encubierta durante tal propagada limitación (“no iban a abrir nuevos locales”, “no abrirán más locales”) no hizo sino alimentar más la saturación hostelera, con la apertura de nuevos locales (350 locales en la actualidad más 250 terrazas), que es el efecto llamada de la ahora pretendida regulación de los pisos turísticos en fincas residenciales (en la actualidad unos 340 pisos turísticos en fincas residenciales de Ruzafa, pronto una de cada tres fincas residenciales de Ruzafa tendrá algún piso turístico en su comunidad de vecinos).

Otra vez tarde y mal, Ruzafa como ejemplo de lo que no hay que hacer ni como hacerlo, esta vez en las propias comunidades de vecinos.

Desplazado y sustituido el comercio tradicional y de proximidad de Ruzafa por la hosteleria de la ciudad de Valencia, bastantes vecinos han comenzado a abandonar por puro hartazgo e impotencia este barrio, ante la pasividad municipal en la protección de derechos básicos vulnerados por la saturación acústica. El negocio de los pisos turísticos está sustituyendo una gran parte de la vivienda destinada a uso residencial en el barrio de Ruzafa.

Todo ello contribuye al deterioro y a la definitiva conversión de Ruzafa en un parque temático al servicio exclusivo de la hostelería. El problema no es que haya hostelería en Ruzafa, el problema es que solo hay hostelería. El problema se agudizará con la generalización de los pisos turísticos. Podrá la hostelería y el comercio de barrio sobrevivir sin vecinos solo con el negocio de los fines de semana. ¿Van los turistas de fin de semana al mercado o a los supermercados? Podrá la hostelería de la ciudad de Valencia en la saturada Ruzafa compensar su negocio con el turismo “low cost” de fin de semana.

Sin vecinos no hay barrio. Comercio y vida cotidiana están íntimamente vinculados. Sin comercio de proximidad no hay barrio.

En modo alguno, se puede considerar al turismo de bajo coste de los apartamentos turísticos un turismo de calidad que fortalezca y revalorice la identidad de barrios históricos como el de Ruzafa, sino su banalización sin rubor, puesto que se apropian incluso de su identidad barrial como mero reclamo comercial, en su visita puntual al barrio de moda.

Los barrios también pasan de moda con la política de tierra quemada que practica determinada hostelería de esta ciudad, una hostelería va de ZAS en ZAS centrifugando el ruido y las molestias de barrio en barrio. Una política de tierra quemada que también practica el negocio inmobiliario y especulativo de los pisos turísticos, como está demostrándose en grandes ciudades europeas, y más al norte tenemos un claro ejemplo.

WELCOME MR. AIRBNB. BYE, BYE, RUSSAFA

Ruzafa, 3 de agosto de 2016
Associació Veïnal Russafa Descansa
 
Ruzafa, 27 de julio de 2016


APARTAMENTOS TURÍSTICOS EN FINCAS RESIDENCIALES.
De nuevo tarde y mal en el barrio de Ruzafa: Welcome Mr. AirBnB. Bye, Bye, Russafa

NOTA PREVIA

A diferencia de como apareció en un breve comunicado de prensa de junio de 2016, la Asociación Vecinal Russafa Descansa no reclama una mera campaña de control de los apartamentos turísticos en Ruzafa. Este colectivo vecinal reclama una campaña municipal de inspección, cese de actividad y clausura de los apartamentos turísticos en fincas residenciales en este barrio.

Todo ello para evitar actuar tarde y mal, esta vez con los pisos turísticos, en Ruzafa como con la limitación en la apertura de nuevos establecimientos hosteleros; TARDE dado que el barrio ya estaba saturado en diciembre de 2014 cuando entró finalmente en vigor tal pretendida limitación (303 locales sin considerar las terrazas hosteleras); y MAL, pues la moratoria encubierta durante tal propagada limitación (“no iban a abrir nuevos locales”, “no abrirán más locales”) no hizo sino alimentar más la saturación hostelera, con la apertura de nuevos locales (350 locales en la actualidad más 250 terrazas), que es el efecto llamada de la ahora pretendida regulación de los pisos turísticos en fincas residenciales (en la actualidad unos 340 pisos turísticos en fincas residenciales de Ruzafa, pronto una de tres fincas residenciales de Ruzafa tendrá algún piso turístico en su comunidad de vecinos).

De nuevo, Ruzafa un ejemplo de lo que no hay que hacer en la ciudad de Valencia.



1.- LA PROLIFERACIÓN DE ALOJAMIENTOS TURÍSTICOS DE CORTA ESTANCIA EN FINCAS RESIDENCIALES DEL BARRIO DE RUZAFA: EL IMPACTO SOCIAL DE LOS APARTAMENTOS TURÍSTICOS.

Gran parte del barrio de Ruzafa tiene problemas crecientes de ruido por saturación hostelera, los apartamentos turísticos son otro de los componentes de las zonas acústicamente saturadas. La capacidad de carga de Ruzafa como barrio hace tiempo que superó sus límites. El modelo propuesto para Ruzafa como local o zona de diversión de la ciudad de Valencia es claramente insostenible para sus vecinos, sus comercios de proximidad y, tras la proliferación de apartamentos turísticos, lo será aún más para la misma hostelería de barrio, con la declaración de una ZAS en Ruzafa.

Los pisos turísticos se han generalizado no solo en la ciudad de Valencia, en el barrio de Ruzafa a marchas forzadas, tanto los particulares como sobre todo los gestionados por empresas e inmobiliarias especializadas, cada vez más mayoritarias.

Este colectivo vecinal ya lo ha puesto suficientemente de manifiesto, los vecinos de Ruzafa están abandonando el barrio por “acoso acústico” y sus viviendas están siendo sustituidas por apartamentos turísticos en fincas residenciales. En el saturado barrio de Ruzafa ya son otro de los problemas con el que tienen que “convivir” solo sus vecinos, en sus propias fincas.

Ruzafa ya cuenta con unos 340 pisos turísticos en las fincas de las calles Sueca, Denia, Cádiz, Sevilla, Puerto Rico, Cuba Salvador Abril, Literato Azorin, Luis de Santangel, Pedro III, Femenia, Clero, Maestro Aguilar,... con apartamentos turísticos que se anuncian en sus mismas fachadas, en menor grado, y sobre todo en conocidos portales de internet. El mapa y las imágenes que se acompañan son una clara muestra. Pronto una de tres fincas residenciales de Ruzafa tendrá algún piso turístico.

Como se apuntó en una breve nota de prensa de junio de 2016 de este colectivo vecinal, no son solo los vecinos de Ruzafa los que se están quejando al ayuntamiento de Valencia. Los mismos hoteles del barrio, como el de el cruce de Sueca-Denia, ya se han quejado a este consistorio por las continuas "molestias" de los clientes de una gran finca destinada exclusivamente a apartamentos turísticos. En otras calles de este barrio estos pisos turísticos ya están generando problemas a los vecinos y residentes -jolgorios y fiestas nocturnas- con los que comparten finca y patios de manzana.

En su momento, determinados pisos de esta modalidad de turistas ya requirieron en Ruzafa la presencia policial e incluso de los bomberos por incidentes puntuales de sus “usuarios” después de una ajetreada noche. En los barrios valencianos de Ciutat Vella ya son públicas -y suficientemente ilustradas- las quejas y denuncias de sus vecinos y asociaciones vecinales, que han llegado incluso a los tribunales de justicia. No todo es un turismo familiar el de los pisos turísticos.

Sin vecinos no hay barrio: la generalización y promoción de pisos en fincas residenciales destinados a uso inmobiliario turístico en el todavía barrio de Ruzafa va a contribuir a acelerar el desplazamiento y expulsión de sus residentes, originarios y acogidos. La compra de edificios y pisos, o su alquiler por largos periodos para uso turístico de corta estancia, supone ya una constante disminución del parque de viviendas disponibles para uso residencial.

Al apartar viviendas para uso exclusivo del negocio especulativo e inmobiliario de los apartamentos turísticos, esta modalidad de negocio encarece la vivienda y contribuye a la destrucción de tejido social y comercial de Ruzafa; los servicios comerciales y de proximidad que requieren los alojamientos turísticos de corta estancia estival o de fin de semana son bastante diferentes a los residenciales. Sin comercio, no hay barrio. El riesgo de desertificación comercial ya es patente cuando una tercera parte de los bajos de las fincas de este barrio se encuentran vacíos.

Este es parte de su elevado impacto social, sin olvidar que además el empleo asociado a los pisos turísticos y su remuneración es de muy bajo coste, en un sector el hostelero ya de por sí bastante precarizado.

De la misma forma que la hostelería encarece los locales comerciales y expulsa al comercio de proximidad de barrio, los apartamentos turísticos encarecen el alquiler convencional y dificultan el acceso a la vivienda de los todavía vecinos.

La generalización de pisos turísticos en este barrio constituye una vertiente más del proceso de "gentrificación" de Ruzafa y el consiguiente desplazamiento de actividades comerciales y de sus actuales residentes a otras periferias menos "atractivas". Está por ver el atractivo que tendrá para sus vecinos un barrio saturado turísticamente, como ya lo son los barrios valencianos de Ciutat Vella, pero es evidente el conflicto latente con el uso predominantemente residencial del tradicional e histórico barrio de Ruzafa.

2.- SU REGULACIÓN MUNICIPAL Y EL REGISTRO AUTONÓMICO. NORMATIVA HOSTEL EN FINCAS RESIDENCIALES: UNA MORATORIA ENCUBIERTA PARA EL EFECTO LLAMADA. TARDE Y MAL COMO EN RUZAFA

Los apartamentos turísticos son viviendas que «de forma continua y permanente, son arrendados por temporadas (días, semanas, meses o el tiempo que se determine con los clientes) para un uso distinto al de vivienda habitual, desarrollando una actividad económica y con carácter claramente turístico que debe ajustarse a la legislación vigente».

Los contratos para el alojamiento de corta estancia en apartamentos turísticos no son meros contratos de arrendamiento de viviendas. El alojamiento de corta estancia es una actividad económica asociada a establecimientos y viviendas destinadas a uso turístico. Esta modalidad de negocio requiere al menos la correspondiente “licencia” municipal de actividad, una calificación de compatibilidad urbanística y su inscripción en el correspondiente registro autonómico de establecimientos turísiticos.

Como tal modalidad de negocio no puede desarrollarse en la ciudad de Valencia en pisos ni en fincas definidas para uso residencial pues es precisa su compatibilidad urbanística. Es el Plan General de Ordenación Urbana de Valencia (PGOU) quien define los usos industriales, terciarios, residenciales... Esta norma es suficientemente tajante al respecto pues exige una calificación urbanística terciaria a esta modalidad de negocio. De acuerdo con el plan en vigor, el alojamiento turístico de corta estancia es incompatible con el uso residencial de todas las fincas en las que hay apartamentos turísticos en esta ciudad, incluido el barrio de Ruzafa donde están proliferando exponencialmente y de una manera ilegal.

El núcleo histórico tradicional de Ruzafa está reconocido como Bien de Relevancia Local (BRL), una gran parte de sus edificios están protegidos y cualquier modalidad de negocio que pretenda iniciar su actividad está sujeto a comunicación ambiental.

Como tal actividad a desarrollar en zonas definidas para uso terciario en el PGOU, el alojamiento turístico precisa la correspondiente comunicación ambiental. El actual gobierno municipal pretende modificar sus ordenanzas solo para que el procedimiento de apertura de este negocio privado inmobiliario en fincas residenciales se lleve a cabo mediante una mera declaración responsable de su promotor, es decir, mediante las conocidas “licencias exprés”, que tanto juego han dado a actividades calificadas como molestas por ruidos, vibraciones, olores y humos como las hosteleras, también a la hora de subsanar sus deficiencias, sus irregularidades y sus incumplimientos normativos más básicos.

En cualquier caso, los apartamentos turísticos no tienen cabida en fincas residenciales, de acuerdo con el PGOU en vigor.

Este ayuntamiento de Valencia ha reconocido públicamente a través de su responsable de turismo que "no hay nadie legalizado”, es decir, todos los apartamentos turísticos de la ciudad de Valencia en fincas destinadas a uso residencial son ilegales. Ningún apartamento turístico de esta ciudad en finca residencial se encuentra inscrito legalmente en el registro autonómico de viviendas turísticas por cuanto se encuentran en zonas residenciales.

El registro e inscripción de los apartamentos turísticos se realiza concretamente en el Registro de Empresas, Establecimientos y Profesiones Turísticas de la Comunidad Valenciana. Para llevarlo a cabo es necesaria la referida compatibilidad urbanística que como se ha establecido no procede en fincas residenciales, de acuerdo con el PGOU en vigor en la ciudad de Valencia.

A este respecto, ha quedado suficientemente clara la misión principal de una Proposición No de Ley presentada por el grupo parlamentario Podem en las Cortes Valencianas y aprobada recientemente por todos los grupos parlamentarios: redefinir las viviendas turísticas, incorporando las ubicadas en fincas residenciales, y darle cobertura al ayuntamiento de Valencia y a la Generalitat en la calificación urbanística del suelo donde debe estar un vivienda turística.

Esta funcional proposición no de ley redefine el concepto de “viviendas de uso turístico” de esta forma: “Se entiende por viviendas de uso turístico aquellas ubicadas en inmuebles situados en suelo de uso residencial, donde se vaya a ofrecer mediante precio el servicio de alojamiento en el ámbito de la Comunidad Autónoma de Valencia, de forma habitual y con fines turísticos". Para cerrar el círculo, esta proposición no de ley contempla incluso el cambio de uso a terciario de las fincas residenciales cuando se cumplan las condiciones de vivienda turística, finca con vecinos al margen. De esta forma, “Aquellas viviendas turísticas que se encuentren en suelo residencial y en las que se presten servicios complementarios o similares a los que se prestan en los establecimientos hoteleros, habrán de solicitar previamente el cambio de uso a terciario”. Falta por determinar si habrán de solicitar previamente algo a las comunidades de vecinos y residentes o no van a pintar nada en aras de la “libre iniciativa” en sus propias fincas.

Concluyendo, pisos turísticos para todos, especialmente, para los grupos y promotores inmobiliarios, que es de lo que se trata con esta pretendida regulación de los apartamentos turísticos en fincas residenciales. De lo que se ha tratado recientemente en las Cortes Valencianas no es sino de una “desregulación” encubierta sin control de los pisos turísticos. Todo ello para evitar el PGOU de la ciudad de Valencia y entrar por la puerta falsa los pisos turísticos en las fincas residenciales de los barrios de Valencia, especialmente, de aquellos dotados con núcleos históricos tradicionales como el de Ruzafa.

En cualquier caso, el PGOU de Valencia continúa en vigor, así lo sentenciarán los tribunales de justicia.

Una mera cédula de habitabilidad será el requisito que va a exigir el actual gobierno municipal y autonómico para que entren los pisos turísticos en las fincas residenciales y sean con el tiempo abandonadas contra su voluntad por sus vecinos originarios o acogidos, dado el elevado impacto ambiental de esta modalidad de negocio.

Así las cosas, no se puede considerar que la normativa que está en camino pueda calificarse como HOSTIL, como ha realizado el actual responsable municipal de turismo, sino más bien una normativa HOSTEL para los apartamentos turísticos en las fincas residenciales de la ciudad de Valencia.

Por todo ello, la Asociación Vecinal Russafa Descansa reclama una campaña municipal de inspección, cese de actividad y clausura de los apartamentos turísticos en fincas residenciales en este barrio para evitar actuar otra vez tarde y mal, esta vez con los pisos turísticos en Ruzafa, como con la limitación en la apertura de nuevos establecimientos hosteleros; TARDE dado que el barrio ya estaba saturado en diciembre de 2014 cuando entró finalmente en vigor tal pretendida limitación (303 locales sin considerar las terrazas hosteleras); y MAL, pues la moratoria encubierta durante tal propagada limitación (“no iban a abrir nuevos locales”, “no abrirán más locales”) no hizo sino alimentar más la saturación hostelera, con la apertura de nuevos locales (350 locales en la actualidad más 250 terrazas), que es el efecto llamada de la ahora pretendida regulación de los pisos turísticos en fincas residenciales (en la actualidad unos 340 pisos turísticos en fincas residenciales de Ruzafa, pronto una de tres fincas residenciales de Ruzafa tendrá algún piso turístico en su comunidad de vecinos)

3.- NO SON PISOS “NORMALES”: EL IMPACTO AMBIENTAL DE LOS ALOJAMIENTOS DE CORTA ESTANCIA Y LA INCOMPATIBILIDAD DEL NEGOCIO DE LOS PISOS TURÍSTICOS EN FINCAS RESIDENCIALES.

No son pisos “normales” los destinados a los turistas de corta estancia como los de los residentes permanentes por lo que sus propietarios y gestoras inmobiliarias no pueden carecer de responsabilidad subsidiaria.

El mismo responsable municipal de turismo ha reconocido públicamente que en los apartamentos turísticos hay una gran rotación de inquilinos -“cada tres días”- y que pueden generar molestias y problemas al vecindario. De hecho los generan. Los horarios de los turistas, incluso de los más familiares, y de quien de noche le corresponde dormir para ir a trabajar temprano no suelen coincidir, ni por supuesto los horarios de llegada y salida de sus vuelos de bajo coste. Todo ello en fincas residenciales.

Con todo, este gobierno municipal considera a través de sus representantes que las fincas residenciales con pisos turísticos son fincas “normales” como sus clientes. En la misma linea, la asociación de propietarios de apartamentos turísticos ha afirmado sin rubor que estos vecinos molestan como puede molestar un vecino normal. Sin embargo, no son unos vecinos/inquilinos cualesquiera ni tampoco sus molestias son las normales...

No hay nada como reducir los problemas a unas pocas fincas, limitarlos a unos exagerados vecinos. No hay nada como banalizar el "malestar”.

Las molestias para los vecinos, los elementos comunes de estas fincas “más intensivamente” usados sobre todo los fines de semana y “fiestas” a mantener/limpiar y reparar, esta vez sí, por todos los "propietarios".

Son solo los vecinos los que están sufriendo las molestas consecuencias de esta nueva modalidad hotelera en Ruzafa en sus domicilios. Son solo los vecinos los que renuncian unilateralmente a derechos fundamentales que le corresponde proteger ineludiblemente a este consistorio como sentencian los tribunales de justicia y la sindicatura de agravios, entre los que se encuentra la el derecho a vivir en un vivienda digna.

Este colectivo vecinal ya ha insistido suficientemente en la manifiesta incompatibilidad del derecho al descanso de los vecinos del barrio de Ruzafa y el derecho a la diversión de los clientes de la hostelería, especialmente por las franjas horarias de determinadas modalidades de negocio en un contexto de saturación generalizada del barrio. En el caso de la modalidad de los apartamentos turísticos vuelve a manifestarse esta incompatibilidad dentro de las propias fincas de los vecinos y residentes de Ruzafa. No es un problema solo de legalidad o ilegalidad de los pisos turísticos, es un problema de fines: los turistas vienen a divertirse y los todavía residentes y vecinos de Ruzafa necesitan descansar para trabajar y que les dejen relativamente tranquilos. Las personas más mayores se han ganado su merecido descanso. Sus horarios son incompatibles y su comportamiento se comparte en fincas residenciales.

No corresponde a las asociaciones vecinales defender el derecho al negocio inmobiliario asociado al alojamiento turístico de corta estancia en el barrio de Ruzafa a costa del malestar de sus residentes, en la medida que esta modalidad de turismo de bajo coste contribuye a deteriorar aún más su sobrecargado entorno y su menguada calidad de vida. Sí que corresponde a las asociaciones reclamar la ineludible protección de los derechos más básicos por parte de las administraciones públicas y la correspondiente responsabilidad cuando son vulnerados.

La falta de responsabilidad subsidiaria es una constante de los apartamentos turísticos y una “laguna legal” a la que se aferran los propietarios y especialmente las gestoras profesionales e inmobiliarias que los comercializan para hacer oídos sordos a las molestias y ruidos que plantean estos alojamientos turísticos en viviendas y fincas residenciales, es decir, con vecinos. Esta laguna legal se quiere rellenar con una mera hoja de reclamaciones o como apuntan las mismas asociaciones de propietarios de pisos turísticos: las comunidades de vecinos tienen a su disposición para atenderles “teléfonos” las 24 horas ante las molestias de estos inquilinos ocasionales y cambiantes. Los vecinos ya están acostumbrados a intentarlo sin éxito con sus llamadas al 092 cuando las molestias proceden de sus calles.

Ante las molestias y problemas de estos turistas/inquilinos de paso en zonas y fincas residenciales, la única opción que les quedará a los vecinos y residentes de Ruzafa será invocar el artículo 18 del reglamento autonómico que regula -de momento- estas viviendas turísticas. Este articulo prevé la resolución del contrato de alojamiento turístico previa advertencia entre las partes si se incumplen toda una serie de prohibiciones por parte de sus inquilinos; entre otras "realizar cualquier actividad que entre en contradicción con los usos de convivencia, higiene y orden público habituales, o que impida el normal descanso de otros usuarios del inmueble", los vecinos suponemos. Estas prohibiciones están definidas para cada contrato del propietario del apartamento turístico con cada turista que alquila por un periodo limitado este piso en una finca con otros residentes permanentes, los que sí son vecinos. Y ya sabemos cómo son los contratos en este negocio de pisos turísticos, negociados por internet.

A pesar de todo lo anterior, los sufridos vecinos de Ruzafa tendrán que reclamar al propietario del apartamento turístico, en su mayoría empresas inmobiliarias gestoras de varios pisos, por unas molestias que irán cambiando de fin de semana en fin de semana, con los renovados alojamientos de turistas de corta estancia. Propietarios y empresas inmobiliarias especializadas que no suelen residir ni estar presentes en los barrios donde molestan, no van a hacerse responsables de sus clientes temporales y foráneos.

Es preciso establecer la responsabilidad subsidiaria de los propietarios o gestores profesionalizados de los apartamentos turísticos por las molestias y desperfectos ocasionados por sus inquilinos temporales en las fincas donde desarrollen su negocio. Esta actividad empresarial debería estar tutelada por administraciones públicas y además sujeta a autorización, renovación y revocación municipal.

En caso contrario, la indefensión de derechos básicos y fundamentales para los residentes permanentes será más que manifiesta en esta modalidad de negocio con “turistas de corta estancia”. En esta situación, la única vía que les quedará a las comunidades de vecinos será la reclamación judicial por las molestias reiteradas de inquilinos ocasionales y cambiantes. Sin embargo, la lesión de derechos ciudadanos por la inactividad municipal en la inspección y clausura de actividades ilegales en fincas residenciales puede llevar a la exigencia judicial de responsabilidad patrimonial.


4.- EL AYUNTAMIENTO DE VALENCIA: MÁXIMO RESPONSABLE DE LA PROLIFERACIÓN DE PISOS TURÍSTICOS EN FINCAS RESIDENCIALES DE RUZAFA Y LA VULNERACIÓN DE DERECHOS FUNDAMENTALES

A este consistorio no solo le basta con desproteger y saturar acústicamente a sus vecinos desde las aceras, chaflanes, calles y plazas... en locales con ambientación musical mal insonorizados. Esta corporación municipal pretende rescatar y legalizar el negocio privado y cada vez más profesionalizado de los apartamentos turísticos en fincas residenciales de la ciudad de Valencia y en el barrio de Ruzafa. Mientras tanto continúa desamparando derechos básicos y fundamentales vulnerados por la contaminación y saturación acústica (inviolabilidad del domicilio, la intimidad personal y familiar, la protección de la salud, medio ambiente adecuado y a una vivienda digna, al margen de la integridad física y moral) con la misma permisividad con la que ha mantenido y mantiene los pisos turísticos en fincas residenciales desde hace bastante tiempo en la ciudad de Valencia, también en el todavía barrio de Ruzafa.

Hace años que los tribunales han asumido que el ruido que se cuela en nuestras casas vulnera el derecho fundamental a la inviolabilidad del domicilio. A partir de ahora, también en las mismas comunidades de vecinos mediante la legalización de esta modalidad de negocio basada en el alojamiento turísitico de corta estancia en fincas residenciales.

¿Trasladamos las “molestias” de las calles de Ruzafa también al interior de sus comunidades de vecinos? ¿Está animando este consistorio otra forma de saturación acústica, esta vez en las mismas fincas de los vecinos, para más adelante responsabilizar a los vecinos de la declaración de una nueva zona acústicamente saturada en la ciudad de Valencia?

¿Rescatamos personas y protegemos derechos básicos que deben prevalecer sobre el derecho absoluto al negocio de los pisos turísticos, incompatibles con el derecho al descanso en barrios residenciales y núcleos históricos como el de Ruzafa? o realmente ¿Este nuevo consistorio rescata y promueve negocios molestos en fincas residenciales?

Otra vez tarde y mal, Ruzafa como ejemplo de lo que no hay que hacer ni como hacerlo, esta vez en las propias comunidades de vecinos.

5.- TURISMO DE BAJO COSTE ¿ES ESTE EL MODELO DE TURISMO Y DE CIUDAD POR EL QUE APUESTA EL ACTUAL GOBIERNO MUNICIPAL?

El modelo de ciudad y de barrio lo definen los usos a los que se destinen sus fincas residenciales, pero también los abusos consentidos. ¿Es el modelo de turismo de bajo coste, propio de los pisos para turistas de corta estancia en fincas residenciales, por el que apuesta el actual gobierno municipal? ¿Es este el modelo de barrio -de elevado coste social y negativo impacto ambiental- para los vecinos de Ruzafa por el que vuelve a apostar otro gobierno municipal?

El mero establecimiento de una tasa turística a los alojamientos de corta estancia en apartamentos turísticos ¿compensará el elevado coste social y negativo impacto ambiental sobre los vecinos de Ruzafa o de otros barrios de la ciudad de Valencia? ¿Se destinará esta tasa a la mejora del barrios de Valencia o, como tal tasa finalista, su recaudación se destinará a mejoras del propio sector turístico? ¿Tendrá una elevada capacidad recaudatoria o como en otras comunidades autónomas estará entorno a los 50 céntimos por alojamiento/persona/día? ¿Se recaudará al menos para hacer el trabajo de inspección y control de los apartamentos turísticos ilegales?

Si lo que pretende el actual gobierno municipal es avanzar hacia "ciudades amigables" con barrios sostenibles, en los que se garantice un mínimo equilibrio entre los usos residenciales y comerciales, es precisa una amplia campaña de inspección de esta modalidad de alojamientos turísticos de corta estancia. Todo ello para el cese de la actividad y la clausura de la mayor parte los que operan en fincas residenciales del amplio núcleo histórico tradicional de Ruzafa y su ensanche popular.

Desplazado y sustituido el comercio tradicional y de proximidad de Ruzafa por la hosteleria, bastantes vecinos han comenzado a abandonar por puro hartazgo e impotencia este barrio, ante la pasividad municipal en la protección de derechos básicos vulnerados por la saturación acústica. Sin vecinos no hay barrio. Comercio y vida cotidiana están íntimamente vinculados. Sin comercio de proximidad no hay barrio.

El negocio de los apartamentos turísticos está sustituyendo una gran parte de la vivienda destinada a uso residencial en el barrio de Ruzafa, de la misma forma en la que ha sido sustituido el comercio de proximidad de barrio por la hostelería de fin de semana de la ciudad de Valencia.

Todo ello contribuye al deterioro y a la definitiva conversión de Ruzafa en un parque temático al servicio exclusivo de la hostelería. El problema no es que haya hostelería en Ruzafa, el problema es que solo hay hostelería. El problema se agudizará con la generalización de los pisos turísticos. Podrá la hostelería y el comercio de barrio sobrevivir sin vecinos solo con el negocio de los fines de semana. ¿Van los turistas de fin de semana al mercado o a los supermercados? Podrá la hostelería de la ciudad de Valencia en la saturada Ruzafa compensar su negocio con el turismo “low cost” de fin de semana.

En modo alguno, se puede considerar al turismo de bajo coste de los apartamentos turísticos un turismo de calidad que fortalezca y revalorice la identidad de barrios históricos como el de Ruzafa, sino su banalización sin rubor, puesto que se apropian incluso de su identidad barrial como mero reclamo comercial, en su visita puntual al barrio de moda.

Los barrios también pasan de moda con la política de tierra quemada que practica determinada hostelería de esta ciudad, una hostelería va de ZAS en ZAS centrifugando el ruido y las molestias de barrio en barrio. Una política de tierra quemada que también practica el negocio inmobiliario y especulativo de los pisos turísticos, como está demostrándose en grandes ciudades europeas, y más al norte tenemos un claro ejemplo.

WELCOME MR. AIRBNB. BYE, BYE, RUSSAFA
Ruzafa, 27 de julio de 2016
Associació Veïnal Russafa Descansa



Ruzafa, 30 de junio de 2016

MUDANZAS POR ACOSO ACÚSTICO: LAS OTRAS CARAS MENOS VISIBLES DE LA SATURACIÓN HOSTELERA DE RUZAFA

Si las molestias y el ruido son algunas de las consecuencias más evidentes de la saturación hostelera de Ruzafa -y no hace falta sino preguntar al ayuntamiento de Valencia de la razón de la mayoría de las quejas que se reciben desde el barrio- hay otros negativos efectos hasta hace poco menos visibles, pero cada vez más evidentes: los vecinos se mudan y abandonan sus proyectos de vida en su barrio originario o de acogida.

Todas las imágenes que se acompañan son de mudanzas de vecinos de Ruzafa de este mes de junio. Ya está suficientemente constatado el constante goteo de familias y vecinos que están abandonando el barrio de Ruzafa por el acoso acústico hostelero. Como atestiguan estas imágenes, esta sangría ya no está teniendo lugar exclusivamente en las “zonas cero” más afectadas por disco-pubs, discotecas y "afters", ni tampoco es propia de las "falsas" calles peatonales de Ruzafa.

El comercio tradicional y de proximidad también está desapareciendo de nuestras calles sustituido por un única actividad, cada vez más alejada de la hostelería de barrio, cada vez más nocturna y de fin de semana, cada vez más incompatible con el descanso y trabajo vecinal. Sin comercio, no hay barrio.

El próximo proceso lo van a protagonizar los pisos y fincas destinados a turistas, pues se han generalizado a marchas forzadas los pisos destinados al negocio turístico inmobiliario en Ruzafa. Los vecinos van a ser sustituidos por turistas alojados durante periodos de corta estancia en fincas residenciales. Todos los pisos turísticos en fincas residenciales de Ruzafa son ilegales.

El barrio de Ruzafa se ha caracterizado desde siempre por disponer de un tejido vecinal bastante activo y muy reivindicativo. Gracias al incansable trabajo de su entramado asociativo se consiguieron importantes mejoras para la calidad de vida y la cohesión social del barrio, conocidas por todos. Y sin embargo, sin vecinos ni comercio, no hay barrio, solo un parque temático para una hostelería de elevado impacto acústico y, pronto, para la generalización del turismo de bajo coste.

Las mudanzas son también otro de los resultados de la exclusiva "convivencia" de los vecinos de Ruzafa con la saturación acústica. No se está garantizando la "convivencia" entre ocio/negocio y descanso en zonas y calles de predominio residencial sino los efectos acumulativos de la saturación acústica, especialmente los más acusados que se corresponden con las franjas horarias más incompatibles con el descanso vecinal, las propias de disco-pubs, discotecas y “afters”.

El resultado de esta tan particular "convivencia" es la renuncia unilateral y exclusiva de los vecinos y residentes de Ruzafa a derechos reconocidos como fundamentales, uno de los cuales es la dignidad de la vivienda. Una renuncia que llega al extremo de no poder abrir la ventana o el balcón en pleno verano.

Mientras la clientela, sobre todo de una minoría hostelera, puede hacer lo que le da la gana, decidir a qué hora y cómo retornar a su casa, molestar abiertamente, incluso a horas intempestivas, y volver a esta zona de diversión nocturna cada fin de semana, los vecinos y residentes están abandonando el barrio de Ruzafa definitivamente.

La otra cara cada vez más visible de la saturación hostelera de Ruzafa, los vecinos se mudan por acoso acústico.

Ruzafa, 30 de junio de 2016
Associació Veïnal Russafa Descansa



Ruzafa, 23 de junio de 2016

EL VECINDARIO DE RUZAFA CONSIGUE PARALIZAR UNA VERBENA ILEGAL ORGANIZADA POR UNA DISCOTECA EN EL ENTORNO DEL MERCADO DE RUZAFA ESTE SABADO 25 JUNIO

El vecindario de Ruzafa consigue paralizar una verbena ilegal organizada por una conocida discoteca y una falla que se iba a realizar este sábado 25 de junio frente a la Iglesia de San Valero y el Mercado de Ruzafa.

El vecindario que sí reside en Ruzafa argumenta que dichas prácticas además de molestas hasta altas horas de la madrugada, suponen una privatización más del espacio público por parte de una de minoría hostelera con la colaboración fallera.

Este grupo hostelero de la ciudad de Valencia es uno de los grandes responsables del ciclo completo de la saturación acústica de este barrio durante todo el año. Esta minoría cuenta con discotecas, discopubs y lounge bars por toda Ruzafa que disfrutan de horarios plenamente incompatibles con el descanso vecinal en zonas de predominio residencial.

Esta discoteca amplía de otra forma su negocio privado y aforo a las estrechas calles del núcleo histórico tradicional de Ruzafa a costa del malestar vecinal, esta vez con la excusa de las hogueras de San Juan.

Nota: Los permisos de San Juan aprobados por la Concejalía de Espacio Público del Ayuntamiento de Valencia se pueden comprobar en el siguiente enlace oficial:


Ruzafa, 23 de junio de 2016
Associació Veïnal Russafa Descansa 




Ruzafa, 17 de junio de 2016

LAS “FALSAS” CALLES PEATONALES DE RUZAFA. “ZONAS CERO” DE SU SATURACIÓN ACÚSTICA PARA SU DELIMITACIÓN COMO ZAS

En las fases de la reurbanización de Ruzafa algunas calles se peatonalizaron: Clero, Femenia, Prim, Sornells, Vivons....

Estas cinco calles peatonales disfrutan de 25 locales hosteleros (entre ellos dos disco-pubs) con más de 23 terrazas, incluidas las que también afectan a las fincas colindantes. Estas calles del núcleo histórico tradicional de Ruzafa, protegido como Bien de Relevancia Local (BRL), están en el entorno de dos discotecas, tres disco-pubs y varios bares con ambientacion musical (lounges). No son calles peatonales, alguna de estas calles es una "zona cero" con dos disco-pubs a menos de 65 metros. Estas calles padecen horarios hosteleros, aglomeraciones, resonancias, estridencias... completamente incompatibles con el descanso vecinal, la intimidad y la dignidad de la vivienda.

El problema no es que haya calles peatonales en Ruzafa, el problema es que son “falsas” calles peatonales: no son ni peatonales y cada vez menos residenciales, ni tan siquiera son comerciales. Cada vez más sus vecinos y residentes se mudan por “acoso acústico” y son sustituidos por turistas que se alojan en apartamientos ilegales de corta estancia.

Los negativos efectos acumulativos de todas estas actividades en una zona residencial no son los propios del mínimo bienestar. Algunas de estas calles se utilizan de día para el tráfico oportunista (Clero y Sornells) y para el prolongado reparto hostelero de bebidas más allá del horario autorizado (Clero y Femenia); de noche, en las menos saturadas por las actividades hosteleras, para el aparcamiento motorizado privado de la clientela hostelera y la práctica del animado botellón, y otros asuntos “menores”.

Estas “falsas calles peatonales” se encuentran además en entornos de cruces saturados por las terrazas: el cruce de las calles Cádiz-Puerto Rico-Cura Femenia dispone de 37 mesas hosteleras con sus 148 sillas (ningún banco público de libre acceso); el cruce Cádiz-Centelles-Sornells-Vivons cuenta con 74 mesas hosteleras con sus 296 sillas (solo 2 bancos públicos libre acceso).

El problema no es que haya terrazas en el dominio público municipal de Ruzafa, el problema es que sólo hay terrazas privadas en sus plazas, aceras, calles peatonales, sobre todo, en estos recientes y ampliados chaflanes, que son sus espacios públicos. En estos dos cruces hay auténticas “macroterrazas” que llegan a las 18 mesas privadas, más de 70 personas bajo mismo de una comunidad de vecinos.

El problema no es que haya calles peatonales en Ruzafa, el problema es que son “falsas” calles peatonales. La saturación hostelera del núcleo histórico tradicional de Ruzafa ha convertido a determinadas calles en "zonas cero" de la saturación acústica de este todavía barrio. Los vecinos abandonan sus residencias, sus proyectos de vida en este barrio, y se mudan contra su voluntad por acoso acústico. Ante tanto desamparo del ayuntamiento de Valencia -que solo garantiza la "seguridad jurídica" de disco-pubs, discotecas y afters en entornos de predominio residencial- solo cabe una nueva declaración de una zona acústicamente saturada (ZAS) en la ciudad de Valencia para proteger jurídicamente los derechos más básicos de los que sí residen en el barrio.
Algunos de estos locales, que lo celebran todo en el parque temático de Ruzafa, deberían estar apercibidos y en proceso de cierre por acumular denuncias tan graves como la manipulación de sus limitadores de sonido, denuncias que cuentan con resoluciones municipales al respecto. El "privilegio" de disponer de una “licencia” en vigor en zonas de predominio residencial no debería ser consentido por este gobierno municipal si además va acompañado de abusos que llegan a programar los limitadores por encima de los decibelios autorizados, o mantener limitadores no homologados, al tiempo que este consistorio no lleva a cabo las sonometrias que le reclama el mismo Sindic de Greuges en determinados de estos locales. Por si no fuera suficiente para esta corporacion municipal, algunos de estos locales además han ampliado recientemente sus dimensiones y aforo cuando la ordenanza de contaminación acústica en vigor nos les autoriza tales excesos por situarse en zonas residenciales y encontrarse estos locales a menos de 65 metros.

Esta minoría hostelera de la ciudad de Valencia lo único que promociona con la expansión de su “cadena de valor” es una ZAS en el barrio de Ruzafa. Al amparo de la desprotección municipal de derechos reconocidos como fundamentales, este grupo empresarial amplia continuamente su negocio en Ruzafa, terrazas + copas + lounges + discopubs + discotecas + afters + verbenas. Esta minoría agrupada hace "caja" a deshoras y abusivamente solo a partir del malestar creciente de cada vez más vecinos en zonas todavía residenciales de este barrio, y no sólo en el núcleo histórico y tradicional de Ruzafa. Pronto también ampliará su "cadena de valor" a los apartamentos turísticos pronto legales en las zonas con los vecinos más acosados por sus negocios.

Este consistorio consiente y amplia los negativos efectos acumulativos de establecimientos plenamente incompatibles con zonas residenciales y el descanso vecinal. Este consistorio se limita a limpiar la suciedad a la mañana siguiente para que en el escenario de estas calles parezca que no ha pasado nada, sin vecinos ya no pasará nada. El “privilegio” y los abusos de estos locales se amplifican en las calles estrechas del núcleo histórico de Ruzafa cuando además este gobierno municipal autoriza la celebración conjunta de verbenas por las discotecas y afters de este grupo empresarial con las comisiones falleras con la excusa de las hogueras de San Juan. Ante tanto desamparo, solo cabe la autoprotección por la vía judicial.

Este grupo de negocios canaliza y promueve sin rubor -suficientes veces por semana durante suficientes semanas consecutivas en un ya largo periodo- la saturación acústica del barrio de Ruzafa desde el copeo/tardeo en sus nuevas terrazas y bares musicales a las 17:00 horas hasta más allá de las 7:30 horas de la madrugada a las que habitualmente cierran sus discotecas en el todavía barrio Ruzafa, al margen de atraer como un imán a sus entornos el botellón del que también son "corresponsables", como ha reconocido públicamente la responsable municipal de protección ciudadana, ya sea a la vista y en plena Gran Vía Germanías o en estas maltratadas calles peatonales.

El resultado en el amplio núcleo histórico tradicional de Ruzafa, protegido como Bien de Relevancia Local (BRL), es también que sus vecinos y residentes se mudan por hartazgo e impotencia ante tantos desmanes acumulados. Los vecinos que permanecen tienen pocas alternativas para la protección jurídica de sus derechos más básicos en el laberinto municipal de autorizaciones y connivencias. Está suficientemente contrastado que la protección, ante tanto desamparo municipal y tanta desvergüenza por hacer caja a costa del malestar vecinal, va a pasar ineludiblemente por la solicitud formal de una declaración de una zona acústicamente saturada en el todavía barrio de Ruzafa.
Con su ciclo completo de malestar en Ruzafa, esta minoría hostelera agrupada se está configurando como una de las máximas responsables de una nueva declaración de zona acústicamente saturada en la ciudad de Valencia. Tal declaración administrativa y/o judicial afectará a la totalidad hosteleros de Ruzafa, la gran mayoria con horarios más compatibles y respetuosos con el derecho al descanso y al trabajo; una declaración que sí beneficiará a la gran mayoría de los vecinos y residentes de este barrio que verán más protegidos derechos reconocidos como básicos.

En la medida que el barrio de Ruzafa tiene todos sus componentes, esta declaración comportará necesariamente una delimitación de una ZAS bien amplia de las calles beneficiadas por el establecimiento de medidas correctivas de alcance para así evitar centrifugar las molestias más acusadas de su saturación acústica más allá del núcleo histórico y tradicional de Ruzafa.

Las medidas preventivas de una ZAS en Ruzafa implantadas hasta el momento, limitación en la apertura de nuevos locales o nueva ordenanza de terrazas, ya han probado suficientemente su falta de efectividad, ni siquiera se han aplicado con rigor. En estas “falsas” calles peatonales han abierto nuevos locales hasta “el último minuto” cuando la limitación entró en vigor en diciembre de 2014. El barrio de Ruzafa cuenta ya con más de 350 locales hosteleros cuando disponía ya de 303 con la implantación de las medidas preventivas. Tarde y mal, tarde pues el barrio ya estaba saturado y mal pues no pararon de abrir nuevos locales hasta los 350 de la actualidad y además no se consideraron las terrazas hosteleras, más de 230 en estos momentos.

Las medidas correctivas de una ZAS en Ruzafa se encaminarán, por tanto, no solo a la desaturación de Ruzafa sino también a la recuperación de espacios públicos de calidad para sus vecinos y su comercio de proximidad. Las medidas se orientarán, sobre todo, a la protección de derechos constitucionales reconocidos como básicos y fundamentales -también para los vecinos y residentes del barrio de Ruzafa- vulnerados por la saturación y contaminación acústica (la intimidad personal y familiar, la inviolabilidad del domicilio, un medio ambiente adecuado y una vivienda digna).

Estos derechos constitucionales han de prevalecer ante el derecho absoluto al negocio de una minoría hostelera de la ciudad de Valencia, que es además la responsable máxima del ciclo completo del malestar en este todavía barrio, al tiempo que atrae el botellón a las calles adyacentes a sus establecimientos musicales. Todo ello con el consentimiento del actual consistorio y la colaboración puntual de determinadas comisiones falleras que organizan verbenas conjuntamente con este grupo hostelero, ya sea por las fiestas josefinas o por las hogueras de San Juan. Este grupo hostelero patrocina cualquier evento, reivindicativo o no, con orgullo o sin él, pero sobre todo una nueva zona acústicamente saturada en la ciudad de Valencia a costa del malestar de los que sí residen en este barrio y de la hostelería de barrio que se mantiene subsistiendo en el corto plazo.

El ruido no crea ni sostiene empleo, pero sí zonas acústicamente saturadas Este mismo fin de semana se comprobará otra vez, y el siguiente con hogueras o sin ellas.

Ruzafa, 17 de junio de 2016
Associació Veïnal Russafa Descansa



Ruzafa, 31 de mayo de 2016

EL COLECTIVO “RUSSAFA DESCANSA” SE CONSTITUYE COMO ASOCIACIÓN DE VECINAS Y VECINOS, APRUEBA SUS “PRINCIPIOS BÁSICOS DE ACTUACIÓN PARA EJERCER EL DERECHO AL DESCANSO EN EL BARRIO DE RUZAFA Y LA RECUPERACIÓN DE SUS ESPACIOS PUBLICOS” Y SE INTEGRARÁ EN LA FEDERACIÓN DE AVV DE VALENCIA

Reunido la tarde del 31 de mayo de 2016 en el convento franciscano de Ntra. Sra. de los Angeles del barrio de Ruzafa, el colectivo vecinal de Russafa Descansa acuerda su constitución como Asociación de Vecinas y Vecinos y solicitar su integración en la Federación de Asociaciones de Vecinos de Valencia. Esta nueva asociación vecinal ha aprobado los siguientes “principios básicos de actuación para ejercer el derecho al descanso de los vecinos de Ruzafa y recuperar sus espacios públicos”:

1.- El derecho al descanso es un derecho básico y es el derecho que debemos defender los vecinos y residentes de Ruzafa.
2.- La compatibilidad entre el derecho al negocio y el derecho al descanso no puede fundamentarse en la vulneración de derechos fundamentales como la intimidad personal y familiar, así como la inviolabilidad del domicilio (art. 18.1 de la Constitución Española), derechos constitucionales como la protección de la salud (art. 43 CE), a un medio ambiente adecuado (art. 45 CE) y a una vivienda digna (art. 47 CE).
3.- Por su condición, estos derechos básicos deben prevalecer en zonas residenciales sobre el derecho al negocio de actividades calificadas como molestas por ruidos, vibraciones, olores y humos, que además ya prácticamente no tienen lugar en Ruzafa en establecimientos públicos más o menos insonorizados sino en espacios públicos abiertos como los ocupados por las terrazas privadas en el dominio público municipal.
4.- El derecho al negocio de la hostelería de la ciudad de Valencia en este barrio no puede dar lugar a la renuncia unilateral y obligada de los vecinos de Ruzafa a derechos fundamentales.
5.- El derecho a la diversión o al ocio no es un derecho absoluto de la clientela hostelera ni de nadie.
6.- El derecho al negocio hostelero no es un derecho absoluto ni en sus variadas modalidades, ni en sus diferentes y amplias franjas horarias ni menos aún en espacios públicos como las aceras, calles, y plazas de un barrio con predominio residencial como el de Ruzafa con un amplio núcleo histórico tradicional protegido como Bien de Relevancia Local (BRL).
7.- Los vecinos tenemos el derecho a vivir con un entorno sano, adecuado y atractivo acorde a nuestras necesidades para poder disfrutar libremente de los espacios públicos con confort y seguridad, alejados de las imposiciones de la contaminación acústica, lumínica y ambiental.
8.- Los residentes tenemos el derecho a unas calles, plazas, edificios y sistemas de transporte público accesibles, que nuestras calles sean agradables, seguras y adecuadas para que las personas puedan andar sin dificultad ni obstáculos, especialmente los más pequeños y los más mayores o las personas con movilidad reducida.
9.- Tenemos el derecho a recuperar los espacios públicos para la relación, el encuentro informal, el intercambio y la sociabilidad de los vecinos de Ruzafa, desde los más mayores a los más pequeños. Sin espacios públicos no hay barrio.
10.- Todos los intereses son legítimos y no cuestionamos el derecho al negocio de los hosteleros de la ciudad de Valencia, algunos veteranos en este barrio, que se ganan honradamente la vida, como el resto de sus vecinos que sí viven en el mismo.
11.- Para poder trabajar los vecinos de Ruzafa tenemos el derecho universal a descansar, muchas personas mayores de este barrio se han merecido suficientemente este derecho básico, sus pensiones no las pagan los hosteleros sino las cotizaciones privadas y las contribuciones públicas.
12.- El ruido no crea ni sostiene empleo ni puede ser un refugio ante una crisis coyuntural, el ruido solo contribuye a deteriorar la calidad de vida de los vecinos y a declarar administrativamente y/o judicialmente zonas acústicamente saturadas.
13.- El ruido no es cultura, tenemos el derecho a promocionar y reclamar actividades culturales que se desarrollen sin molestar a los vecinos ni alterar la convivencia, en franjas horarias respetuosas con el descanso de los que sí residen en este barrio. Las tradiciones culturales no se transmiten con ruido.
14.- Nos corresponde el derecho ciudadano a definir el modelo de barrio al que aspiramos y el entorno inmediato en el que se socialicen nuestr@s hij@s, que no se corresponde con un parque temático de diversión de la ciudad de Valencia y su entorno metropolitano.
15.- Tenemos el derecho a reclamar y ejercer nuestro derecho al descanso y a resolver los problemas derivados de actividades calificadas como molestas, por las vías que consideremos más oportunas y por el cauce más normal: la mediación informal, la mediación formal, la queja, la reclamación o la denuncia, incluida la solicitud formal de una declaración administrativa y/o judicial en la que se delimiten las calles y plazas beneficiadas en Ruzafa por una zona acústicamente saturada, en la que se establezcan medidas correctivas de alcance para la protección de derechos básicos y fundamentales vulnerados por la contaminación acústica y la saturación de los espacios públicos de Ruzafa.
16.- Es al ayuntamiento de Valencia y al resto de poderes públicos a quien corresponde ineludiblemente proteger el derecho al descanso de los vecinos de la ciudad de Valencia, en vez de trasladar los problemas de ruido de barrio en barrio, ahora en Ruzafa, sin darles una solución.

No renunciamos a reclamar daños y perjuicios a la administración local y autonómica por la lesión de derechos básicos y fundamentales por su inactividad ante la contaminación acústica en el barrio de Ruzafa.

Sobre la base de estos principios básicos, la Asociación de Vecinas y Vecinos “Russafa Descansa” organizará y desarrollará iniciativas, propias y/o con otras organizaciones, para ejercer y proteger el derecho al descanso de los vecinos de Ruzafa y recuperar sus espacios públicos. Estos principios han sido aprobados en la reunión de constitución de “Russafa Descansa” como asociación vecinal la tarde del 31 de mayo de 2016 en el convento franciscano de Ntra. Sra. de los Angeles.

Estamos dispuestos a participar y colaborar activamente con todas las personas y asociaciones que estén dispuestas a revertir la deriva del barrio de Ruzafa de una forma organizada para mejorar la calidad de vida de sus vecinos, originarios y acogidos.

Ruzafa, 31 de mayo de 2016
Russafa Descansa


Ruzafa, 26 de mayo de 2016

230 TERRAZAS EN EL BARRIO DE RUZAFA:
SU DECLARACIÓN COMO ZONA SATURADA POR TERRAZAS

1.- LA RECIENTE “REURBANIZACIÓN” DEL BARRIO DE RUZAFA
La completa urbanización del barrio de Ruzafa modificó sustancialmente la imagen del barrio: aceras más anchas, carriles más estrechos, peatonalización de ciertas calles, eliminación de barreras arquitectónicas, colocación de nuevo arbolado...

Tras años de encomiable lucha vecinal, esta actuación de las administraciones públicas supuso un importante impulso para el barrio, la aparente mejora de la calidad de vida de los vecinos de este barrio histórico y la ampliación del negocio de los hosteleros de la ciudad de Valencia en los espacios públicos de todos los que residen en este todavía barrio.

El problema no es que haya terrazas en Ruzafa, el problema es que sólo hay terrazas en el núcleo histórico tradicional de Ruzafa y en su ensanche popular. La completa reurbanización de Ruzafa supuso 15.000 m2 más destinados al espacio de todos y solo 2 parques de juego infantil.

Las administraciones públicas se gastaron millones de euros en Ruzafa en su reurbanización. Estas actuaciones afectaron a más de 90.000 m2 del barrio, ampliándose en unos 15.000 m2 sus espacios públicos (aceras, chaflanes y plazas). Solo dos nuevos parques infantiles (Plaza Doctor Landete y Pintor Salvador Abril-Prim-Pedro III) han ganado los más pequeños de este barrio para jugar en estos nuevos y alicatados 15.000 m2.

El problema no es que haya terrazas en el dominio público municipal de Ruzafa, el problema es que sólo hay terrazas privadas en sus plazas, aceras, calles peatonales y, sobre todo, en sus recientes y ampliados chaflanes, que son sus espacios públicos.

7 bancos públicos de libre acceso por más de 384 terrazas privadas

En los cruces de las calles Cuba-Puerto Rico, Sueca-Puerto Rico, Sueca-Buenos Aires, Cádiz-Puerto Rico-Cura Femenia, Literato Azorin-Cádiz- Reina María, y Cádiz-Centelles-Sornells-Vivons sólo hay 7 bancos públicos de libre acceso.

Las mesas y sillas de pago han proliferado sin control, ni delimitación ni por supuesto señalización en el dominio público municipal con la actual ordenanza municipal de terrazas.

En todos estos cruces hay un total de 384 mesas hosteleras y sus correspondientes sillas; todos estos ampliados chaflanes disponen de autenticas “macroterrazas” de hasta 17 mesas.

Esta evidente desproporción en los espacios públicos se extiende a la mayor parte de Ruzafa a pesar de la reciente y completa reurbanización del barrio.


Relación mesas privadas / bancos públicos de libre acceso en los principales cruces de Ruzafa
- Cuba-Puerto Rico: 56 mesas y 224 sillas; 2 bancos públicos de libre acceso.
- Sueca-Puerto Rico: 106 mesas y 424 sillas; 1 banco público de libre acceso.
- Sueca-Buenos Aires: 26 mesas y 104 sillas; 0 bancos públicos de libre acceso.
- Cádiz-Puerto Rico-Cura Femenia: 37 mesas y 148 sillas; 0 bancos públicos libre acceso.
- Literato Azorin-Cádiz- Reina María: 85 mesas y 330 sillas; 3 bancos públicos.
- Cádiz-Centelles-Sornells-Vivons: 74 mesas y 296 sillas; 2 bancos públicos libre acceso.

El problema no es que haya calles peatonales en Ruzafa, el problema es que son “falsas” calles peatonales.

En las diferentes fases del proceso de reurbanización algunas calles de Ruzafa se peatonalizaron por completo (Clero, Cura Femenia, Prim, Sornells, Vivons...). El problema no es que haya calles peatonales en Ruzafa, el problema es que son “falsas” calles peatonales: no son ni peatonales y cada vez menos residenciales, ni tan siquiera son comerciales, cada vez mas sus vecinos y residentes son sustituidos por turistas que se alojan en apartamientos ilegales de corta estancia.

Estas cinco calles peatonales disfrutan de 25 locales hosteleros con 22 terrazas, y están en el entorno de dos salas de discotecas y tres disco-pubs. No son calles peatonales, alguna de estas calles es una zona cero con dos disco-pubs a menos de 65 metros con horarios, concentraciones/aglomeraciones y resonancias/estridencias completamente incompatibles con el descanso vecinal, la intimidad y la dignidad de la vivienda.

Los negativos efectos acumulativos de todas estas actividades en una zona residencial no son los propios del mínimo bienestar. Algunas de estas calles se utilizan de día para el tráfico oportunista y para el prolongado reparto hostelero de bebidas más allá del horario autorizado; de noche, en las menos saturadas por las actividades hosteleras, para el aparcamiento motorizado privado de la clientela hostelera y la práctica del animado botellón, y otros asuntos “menores”.

2.- TERRAZAS PARA TODOS Y BARATAS. LA ORDENANZA MUNICIPAL Y SUS TASAS
La ordenanza de terrazas: la ley de la hostelería que entregó en bandeja de plata el reurbanizado barrio de Ruzafa a una única modalidad de negocio.

La ordenanza de actividades en la vía pública, por la que se rigen las terrazas de los bares y restaurantes en Ruzafa, entró en vigor en septiembre de 2014. No es la ley de la calle -como propagó el anterior consistorio- es la norma que ha consolidado la ocupación privada del dominio público municipal, sus plazas y aceras. No es la norma que iba a controlar las terrazas. Es la ordenanza que ha legitimado la apropiación privada de la mayor parte de los espacios públicos ganados en este barrio con las recientes reurbanizaciones, sus ampliadas aceras y chaflanes, sus calles peatonales...

Esta nueva ordenanza es la ley de los hosteleros y una norma para garantizar la recaudación del consistorio.

Es una ordenanza que ha impulsado la proliferación de las terrazas de los hosteleros en la ciudad de Valencia y muy especialmente en el barrio de Ruzafa tras las recientes obras de “reurbanización”.

Terrazas para todos

Con la ordenanza en vigor, prácticamente todos los locales hosteleros pueden disponer de terraza en la ampliada Ruzafa. Los únicos límites a sus terrazas los determina la superficie de la acera disponible, tanto la propia como las colindantes, y en menor medida la regulación municipal de la ocupación de su dominio público. Todo ello, a pesar de que las autorizaciones de terrazas “se conceden a precario y podrán ser denegadas, modificadas, suspendidas temporalmente o revocadas en cualquier momento por el Ayuntamiento por razones de interés público”. Son actos municipales discreccionales.

Las “microterrazas“ pegadas a la fachada de fincas residenciales: si la acera de la finca residencial donde se encuentra un bar o restaurante es inferior a 3 metros, este podrá tener una terraza de medio metro pegada a la pared de la finca donde se encuentre “respetando” la banda de “libre” transito peatonal. Terrazas prácticamente para todos en un barrio reurbanizado, con aceras y chaflanes ampliados, ¿para quién?.

De las terrazas a las “macroterrazas”, en el resto de casos. Los metros cuadrados de terraza de cada establecimiento hostelero se establecen básicamente a partir del aforo y del tamaño del local. La mayor parte de los bajos comerciales de Ruzafa son de reducida dimensión, no llegan a los 200 metros, por lo que la superficie máxima de terraza no puede superar los 60 m2. De acuerdo con la normativa general, se permiten 1,75 m2 de terraza por cada persona que quepa en el interior del local hostelero, su aforo interior, Con esta proporción siempre habrá más espacio afuera de un establecimiento público, como el hostelero, cerrado y más o menos insonorizado, pero en plena calle, en un espacio abierto y residencial. Los únicos limites a las macroterrazas: disposición de dominio/espacio público municipal.

Los vecinos no pintan nada, ni tan siquiera los de las fincas residenciales colindantes al local hostelero

El local hostelero puede además ocupar con su terraza las aceras de las dos fincas colindantes con la simple conformidad de los titulares de la actividad de los locales inmediatamente contiguos o, cuando el local no tenga actividad, con la del propietario del inmueble sin ser necesaria ninguna conformidad por parte de los residentes y vecinos de tales fincas. Solo es necesaria la participación de algún residente cuando el inmueble contiguo al local hostelero sea una vivienda o un zaguán de viviendas. Ya se está generando un particular negocio, al margen del consistorio y en su dominio publico, entre los propietarios de bajos o los mismos locales comerciales con los hosteleros colindantes.

Cualquier pequeño local cumple con esta relajada regulación, aún sin tener prácticamente fachada en el edificio en el que se ubica, puede recurrir incluso al local colindante. Al margen del cumplimiento de la normativa de accesibilidad, los únicos límites a las terrazas hosteleras los determina la superficie de la acera disponible, propia y colindantes, que en el reurbanizado barrio de Ruzafa han dado lugar a “macroterrazas”.

Las terrazas pueden complementar los negocios hosteleros, pueden incluso ser su única razón de ser de determinados negocios en el barrio de Ruzafa. De hecho, algunos locales no atienden a lo más básico: local pequeño, terraza pequeña.

Los vecinos ya hemos constatado suficientemente cómo una gran parte de los locales hosteleros de Ruzafa son realidad depósitos de mesas y sillas -y de toda clase de mobiliario- cuando están cerrados y cómo ni tan siquiera se respeta la normativa de accesibilidad ni para los invidentes, ni el normal tránsito peatonal, ni en las “macroterrazas” ni por supuesto en las “microterrazas”, ¿qué animado o relajado cliente hostelero se mantiene pegado medio metro a la pared de la finca donde se encuentre el taburete o la mesa auxiliar sin adentrarse en la banda de libre paso peatonal?. El incumplimiento de horarios y la sobreocupacion es otro tema y grande.

Esta nueva ordenanza es la ley de los hosteleros y una norma para garantizar la recaudación del consistorio.

Las tasas de terrazas: quien contamina ni paga, cuando paga

Es una ordenanza para garantizar al ayuntamiento la recaudación por las terrazas. La actual ordenanza no pretendía "controlar" las terrazas sino mas bien asegurarse el cobro de las tasas municipales. Casi una tercera parte de los hosteleros no pagan por el uso y disfrute del espacio público de todos con sus terrazas. Por contra, en el IBI que pagan los vecinos su impago es del orden del 10%.

Esta es una de las razones de la actual ordenanza de terrazas, pues para su concesión y renovación el hostelero deberá estar al corriente en el pago de cualquier tasa o impuesto municipal. La actual ordenanza pretende más garantizarse el cobro de la tasa municipal de terrazas que recaudar pues alquila el dominio público municipal a precios irrisorios.

Quien contamina en entornos residenciales y espacios abiertos, cuando paga, paga poco.

Las tasas de terrazas: baratas y a penas cubren lo que se ensucia, quien contamina cuando paga, paga poco

Este consistorio “alquila” el dominio público municipal en el barrio de Ruzafa a precios irrisorios a la hostelería, a 35,85 euros el metro cuadrado al año, apenas 3 euros/m2 de terraza/año. Un precio que apenas compensa el presupuesto municipal destinado a la limpieza de las saturadas aceras, en torno a los 5 euros/m2/año, pese a la obligación de limpieza que tienen los hosteleros de "sus" terrazas.

A pesar de las recientes reurbanizaciones de Ruzafa y sus ya ampliados chaflanes, habría que volver a ampliar aceras para cumplir con la actual ordenanza.

A tarifas de apenas 3 euros por metro cuadrado año de terraza privada en el dominio público municipal -cuando los alquileres de las los locales comerciales se multiplican por diez o incluso por más cuando la actividad es hostelera- la única apuesta municipal en determinados barrios como el de Ruzafa es la hostelera y en absoluto la mínima promoción de su entramado comercial, su diversidad comercial, que es la que hace barrio y retiene población. Sin comercio no hay barrio. Sin vecindario no hay comercio.

3.- EL COMERCIO DE BARRIO Y LA HOSTELERIA DE LA CIUDAD DE VALENCIA EN RUZAFA

Lo que es relevante es que una única actividad privada, cada vez más de fin de semana y de tarde, ocupa y se apropia el renovado dominio público municipal de Ruzafa (sus ampliadas aceras y chaflanes) a unos precios que no tienen comparación con el que realmente pagan el resto de actividades no hosteleras. Si comparamos lo que cualquier hostelero paga mensualmente por su bajo comercial con lo que le cobra anualmente por la terraza este consistorio se explican parte de las inagotables necesidades de espacio exterior a bajo precio de la hostelería en Ruzafa.

A este “precio” de 3 euros por metro cuadrado año la mayor parte de los comercios que todavía subsisten en Ruzafa ampliarían sus escaparates invadiendo las aceras como los hosteleros con sus terrazas, y acabarían su jornada laboral a unos horarios que no serían tan molestos para sus vecinos y ofrecerían un servicio de proximidad a lo largo de casi toda la semana compatible con la convivencia vecinal y la conciliación familiar.

El ayuntamiento de Valencia ha entregado en bandeja de plata el reurbanizado barrio de Ruzafa a la hosteleria de la ciudad de Valencia mientras el comercio de proximidad desaparece y los vecinos abandonan el barrio por acoso acústico o mero hartazgo. Sin comercio no hay barrio. Sin vecinos tampoco.

El aparcamiento y la carga y descarga comercial

Ni que decir tiene que la ampliación de chaflanes derivado de la completa reurbanización de Ruzafa redujo considerablemente las plazas de aparcamiento público en el barrio, así como las destinadas a la carga y descarga comercial, en un barrio histórico con un déficit crónico de plazas de aparcamiento privado. Los ampliados chaflanes, hoy denominados “orejones” están ocupados en su mayoría por terrazas hosteleras.

Los espacios públicos de este barrio no son espacios de calidad ni para el comercio de proximidad ni para las personas, los vecinos y vecinas de Ruzafa, De la saturación de terrazas a la saturación acústica tanto del núcleo histórico tradicional de Ruzafa como de su ensanche popular.

4.- 230 TERRAZAS EN RUZAFA. DE LA SATURACIÓN DE TERRAZAS A LA SATURACIÓN ACÚSTICA: "MÁS TERRAZAS = MÁS RUIDO"


La hostelería en sus diferentes modalidades es una actividad calificada por ley como molesta por ruidos, vibraciones, olores y humos. Esta actividad tiene lugar en establecimientos públicos, pero sobre todo en los espacios abiertos de sus terrazas y en el dominio público municipal de gran parte de Ruzafa.

Los hosteleros podrán insonorizar sus locales pero el ruido continuará en sus terrazas en entornos residenciales y con horarios que llegan a las 2:00 horas, durante 8 meses del año. La saturación de los espacios públicos con terrazas genera saturación acústica, y son uno de los principales focos de ruido del barrio de Ruzafa, su proliferación descontrolada y la discreccionalidad municipal en su autorización está en la base de las crecientes molestias a los vecinos de Ruzafa.

Este año se ha vuelto a superar el récord de matriculaciones de terrazas en la ciudad de Valencia.

En la ciudad de las terrazas, Ruzafa el barrio de las terrazas: los 350 establecimientos hosteleros del núcleo histórico tradicional de Ruzafa y su ensanche popular disponen de más de 230 terrazas, una parte significativa en fincas colindantes al local hostelero.

Terrazas para todos. Con la ordenanza vigente, incluso los locales con ambientación musical, especialmente los “salones lounge”, pueden solicitar la autorización de terraza siempre que dispongan de mesas y sillas en su interior.

Las actividades propias de los locales con ambientación musical deben realizarse con puertas y ventanas cerradas. La continua entrada y salida desde el interior de sus animados locales representa un claro aumento de los niveles de ruido en las calles, que son incompatibles con los los requeridos para zonas o barrios de dominio residencial predominante. El ayuntamiento de Valencia debería revocar las autorizaciones de terrazas a todos los locales con ambientación musical.

Es por ello que si queremos realmente controlar y reducir los niveles de ruido en Ruzafa para proteger el derecho al descanso de sus vecinos es preciso establecer medidas correctivas que limiten las terrazas hosteleros en el barrio en vez de saturar los espacios públicos que deberían ser lugares de encuentro saludable y sociabilidad.

Si el actual consistorio quiere hacer de las aceras, los chaflanes, las calles peatonales y las plazas de Ruzafa espacios de calidad para las personas y potenciar el comercio de proximidad, es necesario rescatar el barrio de Ruzafa de la saturación de terrazas para así reducir la contaminación ambiental y acústica que generan y garantizar la accesibilidad, movilidad, el mero transito peatonal.

El actual gobierno municipal debería proteger los derechos más básicos y fundamentales (la intimidad personal y familiar, a inviolabilidad del domicilio, la salud, un medio ambiente adecuado y una vivienda digna) vulnerados por la contaminación acústica que tiene lugar en las vias públicas de los barrios residenciales, en vez de rescatar y proteger el monocultivo hostelero en este todavía barrio. Sin vecinos no hay barrio. Sin comercio no hay barrio, sino un parque temático al servicio exclusivo de la hostelería de la ciudad de Valencia.

5.- MODELO DE BARRIO FRENTE AL “PARQUE TEMÁTICO HOSTELERO” CON MEROS FIGURANTES, LOS VECINOS


De lo que se trata es del modelo de barrio que queremos, y el modelo de barrio lo definen los usos y los abusos consentidos. Sin comercio de proximidad no hay barrio, sin vecinos tampoco.

Es preciso apostar por la diversidad comercial propia de los barrios habitables frente a la uniformidad hostelera más propia de los parques temáticos; un modelo de barrio en el que se garanticen la convivencia y el equilibrio de vecinos, comercios y hostelería, en el que no se fomente exclusivamente una única modalidad de negocio, el maduro y poco innovador negocio hostelero de bajo coste y elevado impacto ambiental para sus residentes.

En entornos sobrecargados y saturados, sin espacios públicos para la relación, el intercambio y la sociabilidad no hay vecinos ni comercio: no hay barrio de Ruzafa, sino más bien un centro comercial abierto al servicio exclusivo de la hostelería de la ciudad de Valencia.

En los parques temáticos los trabajadores y/o figurantes abandonan sus trabajos al final de su jornada laboral y se desplazan a sus aposentos para descansar. En el “parque temático hostelero” de Ruzafa, los vecinos -sus actuales figurantes- permanecen en un entorno saturado acústicamente por las actividades hosteleras, incluidas las terrazas, mientras se despliega el “festival” sobre todo los fines de semana.

6.- SOLUCIONES: DEL “PLAN DE CHOQUE DE TERRAZAS” AL PLAN DE ORDENACIÓN DE TERRAZAS PARA LA RECUPERACIÓN DE ESPACIOS PÚBLICOS DE CALIDAD PARA LOS VECINOS, COMERCIANTES Y HOSTELEROS DE RUZAFA

El “plan de choque de terrazas”

El verano de 2014 entraba en vigor la actual ordenanza reguladora de la ocupación del dominio público municipal que, entre otras cosas, "exigía" que las terrazas de bares y restaurantes quedaran marcadas con pintura verde para así delimitar el espacio del que los establecimientos podían hacer uso. Ni el pasado ni el actual gobierno municipal han conseguido delimitar y poner de relieve los “extremos” en la ocupación de los espacios públicos ganados por las recientes reurbanizaciones del todavia barrio de Ruzafa y apropiados por la hostelería de Valencia.

Ni con planes municipales de choque, como el “plan de choque de terrazas” que empezó el actual gobierno municipal en octubre de 2015 y que ha priorizado precisamente la señalización de las terrazas de Ruzafa. Por definición, los planes de choque tienen que ser inmediatos y resolutivos, estamos en mayo de 2016 y se continúa priorizando el barrio de Ruzafa. Sus resultados están a la vista, hay más terrazas en este barrio, más de 230.

La saturación de terrazas no se reduce con señalizarlas y delimitarlas legalmente, después de los excesos consentidos durante años por el anterior consistorio. No se trata sólo de atender a los excesos y abusos sin control en este barrio, que los hay y no se limitan a un reducido grupo de hosteleros, y a quien corresponde sancionarlos es al ayuntamiento de Valencia.

El barrio de las más de 230 terrazas y la ciudad de las casi de 4.000 terrazas necesita una nueva ordenanza que regule adecuadamente el uso del dominio público municipal de forma que sus espacios públicos (plazas, calles -incluidas las peatonales-, aceras, chaflanes,...) vuelvan a sus ciudadanos y vecinos, también en la ciudad de Valencia, sean espacios accesibles, transitables, agradables para todos los vecinos, pequeños y mayores, incluidas las personas con movilidad reducida.

Si el nuevo consistorio de la ciudad quiere proteger el derecho al descanso de los vecinos de Ruzafa y de la ciudad, es necesaria una nueva ordenanza que realmente regule y limite la ocupación privada del dominio público municipal, no un cambio de unos pocos articulillos. Todos los cruces de Ruzafa indicados son suficientemente ilustrativos de la necesidad de una nueva ordenanza de "terrazas".

El consistorio debería solucionar los problemas de las zonas acústicamente saturadas, no trasladarlos de barrio en barrio por la ciudad de Valencia, del Carmen a Ruzafa, o simplemente demorar su resolución judicial. El actual consistorio no debería limitarse a no crear "otro caso Ruzafa" derivado de nuevas reurbanizaciones como la reciente del Ensanche menos popular sino solucionar el "caso Ruzafa".

El Plan de Ordenación de terrazas para la recuperación de espacios públicos de calidad para los vecinos, comerciantes y hosteleros de Ruzafa

Mientras se modifica la actual ordenanza es necesario al menos aplicar en todos estos cruces y en las calles saturadas por terrazas medidas correctivas de alcance que sí permite la normativa municipal de terrazas. El articulo 59 de la ordenanza de terrazas establece que “Cuando por el Ayuntamiento se constate, a la vista de las nuevas peticiones de ocupación y de las terrazas ya autorizadas en un determinado ámbito, que existe una saturación de terrazas en el dominio público, los límites máximos señalados en el artículo anterior se reducirán aplicando criterios correctores en función del grado de saturación de la zona”.

A partir de la discrecionalidad municipal en las autorizaciones municipales de terrazas -que no son licencias ni patentes de corso de por vida- es posibles reordenar los usos de los espacios públicos de Ruzafa para su desaturación, de forma que se recuperen como espacios de calidad para el intercambio, el encuentro, la relación y la sociabilidad de los vecinos de Ruzafa.

Es un tema de voluntad política, el mismo plan de choque de terrazas podría haber ser suficientemente efectivo y resolutivo con la mera aplicación del art. 59 de esta norma reguladora del uso del espacio publico de todos.

Esta medida de reordenación de terrazas ha sido propuesta por el colectivo vecinal Russafa Descansa a la Mesa de Contaminación Acústica de Ruzafa que está desarrollando este consistorio con el resto de asociaciones vecinales y hosteleras. Esta propuesta se sitúa en el marco del “Plan Integral de desaturación acústica del barrio de Ruzafa” presentado en la última reunión de la Mesa de febrero de 2016, que ha sido remitido a los concejales municipales con responsabilidades en la materia y al conjunto de las asociaciones vecinales que participan en la misma.

En cualquier caso, en tanto el actual gobierno municipal no comience a aplicar medidas correctoras de medio alcance no se demora sino se apresura la declaración judicial de una nueva zona acústicamente saturada en la ciudad de Valencia, en la medida que las terrazas son tan sólo uno de los focos de contaminación acústica del barrio de Ruzafa, y su problemática es la asociada a la saturación generalizada.

La capacidad de carga de Ruzafa como barrio hace tiempo que superó sus límites. El modelo propuesto para Ruzafa como “parque temático hostelero” exclusivo de la ciudad de Valencia es claramente insostenible para sus vecinos y su comercio de proximidad, y lo será aún más con la proliferación de pisos turísticos ilegales.

Nota final: el colectivo vecinal RUSSAFA DESCANSA se constituirá como ASOCIACIÓN DE VECINOS Y VECINAS la tarde del próximo martes 31 de mayo en el Convento franciscano de Ntra. Sra. de los Angeles de Ruzafa. En esta reunión se aprobarán los “Principios básicos de actuación para el ejercicio derecho al descanso en Ruzafa y la recuperación de sus espacios públicos”

Ruzafa, 26 de mayo de 2016
Russafa Descansa



Ruzafa, 11 de mayo de 2016

A PROPÓSITO DE LOS APARTAMENTOS TURÍSTICOS ILEGALES EN LA CIUDAD DE VALENCIA Y EN EL BARRIO DE RUZAFA

Los pisos turísticos se han generalizando no solo en la ciudad de Valencia, en el barrio de Ruzafa a marchas forzadas. En el saturado barrio de Ruzafa ya son otro de los problemas con el que tienen que “convivir” solo sus vecinos, en sus propias fincas.

No son solo los vecinos de Ruzafa los que se están quejando al ayuntamiento de Valencia. Los mismos hoteles del barrio, como el de el cruce de Sueca-Denia, ya se han quejado a este consistorio por las continuas "molestias" de los clientes de uno de los grandes apartamentos turísticos de este cruce, pues incomodan a su clientela. En otras calles de este barrio estos pisos turísticos ya están generando problemas a los vecinos y residentes que comparten patios de manzana, están sufriendo las molestas consecuencias de esta nueva modalidad hotelera en Ruzafa. Es un turismo de muy bajo coste y de un alto coste para los vecinos en todos los sentidos, que también incorpora el turismo alcoholizado de otras latitudes e islas del Mediterráneo más cercano. En su momento, determinados pisos con turistas de Ruzafa ya requirieron la presencia policial e incluso de los bomberos después de una ajetreada noche. En barrios como el Carmen y Velluters ya son públicas las quejas y denuncias de sus vecinos y asociaciones vecinales, que han llegado incluso a los tribunales de justicia.

A este consistorio no solo le basta con desproteger y saturar acústicamente a los vecinos de Ruzafa desde las aceras, chaflanes, calles y plazas... con locales de ambientación musical mal insonorizados. Esta corporación municipal pretende rescatar y legalizar el negocio privado y cada vez más profesionalizado de los pisos turísticos ilegales. Mientras tanto este gobierno municipal continúa desamparando derechos básicos y fundamentales vulnerados por la contaminación y saturación acústica (inviolabilidad del domicilio, la intimidad personal y familiar, la protección de la salud, medio ambiente adecuado y a una vivienda digna, al margen de la integridad física y moral) con la misma permisividad con la que ha mantenido y mantiene los apartamentos turísticos ilegales desde hace bastante tiempo en la ciudad de Valencia, también en el todavía barrio de Ruzafa.
Hace años que los tribunales han asumido que el ruido que se cuela en nuestras casas vulnera el derecho fundamental a la inviolabilidad del domicilio. A partir de ahora, también en las mismas comunidades de vecinos mediante la legalización de esta modalidad de negocio en fincas y zonas residenciales.

¿Generalizamos las “molestias” de las calles de Ruzafa también al interior de sus comunidades de vecinos? ¿Está animando este consistorio otra forma de saturación acústica, esta vez en las mismas fincas de los vecinos, para más adelante responsabilizarles de la declaración administrativa y/o judicial de una nueva zona acústicamente saturada en la ciudad de Valencia?

¿Rescatamos personas y protegemos derechos básicos que deben prevalecer sobre el derecho absoluto a la diversión o al negocio de los pisos turísticos, incompatibles con el derecho al descanso en barrios residenciales y núcleos históricos como el de Ruzafa? o realmente ¿Este nuevo consistorio rescata negocios ilegales en fincas residenciales? ¿Volverá a pasar lo mismo en Ruzafa, tarde y mal?

Este gobierno municipal en vez de recurrir una sentencia judicial que afecta a cinco pisos turísticos de la ciudad, en vez de proteger a los vecinos en sus mismas comunidades y fincas, pretende rescatar de la ilegalidad al negocio de los pisos turísticos a costa del malestar de sus ciudadanos.

El modelo de ciudad y de barrio lo definen los usos, pero también los abusos consentidos y la permisividad de este consistorio, ahora con el negocio “low cost” de los pisos para turistas de corta estancia. ¿Es este el modelo de turismo de bajo coste por el que apuesta el actual gobierno municipal?

Si lo que pretende el actual gobierno municipal es avanzar hacia barrios sostenibles y equilibrados, con una mínima calidad de vida, es precisa además una campaña de inspección de esta modalidad de alojamientos turísticos ilegales en este todavía barrio. Esta medida preventiva de la saturación hostelera ha sido propuesta por este colectivo vecinal a la Mesa de Contaminación Acústica de Ruzafa, que está desarrollando este consistorio con el resto de asociaciones vecinales y hosteleras.

Ruzafa, 11 de mayo de 2016
Russafa Descansa


Valencia, 28 de abril de 2016

CONSTITUIDA UNA PLATAFORMA VECINAL PARA LA PROTECCIÓN DE LOS DERECHOS CIUDADANOS VULNERADOS POR LA CONTAMINACIÓN Y SATURACIÓN ACÚSTICA EN LA CIUDAD DE VALENCIA

Reunidos la tarde de ayer jueves, entidades vecinales de Ciutat Vella y Ruzafa han constituido una Plataforma conjunta para reclamar y proteger los derechos ciudadanos vulnerados por la contaminación y saturación acústica.
Con presencia de representantes de la Coordinadora d'Entitats Veïnals de Ciutat Vella, l'Associació de Veïns i Comerciants La Boatella, l'Associació de Veïns del Carme y del colectivo vecinal Russafa Descansa, se constituye una Plataforma conjunta vecinal contra el botellón en los entornos de las discotecas, las ilegalidades de los establecimientos hosteleros, las “macroterrazas”, los apartamentos turísticos, ...
Estas asociaciones de Ciutat Vella y Ruzafa acuerdan intercambiar experiencias e información para desarrollar acciones conjuntas en esta materia, denunciando la permisividad municipal, los persistentes abusos consentidos, las irregularidades continuamente subsanadas... En otros ámbitos de regulación municipal y/o autonómica menos estrictos, por contra, todo lo anterior no se tolera por sistema, se sanciona (aparcar puntualmente un vehículo en la zona reservada a discapacitados frente a la sistemática inaccesibilidad del dominio público municipal por sobreocupación autorizada o no con terrazas). Todo ello al margen de la desmesurada concentración de actividades hosteleras, que por sus horarios son especialmente incompatibles con el derecho al descanso en barrios y zonas de predominio residencial. Sus negativos efectos externos no son interiorizados por quien contamina sino soportados y socializados en exclusiva entre los vecinos.
Esta plataforma se constituye también para la recuperación de espacios públicos de calidad para sus vecinos y la promoción de la diversidad comercial de sus barrios como alternativa al monocultivo hostelero. El constatado “aterrazamiento” de las reurbanizaciones y/o “peatonalizaciones” llevadas a cabo en estos barrios solo ha conllevado la apropiación del dominio publico municipal -a un precio de saldo- por una única modalidad de negocio que endemiza cualquier posibilidad de revitalización comercial. La capacidad de carga de las tramas urbanas no solo estrechas sino protegidas de estos barrios se ve ampliamente superada por la desmesurada concentración de establecimientos hosteleros. Su resultado una mayor saturación acústica con la que conviven exclusivamente sus vecinos y residentes, cuyos derechos son sistemáticamente vulnerados.
A este respecto, el mismo Síndic de Greuges le recuerda constantemente al ayuntamiento de Valencia que los tribunales de justicia declaran reiteradamente que la contaminación acústica (ruido y vibraciones) incide perniciosamente sobre el derecho sobre el derecho fundamental a la inviolabilidad del domicilio (art. 18.1 de la Constitución) y los derechos constitucionales a la protección de la salud (art. 43 CE), a un medio ambiente adecuado (art. 45) y a una vivienda digna (art. 47 CE). Es por ello que la jurisprudencia establece que a los poderes públicos les resulta completamente ineludible su firme protección.

Los representantes de estas asociaciones no descartan plantear acciones judiciales conjuntas ante la omisión del deber de protección pública de tales derechos básicos.

Estas entidades exigen a todos los responsables municipales que actúen con mayor contundencia sobre los grandes focos de ruido y malestar vecinal -el botellón de los entornos de las discotecas- y sus causas -su mera presencia y las aglomeraciones de personas que atraen estas modalidades de negocio a zonas de predominio residencial- Estas asociaciones reclaman que este consistorio priorice sus actuaciones en el origen del malestar vecinal en vez de apresurarse de buena mañana y todos los fines de semana para limpiar con recursos públicos sus consecuencias finales: desperfectos en el mobiliario urbano, suciedad, olores y orines, no solo en las vías publicas sino también en parques infantiles e incluso portales de fincas residenciales vandalizadas todos los fines de semana; todo ello para evitar que se visibilicen estos negativos efectos externos, mientras determinadas modalidades de negocio que deberían hacerse "corresponsables" de tales perniciosos resultados solo se dedican a ampliar continuamente su cadena de valor desde el "tardeo al discotequeo" y a promocionarlo sin rubor a costa de la degradación de entornos residenciales y núcleos históricos tradicionales a los que no solo saturan acústicamente sino que exponen continuamente a intensos niveles de ruido a "sus" cautivos vecinos que no pueden decidir cuando acaba la fiesta de los que vienen simplemente de visita, incluso con charangas que amenizan sus calles, y si pueden decidir cuando se retiran a sus aposentos y en las condiciones que más oportunamente consideren.

El colectivo Russafa Descansa, por su parte, atenderá a las medidas establecidas en su momento en la declaración de la zona acústicamente saturada del Carmen y a la experiencia acumulada por las entidades vecinales de Ciutat Vella. Todo ello para ampliar las medidas correctivas a implantar en este barrio en una declaración que cada vez resulta más imprescindible.

Al mismo tiempo, las asociaciones reunidas en la tarde de ayer acuerdan hacer extensiva esta plataforma vecinal a otras entidades de la ciudad de Valencia que trabajan activamente en zonas acústicamente saturadas como consecuencia de la dejación de funciones de esta corporación municipal en materias de su exclusiva responsabilidad.

Estas entidades consideran que no se trata tampoco de trasladar y desplazar determinados eventos y negocios extraordinarios a los maltrechos barrios considerados periferias de los grandes centros históricos de la ciudad, como ha vuelto a tener lugar en La Punta este año. Su revalorización y redignificación no vendrá de la mano de los macrobotellones organizados en su doblemente maltratada huerta y vecindad.

Estas entidades responsabilizan al ayuntamiento de Valencia de centrifugar continuamente el ruido y el malestar por toda la ciudad, incluso hasta la misma Punta con macrobotellones, sin acometer su solución. La hostelería de la ciudad de Valencia mientras tanto va de ZAS en ZAS, deteriorando y deshabitando barrios, "zonas quemadas", donde finalmente acaban por generalizarse apartamentos turísticos del todo ilegales que imposibilitan su revitalización demográfica. ¿Se “prolongará” este proceso también a los barrios del Cabañal, Canyamelar...? ¿De qué ha servido la “experiencia” municipal en los barrios de Ciutat Vella y Russafa?

Valencia, 28 de abril de 2016


Associació Veïns i Comerciants La Boatella
l'Associació de Veïns del Carme
Coordinadora Entitats Veïnals Ciutat Vella
Col.lectiu veïnal Russafa Descansa

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